El Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) fijó el coeficiente definitivo de reembolso de la disciplina financiera, aplicada en el ejercicio financiero 2022, a aplicar a los pagos superiores a 2.000 euros, correspondientes a aquellos beneficiarios a los que se abonarán los pagos directos y las medidas POSEI en el ejercicio financiero 2023, manteniendo la tasa provisional del 1,63% que se había calculado con anterioridad.
En el caso de nuestro país, esto supondrá la devolución a los perceptores de ayudas de la campaña PAC 2022 de unos 66.186.860 euros, que es la cantidad que se había establecido para el reembolso de los créditos prorrogados a dichos beneficiarios finales.
En el caso de nuestro país, esto supondrá la devolución a los perceptores de ayudas de la campaña PAC 2022 de unos 66.186.860 euros, que es la cantidad que se había establecido para el reembolso de los créditos prorrogados a dichos beneficiarios finales.
En los apartados 3 y 4 del artículo 17 del Reglamento (UE) 2021/2116 del Parlamento Europeo y de Consejo, de 2 de diciembre de 2021, sobre la financiación, la gestión y el seguimiento de la política agrícola común y por el que se deroga el Reglamento (UE) nº 1306/2013, se establece que los Estados miembros deben reembolsar los créditos prorrogados a los beneficiarios finales de acuerdo con criterios objetivos y no discriminatorios.
Mediante Reglamento de Ejecución (UE) 2022/2344 de la Comisión, de 29 de noviembre de 2022, relativo al reembolso, con arreglo al artículo 17, apartado 3, del Reglamento (UE) nº 2021/2116 del Parlamento Europeo y de Consejo, de los créditos prorrogados del ejercicio financiero 2022, queda fijado para cada Estado miembro el techo de los importes de los créditos, que serán prorrogados del ejercicio 2022 para su reembolso a los perceptores finales del ejercicio 2023, que llega hasta el próximo 15 de octubre.
En base al reglamento anterior el 8 de marzo de 2023 el FEGA estableció, con carácter provisional, una tasa de reembolso de la disciplina financiera del 1,63%. Posteriormente, teniendo en cuenta la información de los pagos efectuados por las CC.AA. hasta el 25 de abril de 2023, así como de las previsiones comunicadas por las mismas en el mes de mayo sobre los importes pendientes de pago correspondientes al ejercicio financiero 2023, incluidos los de la Comunidad Autónoma de Canarias, el FEGA revisó los cálculos estimatorios efectuados el pasado mes de noviembre, verificándose que no procedía modificar la tasa provisional establecida.
Por ello el FEGA ha confirmado a los Organismos Pagadores de las CC.AA. el valor de 1,63% como tasa de reembolso definitiva de la disciplina financiera del ejercicio financiero 2022, a aplicar a los pagos superiores a 2.000 euros, que se van a conceder a los beneficiarios finales a los que se abonarán pagos directos en el ejercicio financiero 2023, incluidas las medidas POSEI que se abonen en la Comunidad Autónoma de Canarias.
Como se ha dicho, en el caso de España, la cantidad establecida para el reembolso de los créditos prorrogados es de 66.186.860 euros.
Por otro lado, el comisario de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea informó que la reserva de crisis agrícola incrementará en 80 millones de euros su presupuesto, confirmando en parte la demanda que habían hecho algunos ministros de Agricultura de la UE, entre ellos el español Luis Planas, de que los fondos con que contaba dicha reserva en el actual ejercicio financiero, unos 450 millones de euros, eran bastante insuficiente para atender todas las necesidades de los diferentes países.
Por tanto ahora, y a la espera de que se adopte la decisión formal, posiblemente esta misma semana, esta reserva contaría con una dotación presupuestaria de 530 millones de euros para el ejercicio, aunque hay que recordar que se han utilizado unos 200 millones, con lo que restarían otros 330 millones para atender las demandas de los Estados miembros, que no se han beneficiado de la misma.
Entre ellos y por el momento, Portugal y España por la sequía, Italia, por las inundaciones en el Norte, Letonia y Lituania por la crisis láctea, y Bélgica por sus problemas en su cosecha de manzanas. Está pendiente de decidir cuál sería su reparto, en función de cómo estime Bruselas los daños por las distintas adversidades en los Estados miembros.