La directora general de Producciones y Mercados Agrarios, Esperanza Orellana, ha destacado hoy, en la inauguración de la jornada de transferencia de resultados de los ensayos 2021-22 del Grupo para la Evaluación de Nuevas Variedades en Cultivos Extensivos (GENVCE), la importancia de la colaboración entre los agentes del sector cerealista para hacer frente al momento complicado por la coyuntura geopolítica y por las condiciones agroclimáticas desfavorables.
La directora general ha asegurado que para ella no existe un problema de accesibilidad a los alimentos, pero sí de aumento de precios que debe resolverse con unos sistemas alimentarios más sostenibles.
La directora general ha asegurado que para ella no existe un problema de accesibilidad a los alimentos, pero sí de aumento de precios que debe resolverse con unos sistemas alimentarios más sostenibles.
«Esta sostenibilidad empieza en el abanico de material vegetal desarrollado por los obtentores, que se testa antes de comercializase, y que debe permitir a los agricultores rentabilizar su actividad mediante variedades mejor adaptadas a las condiciones de sus explotaciones, que son más resistentes a las plagas, a la sequía y a la salinidad.»
En la campaña 2021-22, la red GENVCE ha realizado 135 ensayos en 42 localidades de 9 comunidades autónomas. Ha evaluado 121 variedades de cereales y 24 variedades de colza a lo largo de todo el territorio, y ha abarcado todas las zonas agroclimáticas, en las principales zonas productoras.
Durante su intervención, la directora general ha resaltado los recursos tecnológicos, financieros y humanos de alto valor que el sector obtentor pone al servicio de la mejora vegetal. También ha hecho hincapié en los escenarios que se abrirán en el futuro próximo en la Unión Europea con la revisión de la legislación en los ámbitos del material vegetal de reproducción y, previsiblemente, las nuevas técnicas de edición genética.
En este contexto, Esperanza Orellana ha asegurado que los agricultores deberán seguir recibiendo información precisa y eficaz para que puedan adoptar las mejores decisiones. Para la directora general, redes como el GENVCE tienen que generar confianza en el sector gracias a la calidad, la solvencia técnica y la autoevaluación rigurosa con propósito de mejora.
Por último, ha apuntado la necesaria flexibilidad de la red para incorporar nuevos ensayos que respondan a los objetivos en evolución del sector y las orientaciones políticas como la estrategia «De la granja a la mesa» de la Unión Europea.