El ministro de Agricultura, Luis Planas, presentó este jueves 28 de julio, más tarde de lo previsto, como dijo, el “Informe del consumo alimentario en España 2021”, con el lema principal de que «hemos vuelto a salir a la calle», lo que se interpreta de que se recuperó ya el consumo de alimentos y bebidas fuera del hogar, aunque aún sin alcanzar los niveles pre-pandémicos de 2019.
No obstante, Planas sí que comentó que en este 2022 posiblemente se hayan recuperado esos niveles y que incluso puede que ya se hayan superado y se congratuló, una vez más, de que la cadena de suministro de los alimentos siga respondiendo de manera ejemplar, al garantizar el abastecimiento en los momentos de crisis (en la época más dura de la pandemia de Covid-19 y ahora, con la crisis causada por la invasión rusa en Ucrania y el fuerte incremento de los costes de producción por el alza de los precios de la energía y de las materias primas alimentarias).
El ministro se mostró convencido sobre que los datos de 2021 indican que “la cadena alimentaria sigue funcionando de manera eficiente y que ha logrado responder a todos los retos relacionados con el abastecimiento a los ciudadanos”. Agricultores, ganaderos y pescadores, la industria y la distribución alimentaria “han estado a la altura de las circunstancias y eso nos permite disponer de alimentos y bebidas en cantidad y calidad suficiente, a unos precios razonables”, según su opinión.
El informe sobre consumo alimentario refleja también la buena situación del sector agroalimentario español, en términos de producción y exportación, “que además de alimentar a nuestros ciudadanos, contribuye a mejorar el funcionamiento de nuestra economía”.
Al respecto, Planas destacó que los ciudadanos hemos retomado los hábitos anteriores a la pandemia de la COVID-19. Así, el consumo en el hogar descendió en 2021 respecto al año anterior (año central de la pandemia) y se asiste a una progresiva recuperación del consumo fuera de casa, aunque todavía sin alcanzar los niveles habituales registrados en 2019.
En valor, el 72,7 % del consumo sigue siendo doméstico, mientras que en volumen ascendió el pasado año al 90,3 %.
El ministro mostró su confianza en que algunos cambios ocurridos durante el confinamiento pandémico, como prestar más atención a lo que consumimos y dedicar más tiempo a cocinar, hayan venido para quedarse. De hecho, respecto al uso de los alimentos en los hogares, preferimos los alimentos a la plancha, sin cocinar o fríos, así como hervidos o al vapor. Una forma de cocinar que guarda más la esencia y propiedades de los alimentos y que, además es más rápida.
Para el ministro, los datos del informe “muestran una orientación muy clara a que se consume menos en volumen, pero de una manera más saludable, de mayor calidad”.
Según detalló Planas, durante el pasado año el gasto total en Alimentación ascendió a unos 102.552 M€, un 0,5 % superior al de 2020, pero inferior un 2,8 % respecto a 2019.
Mientras que el volumen total consumido en el año anterior fue de 32.774 Mkg/litros, con descensos del 5,7 % sobre un año antes y del 1,6 % en relación a 2019.
En 2021, cada español consumió de media 731,89 kg/l, unos 42 kg/l menos en comparación con el año anterior, pero también 26,30 kg/l menos que en 2019, motivado en parte por ese consumo fuera de casa, que aún es menor a lo habitual.
Por su parte, el gasto per cápita fue de 2.425 euros, un 1,8 % más que en 2020, lo que supone 41,78 euros más por persona y año, debido a un gasto menor dentro de casa, que se compensa con el mayor gasto realizado fuera de casa (147,74 euros más).
Según precisó el ministro, el gasto realizado por los españoles para el abastecimiento en el hogar ascendió en 2021 a unos 74.543 M€, con un descenso del 6,1 % respecto a 2020 y un crecimiento del 7,3 % en relación a 2019.
En volumen, los españoles consumieron en el ámbito doméstico 29.586 millones de kilos/litros, también un 7,2 % menos que en 2020.
Durante el pasado 2021, los productos frescos representaron la parte más importante del consumo doméstico, con un 38,8 % en volumen y un 42,3 % en valor.
Los productos de mayor volumen en la cesta de la compra son los lácteos, frutas y hortalizas frescas, que suman el 40,6 % del total de compras.
Mientras, carnes y pescados representaron el 33 % del presupuesto destinado a alimentación, aunque en volumen solo suponen el 10,6 % de los kilos consumidos.
En el hogar, el consumo per cápita en 2021 ha sido de 639 kilos y un gasto de 1.610 euros por persona y año. Con carácter general, las regiones del Norte de España, Región de Murcia e Illes Balears registran consumos y gastos per cápita superiores a la media.
