El Consejo de Ministros aprobó este martes 30 de marzo, a propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) el Real Decreto 201/2021, que modifica el Real Decreto 1338/2018, de 29 de octubre, por el que se regula el potencial de producción vitícola.
El Gobierno vuelve a flexibilizar plazos y controles de las autorizaciones de plantación de viñedo por Covid-19
El objetivo es adaptar la normativa nacional a las flexibilidades introducidas por el reglamento transitorio de la PAC en materia de autorizaciones de plantación de viñedo, con el fin de ayudar a los viticultores a afrontar las dificultades derivadas de la Covid-19.
Al respecto, se prolonga hasta el 31 de diciembre de 2021 la vigencia de las autorizaciones de nueva plantación y de replantación que caducaban en 2020 y, además, se da la posibilidad a sus titulares de renunciar a las mismas sin ser penalizados.
Del mismo modo, se amplía el plazo para presentar solicitudes de conversión de derechos de replantación hasta el 31 de diciembre de 2022; se prolonga la vigencia de las autorizaciones de conversión de derechos hasta el 31 de diciembre de 2025, y se amplía la vigencia de los derechos de replantación que caduquen en esta campaña y siguientes hasta el 31 de diciembre de 2025.
La finalidad de estas modificaciones en los plazos de gestión del potencial vitícola español, relativa a las autorizaciones de plantación, conversión y replantación de viñedos, es prolongar la caducidad de éstas, dadas la dificultad por parte de los viticultores de acometer las plantaciones y replantaciones en plazo por razón de la pandemia de Covid-19.
Con estos cambios de la normativa nacional también se flexibilizan algunos controles y se actualiza el listado de variedades autorizadas de uva de vinificación en España.
El real decreto entrará en vigor al día siguiente al de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), a excepción de las modificaciones relativas a las autorizaciones de nueva plantación y de replantación, que se aplican con carácter retroactivo desde el pasado 1 de enero de 2020.
Según el MAPA, las autorizaciones de viñedo constituyen la herramienta legal para el crecimiento controlado de la superficie de producción de uva de vinificación en todo el territorio de la Unión Europea.