Zoetis muestra la primera experiencia europea de vacunación frente a Mycoplasma bovis
Zoetis aprovechó la celebración del XXV Congreso Internacional Anembe de Medicina Bovina para organizar un simposio centrado en Mycoplasma bovis.
José María San Miguel, director técnico de rumiantes en Zoetis España, introdujo el simposio aportando interesantes datos sobre el papel clave de Mycoplasma bovis en la enfermedad respiratoria bovina (ERB) y su presencia en nuestro país.
El simposio contó con la participación del veterinario Alfredo Zanini (Vetallier Reseau Cristal) como ponente principal para exponer su experiencia con la vacunación frente a Mycoplasma bovis en ganado vacuno.
San Miguel señaló que la tasa de vacunación en España es muy baja, siendo tan solo del 18 – 30 %. Por otra parte, por la situación de baja producción nacional, actualmente se están importante alrededor de 700 000 teneros, principalmente jóvenes, por debajo de los 80 kilogramos de peso, y procedentes en su mayoría de Francia.
En cuanto a la ERB, destacó algunos de los resultados de un estudio llevado a cabo por la compañía en España en el año 2017, que englobó al 17 % de la producción de cebo y al 18 % de las novillas de leche, y que reflejan que M. bovis está en el 100 % de las explotaciones de cebo; y en el 75 % en el caso de las granjas de leche.
Primera experiencia europea de vacunación frente a Mycoplasma bovis
A continuación, Zanini presentó dos casos clínicos para mostrar los principales resultados alcanzados con el uso de la primera vacuna frente a Mycoplasma bovis de Europa, que llevan usando en Francia desde hace ya un año.
Zanini expuso que M.bovis está presente en todos los cebaderos, ya que el medio es proclive a su presencia, siendo además su avance muy rápido. La enfermedad asociada a este patógeno impacta directamente en los resultados zootécnicos, tanto en mortalidad como en morbilidad, con una gran afectación de la ganancia media diaria y las tasas de crecimiento. Adicionalmente, recordó la necesidad de reducir el uso de los antibióticos en nuestras ganaderías, señalando a la prevención vacunal y la bioseguridad, como una de las posibles soluciones.
Por ello, apuntó la vacunación como una gran oportunidad para cumplir con estos aspectos y luchar frente a la micoplasmosis, además de la importancia de una detección precoz del patógeno primario, mediante la realización de extracciones precoces en granja. “La vacuna no acaba con el agente etiológico, sino que ayuda a controlarlo;” – dijo el experto – “por eso es clave acompañar al ganadero, no tener miedo y confiar en la vacunación”, concluyó.