Respecto a los canales de abastecimiento, el supermercado sigue siendo el lugar preferido por los españoles para realizar sus compras, con casi la mitad del volumen total de ventas, cifras que no varían mucho respecto del año anterior.
En este ámbito, las tiendas tradicionales han visto disminuir su cuota de mercado, tras el impulso generado en 2020 gracias a su papel destacado durante la pandemia como comercio de cercanía.
También destaca la continuidad en la senda de crecimiento de las compras por Internet, que logran una cuota del 2,4 % sobre el total de la alimentación.
Como nota adicional, Planas mencionó la compra de productos sin gluten, que suponen el 3,3 % del volumen total de alimentación, mientras que otro 2,3 % corresponde a productos de elaboración ecológica.
Por otra parte, el ministro ha señalado que la recuperación de la normalidad, tras las dificultades de la crisis sanitaria, consolida el crecimiento del consumo fuera del hogar. Ello conlleva que los datos de consumo extradoméstico de 2021 sean positivos, aunque negativos respecto a la situación de normalidad de 2019.
Así, el gasto realizado por los españoles en alimentación y bebidas fuera de casa ascendió en 2021 a 28.008 M€, un 23,2 % superior al año anterior, pero un 22,1 % más bajo que el valor alcanzado durante 2019.
En volumen, el consumo equivale a 3.187 Mkg/l, en cerca de 11.773 millones de consumiciones, con un incremento del 10,4 % sobre el año anterior, pero lejos del consumo que se producía antes de la pandemia (-31,2 % respecto a 2019).
Fuera del hogar, los ciudadanos consumieron un mayor volumen de bebidas (67,7 %) que de alimentos (32,3 %).
No obstante, durante el año 2021 aumentó más el consumo de alimentos que de bebidas con respecto al año anterior (+13 % y -7,2 %, respectivamente). Posiblemente, destacó Planas, la vuelta a la normalidad ocasionó que los españoles hagan más completas sus consumiciones fuera del hogar. En valor, un 63,9 % del consumo corresponde a los alimentos y un 36,1 % a las bebidas.
El consumo medio per cápita del consumo extra-doméstico en 2021 fue de 92,75 kg/l, unos 7,99 kilos más que en 2020, aunque todavía suponen 43,86 kilos menos con respecto a 2019.
Mientras, el gasto per cápita fue de 814,97 euros, un 22,1 % más que el año anterior, aunque inferior a lo gastado en 2019 (1.060 euros por persona).
El ministro señaló también que en 2021 hemos intensificado el consumo en los establecimientos, aunque se está consolidando la venta a domicilio de alimentos. Y apuntó que, tras la experiencia adquirida durante el confinamiento, “bares y restaurantes se tuvieron que reinventar para entregar a domicilio sus productos y esa tendencia ha llegado para quedarse”.
Por canales de compra, bares, cafeterías y cervecerías concentran el 42,8 % del volumen consumido fuera de casa, seguidos de restaurantes (28,7 %). También aumentan las compras en hoteles y servicios de empresa, síntoma de la recuperación de los hábitos sociales.
El informe señala que, tras el «boom» experimentado por la cocina casera durante la pandemia, en 2021 los ciudadanos dedicaron menos tiempo a cocinar, tanto entre semana como el fin de semana, debido en gran medida a la recuperación del consumo extra-doméstico y a una mayor presencia en los centros de trabajo que en el periodo álgido de la pandemia de Covid-19.
Por otra parte, el ministro explicó que, debido al impacto que la actual coyuntura de incremento de los precios o el conflicto de Ucrania están teniendo en la compra de alimentos, el MAPA está realizando un seguimiento pormenorizado de la situación, detectando, entre finales de febrero y principios de marzo un aumento de compras de acopio, ante el temor a una posible falta de suministro, debido también a la huelga de transportes por carretera que se produjo en esas fechas.
Las variaciones más altas en ese tiempo se produjeron en compras de alimentos fáciles de almacenar y conservar, como aceite de oliva y girasol (59,6 % y 45,2 %, respectivamente), y también de productos básicos como harinas, sémolas, pasta y arroz.
El ministro recalcó que la aplicación de Ley de la Cadena Alimentaria está sirviendo para que los costes de producción se trasladen a lo largo de la cadena de valor (de ahí se debe en gran parte la subida de los PVP al consumidor y que el incremento de los PVP sean en la mayor parte de los productos superiores al incremento de los precios en origen ) y que no sea el sector productor el que tenga que asumirlos, como sucedía con anterioridad. Salvo en cítricos y en algunas frutas, dicha ley viene contribuyendo a ello.
Resumen del Informe Consumo Alimentario 2021: resumen-anual-consumo-alimentario-2021
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