La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) valora positivamente la intención anunciada ayer por Pedro Sánchez en el Senado de publicar un Real Decreto que obligue a cubrir los costes de producción de los ganaderos.
Pedro Sánchez: deberán revisarse los contratos para incluir los costes de producción en el precio de la leche
En concreto, el presidente del Gobierno afirmó en la sesión de control en Cámara Alta a una pregunta del Grupo Vasco, que el Gobierno obligará a revisar el precio de compra de la leche en los contratos de larga duración cuando se incrementen los costes de producción que no dependan del ganadero, aunque el contrato se haya firmado a precio fijo.
Así, afirmó que se va a modificar el decreto que regula los contratos lácteos, que deberán incluir una cláusula obligatoria “con el fin de garantizar los precios justos a los productores ante la crisis por la que atraviesa este sector.
Para UPA, se trata de una reivindicación histórica de los ganaderos y una cuestión “de justicia y de lógica”, afirmó Román Santalla, secretario de Ganadería de esta organización, quien añadió que “las declaraciones del presidente del Gobierno son positivas, pero ya pasó el tiempo de las palabras, hay que actuar ya para salvar a un sector que está muriendo poco a poco”.
El presidente del Gobierno respondió a una pregunta de Estefanía Beltrán de Heredia, senadora del Partido Nacionalista Vasco (PNV), acerca de si el Ejecutivo consideraba que el sector primario y, en concreto, el sector lácteo es estratégico para la economía española, viendo la subida de costes que está sufriendo.
Sánchez reiteró ese “carácter estratégico” del sector primario y destacó la actividad “tan sacrificada que realizan los ganaderos, que deben ordeñar los animales todos los días.”
Según cifras oficiales, de enero a octubre, los precios percibidos por su leche por los ganaderos se ha incremento un 3,8% de media, frente a un alza media del 16% del aumento de los costes de los piensos, lo que ha supuesto una reducción del 53% de sus márgenes de explotación.
Ante esto, el presidente del Gobierno aseguró en el Senado que se pondrán en marcha todas las medidas necesarias que aseguren que se cumple la Ley de la Cadena Alimentaria, en cuya reciente reforma se incluyen aspectos como la prohibición de la venta a pérdidas, el registro telemático de contratos o la posibilidad de denunciar incumplimientos directamente o a través de las organizaciones representativas.
Sánchez añadió también que, con este cometido, se ha incrementado el presupuesto de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), que va a trabajar con las autoridades autonómicas y el sector y, además, están apoyando la integración de los productores en cooperativas y asociaciones para mejorar su posición negociadora.
Asimismo, enumeró una serie de inversiones para modernizar el sector agrario y mejorar su competitividad, especialmente en los ámbitos de la eficiencia energética y el uso de energías renovables, la agricultura de precisión y la gestión de estiércoles.
También mencionó que los ministros de Agricultura de la UE han solicitado que se adopten medidas dentro de la Organización Común de Mercados (OCMA) ante un problema global que afecta a todos e hizo referencia al incremento del 30% de las ayudas asociadas al sector productor de leche con la nueva PAC, que se traducirán en 122 M€ anuales en beneficio de unas 13.000 explotaciones ganaderas.
Reparto de costes
Por su parte, UPA se preguntó cómo lograr el pago de un precio justo a los ganaderos, que cubra sus costes y les permita obtener una mínima rentabilidad. Y se respondió a sí misma señalando que “son ya varios los avances, que se van produciendo a nivel legislativo, pero los ganaderos ven cómo los contratos siguen sin avanzar en precio.”
Para esta organización existen varias claves para lograr un precio justo. En primer lugar, que los datos de costes de producción provengan de fuentes oficiales y se publiquen semanal o mensualmente.
Otra de las claves es que las industrias actualicen todos los contratos, con independencia de su fecha de finalización. UPA considera que “no es admisible que los ganaderos estemos asumiendo toda la subida de costes y sean industrias y distribución los que se queden con los céntimos de subida de la leche a los consumidores.”
En este sentido, los ganaderos instan a las industrias lácteas a dar “pasos adelante” en las negociaciones para incrementar el precio pagado a los productores”, añadiendo que “es tiempo para la negociación, pero también para la reivindicación, mientras que continúan saliendo a la calle (este 23 de diciembre frente a la planta de Leche Celta, en Meruelo, Cantabria) para que se les reconozca su trabajo y se les ofrezca un precio justo.