El Pleno del Parlamento Europeo adoptó su informe de posición para las negociaciones tripartidas con el Consejo y la Comisión Europea con 426 votos a favor, 125 en contra y 74 abstenciones sobre la nueva normativa sobre envases para frenar el incesante aumento de los desechos e impulsar la reutilización y el reciclaje.
Además de los objetivos globales de reducción de envases, propuestos en el reglamento (5 % para 2030, 10 % para 2035 y 15 % para 2040), los eurodiputados apoyaron establecer objetivos más específicos para los envases de plástico (10 % para 2030, 15 % para 2035 y 20 % para 2040).
Además de los objetivos globales de reducción de envases, propuestos en el reglamento (5 % para 2030, 10 % para 2035 y 15 % para 2040), los eurodiputados apoyaron establecer objetivos más específicos para los envases de plástico (10 % para 2030, 15 % para 2035 y 20 % para 2040).
Los eurodiputados también propusieron prohibir la venta de bolsas de plástico muy ligeras (de menos de 15 micras), a menos que su uso sea necesario por razones de higiene o que sirvan como embalaje para alimentos sueltos con el fin de ayudar a prevenir el desperdicio alimentario.
También plantean limitar en gran medida el uso de determinados formatos de embalaje de un solo uso, como los productos de aseo en miniatura de los hoteles y el envoltorio para maletas en los aeropuertos.
Para evitar efectos adversos para la salud, el Pleno de la Eurocámara pidió también que se prohíba el uso de químicos de larga permanencia, (sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas, PFAs, en inglés) y el Bisphenol A en los envases para uso alimentario.
El objetivo de los eurodiputados es también clarificar los requisitos para la reutilización o rellenado de los envases.
Los distribuidores finales de bebidas y comida para llevar en el sector de servicios alimenticios, como hoteles, restaurantes y cafeterías, deben dar a los consumidores la opción de traer su propio recipiente.
Las nuevas normas buscan mejorar la recogida y el reciclado de envases
Las nuevas normas exigen que todos los envases sean reciclables, cumpliendo criterios estrictos que deberán definirse vía legislación secundaria. Habrá algunas exenciones temporales, por ejemplo, para los envases alimentarios de madera y cera.
Asimismo, los eurodiputados quieren que los países de la UE garanticen que el 90 % de los materiales contenidos en los envases (plástico, madera, metales ferrosos, aluminio, vidrio, papel y cartón) se recojan por separado para 2029.
Para Frédérique Ries (Renew, Bélgica), ponente del informe parlamentario, «la Eurocámara envía una señal clara a favor de una revisión completa del mercado de envases y residuos de envases de la UE. Esta legislación es esencial para la competitividad y la innovación europeas, y alinea las ambiciones medioambientales con la realidad industrial. Junto con políticas efectivas de reutilización y reciclaje, nos aseguramos de que los envases sean seguros para los consumidores, añadiendo una prohibición de los productos químicos nocivos en los envases de alimentos, en particular los PFAS».
Con la aprobación del informe, el Parlamento Europeo entablará conversaciones con los Estados miembros sobre la forma definitiva del nuevo reglamento, que comenzarán una vez que el Consejo de la UE haya adoptado su posición.
En 2018, los envases generaron una facturación de 355.000 millones de euros en la UE, siendo una fuente cada vez mayor de desechos, aumentando de 66 millones de toneladas en 2009 a 84 millones en 2021.
Cada europeo generó ese año 188,7 kilos de desechos de envases, cifra que continuará aumentando, hasta 209 kilos en 2030, si no se adoptan medidas.
Con la adopción de este informe, el Parlamento Europeo responde a las demandas ciudadanas sobre la economía circular, la reducción de desechos, la eliminación gradual de los envases no sostenibles y el problema de los plásticos de un solo uso, como quedaron recogidas en las propuestas 5(1), 5(3), 5(4), 5(5), 11(1), 11(4) y 20(3) de las Conclusiones de la Conferencia sobre el Futuro de Europa.
Por su parte, el COPA-Cogeca, que defiende los intereses de los productores agrarios de la UE y de sus cooperativas observó importantes mejoras en la propuesta inicial, teniendo en cuenta las características y realidades específicas del sector.
Entre las mejoras, esta organización acoge con satisfacción «el notable indulto para el sector vitivinícola, puesto que los eurodiputados votaron a favor de excluir al mismo de los objetivos de reutilización, junto con las exenciones para las bebidas espirituosas en venta, evitando fines arbitrarios e inviables para ambos sectores.
No obstante, el COPA-Cogeca ve aún problemática el mantenimiento de las restricciones para el diseño de los envases, que tendrían efectos negativos en el sector vitivinícola, que se basa en características como el doble fondo, que refuerza la resistencia de las botellas en tránsito.
En el caso de los sectores de frutas y hortalizas y el HORECA, los eurodiputados también votaron en contra de las restricciones a los envases de un solo uso, salvaguardando no solo la salud y la seguridad de los consumidores, sino también la viabilidad comercial de los productores.
Dado que el COPA-Cogeca ha expresado constantemente su preocupación por esta disposición que inevitablemente aumentaría el desperdicio de alimentos, este resultado es muy bien recibido por los agricultores y las cooperativas agrícolas.
Por último, una enmienda muy publicitada es la que protege los envases de madera para el queso, una buena noticia para nuestros productores.
Ahora, el COPA-Cogeca pide al Consejo que tenga debidamente en cuenta la votación de hoy en Estrasburgo, de modo que este Reglamento contribuya a una economía circular realista, basada en pruebas, y asequible.
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