El envío masivo de cartas por parte del Ministerio de Trabajo a los empresarios agrarios, de la que se han hecho eco ya algunos medios, ha soliviantado al sector, que considera que el Departamento de Yolanda Díaz no termina de entender las peculiaridades de esta actividad en relación a la necesidad puntual de mano de obra en función del comportamiento de las diferentes cosechas de temporada en el campo español.
¿Entiende Trabajo las características específicas de la actividad laboral en el sector agrario?
Así, Jóvenes Agricultores-ASAJA Alicante considera que el envío masivo de estas cartas a los empresarios agrarios, según Trabajo, por “irregularidades en la utilización de contratos temporales que superan los períodos máximos autorizados”, instándoles a que transformen esos contratos temporales en fijos en el plazo de un mes y amenazando de inspecciones y duras sanciones si no se cumple, es la puntilla que le faltaba a un sector, duramente castigado ya por los bajos precios en origen, las restricciones por el COVID y el cierre del canal HORECA.
Los agricultores denuncian también que están sufriendo inspecciones laborales dos y tres veces por semana, y consideran “inadmisible el afán recaudatorio injustificado de Trabajo ante un sector esencial marcado por la estacionalidad de muchas de sus campañas.”
El sector agrario de la provincia de Alicante, señala esta organización, vive uno de los momentos más delicados de los últimos años, debido a la crisis por la pandemia del coronavirus, la situación crónica de bajos precios en origen de muchos cultivos y, como guinda final, el cierre total de la restauración y en canal HORECA, que ahora ha comenzado su reapertura de manera muy gradual.
Por todo ello, desde Jóvenes Agricultores-ASAJA Alicante lamentan la sorprendente campaña de inspecciones, que ha puesto en marcha el Ministerio de Trabajo y Economía Social, y sobre la que están ya avisando a través del envío masivo de cartas a los empresarios agrarios por, según dicen, “irregularidades en la utilización de contratos temporales que superan los períodos máximos autorizados”.
Misivas en las que, además, se les insta a que transformen esos contratos temporales en fijos en el plazo de un mes, advirtiendo que, en caso de no proceder así, se emprenderán actuaciones inspectoras y se impondrán duras sanciones, señala esta organización agraria.
“Estas comunicaciones se amparan en el hecho, señala ASAJA-Alicante, de que cuando se supera un encadenamiento de dos o más contratos temporales en una misma empresa en el campo, los empresarios tienen que convertir el contrato eventual en un contrato fijo”.
Sin embargo, añade esta organización, “lo que no se tiene en cuenta es la naturaleza propia del trabajo en el campo, que dispone de un Régimen Especial Agrario, dentro del Régimen General de la Seguridad Social, sobre la base de la cotización por jornadas reales y están banalizando este mecanismo para perseguir y dar correctivos a los empresarios agrícolas”, según denuncia Eladio Aniorte, presidente de ASAJA Alicante, quien añade que “no se está teniendo en cuenta tampoco la singularidad de un sector que en el que, por la eventualidad de su campañas, predominan muchas veces los contratos temporales.
Por eso, afirma Aniorte, consideramos que “ni es el momento para esto y, por supuesto, no son las formas, porque nos están tratando como si fuéramos delincuentes y estuviéramos infringiendo la ley por desarrollar nuestro trabajo”.
Por todo ello, ASAJA Alicante quiere dar a conocer su malestar y preocupación por dicha campaña, ya no solo de los empresarios agrícolas, sino de los trabajadores del campo afectados por la medida que se plantea y, al respecto, ya ha solicitado una reunión urgente con la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, para que se suspendan las acciones, que ya están en marcha, y las actuaciones inspectoras anunciadas en dichas cartas, así como para poner en su conocimiento con detalle las particularidades del sector agrario, “el cual merece un tratamiento diferenciado en el marco de la campaña inspectora de lucha contra el fraude y regularización de la contratación temporal irregular”, añade esta OPA.
Eladio Aniorte asevera que “no podemos permitir que un sector que, durante la pandemia ha sido declarado como esencial, que no ha dejado de trabajar ni un solo día para garantizar el abastecimiento de alimentos de primera necesidad a la población, incluso en los momentos más crudos de la pandemia, ahora sea maltratado y vilipendiado de esta manera.”
En su opinión, “se está tratando a los agricultores como delincuentes, saltándose su presunción de inocencia y buscando con inspecciones inquisitorias e injustificadas el mínimo resquicio legal para imponerles multas de alto valor económico.”
Asimismo, desde ASAJA-Alicante se señala que “lo que piden los agricultores a la Administración es que se busquen fórmulas que les permitan desarrollar su trabajo, teniendo en cuenta la estacionalidad de cultivos, ya que algunas cosechas requieren de trabajadores uno o dos días, y piden que cese el acoso que están viviendo en los últimos meses, donde pequeños empresarios están recibiendo inspecciones dos y tres veces en la misma semana, y la imposición de multas totalmente desproporcionadas.”