Stefano Mallia, presidente del grupo de empresarios del CESE, en ASEDAS: “Necesitamos que la competitividad sea el eje principal de la Unión Europea”
Stefano Mallia es el presidente del grupo de empresarios del Comité Económico y Social Europeo, al que pertenece también Felipe Medina, secretario general técnico de ASEDAS, Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados. Ambos hablan en “Diálogos en Proximidad”, la serie de entrevistas organizadas por ASEDAS.
Stefano Mallia representa a los empresarios europeos en el CESE, un órgano consultivo dentro del marco institucional de la Unión Europea encargado de aportar el punto de vista de empresarios, sindicatos y sociedad civil sobre las directivas y reglamentos comunitarios. En este marco, una de las mayores preocupaciones es la competitividad de las empresas europeas tras unos años muy difíciles definidos por la pandemia y por la crisis de costes que ha derivado en una escalada de la inflación desconocida en décadas. “Necesitamos que la competitividad sea un eje central de las acciones de la Unión Europea”, afirma Mallia.
Y continúa: “la última vez que tuvimos una estrategia que abarcaba la competitividad fue en 2010, en la Agenda Estratégica de Lisboa. No tiene sentido que una entidad como la Unión Europea, que se ha constituido alrededor del crecimiento económico, no tenga esta visión”. Por lo tanto, esta demanda de los empresarios europeos se extiende a la próxima Presidencia española del Consejo de Europa: “es urgente abordar, por ejemplo, el problema de nuestras materias primas fundamentales, de la autonomía estratégica y cerrar alianzas con países de confianza, países democráticos”.
Para facilitar esta competitividad, “no podemos seguir imponiendo barreras legislativas a las empresas. Cuando observas, por ejemplo, la normativa de cumplimento debido, de informes no financieros… son cosas cada vez más pesadas, que están asfixiando a las empresas. Además, tenemos que facilitar que las empresas inviertan en innovación. Si no tenemos cuidado, veremos una mayor desindustrialización de Europa”.
Para el presidente del grupo de empresarios del CESE, el fortalecimiento del mercado único, al que califica como “la joya principal de la Unión Europea” es imprescindible. Para ello, apunta a tres líneas de trabajo principales: reconsiderar “las numerosas barreras legislativas y no legislativas que entorpecen su funcionamiento”, incrementar la inversión en innovación y en talento porque “Europa se está enfrentando a una situación cambiante con un mercado laboral muy ajustado, tanto en términos de aptitudes profesionales como de mano de obra; sin el talento no vamos a poder seguir creciendo ni ser competitivos”, y, por último, replantear algunos aspectos del Pacto Verde, “todos estamos de acuerdo en que tenemos que unirnos en la transición verde, pero también en la transición digital”.
Para terminar, Mallia también habla del sector del comercio y reclama una mayor visibilidad. “Estamos hablando de alrededor de 5 millones de empresas en Europa, de cientos de millones de euros de facturación… y, aun así, no tiene la visibilidad de otros sectores en la agenda de la Unión Europea”. “En las instituciones europeas se ha de hacer un esfuerzo para elevar el perfil de un sector que está haciendo frente a desafíos importantes en lo relativo a la demografía, a la digitalización y a la sostenibilidad medioambiental, entre otros”, concluye.