La UE reconoce al Cabrito de Extremadura como Indicación Geográfica Protegida
Este miércoles, la Unión Europea ha aprobado la inscripción del Cabrito de Extremadura en el Registro de Denominaciones de Origen Protegidas y de Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP).
La nueva IGP reconocida por Bruselas ampara los cabritos «que nacen en la dehesa, montes y otras praderas de Extremadura» y protege y ampara las canales de cabrito que hayan cumplido con los requisitos fijados en su Pliego de Condiciones.
Para que un animal pueda lucir el marchamo Cabrito de Extremadura debe nacer, criarse, engordarse, sacrificarse y faenarse en Extremadura. Además, debe proceder de las razas caprinas Verata, Retinta, Florida, Malagueña, Murciano-Granadina, Blanca Andaluza, Cabra de las Mesetas o Serrana, Payoya, o los cruces entre estas razas.
En la región de Extremadura, los cabritos se crían desde épocas ancestrales, formando parte de la tradición e historia de esta región. Además, su singularidad reside en el color de la carne, la grasa, la ternura, un moderado nivel de infiltración de grasa intramuscular y agradable textura.
El producto se comercializará en dos categorías: Cabrito de Extremadura categoría lechal, para animales procedentes de madres que se crían en régimen extensivo o semiextensivo, y que se han alimentado exclusivamente con leche materna.
Y Cabrito de Extremadura para animales procedentes de estas mismas madres, pudiendo complementar su lactancia con concentrados compuestos fundamentalmente por cereales y leguminosas hasta el destete. El acabado de estos animales podrá realizarse a base de concentrados elaborados fundamentalmente con cereales, leguminosas, proteaginosas y forrajes.
Cabrito de Extremadura se suma a las 16 figuras de calidad diferenciada que se producen en esta comunidad autónoma.