Una campaña de mandarinas regular o mala y bastante desastrosa en las variedades de naranjas. Por una cosa u otra lo cierto es que no hay una temporada citrícola buena en conjunto durante los últimos años, lo que hace cundir el pesimismo entre los diversos estamentos del sector. La mayor parte de operadores ya hablan de la misma como una de las peores de la historia.
Una campaña citrícola irregular marcada por el desastre final en las variedades de naranja
J. Sanchís. Periodista agrario.
El sector productor de cítricos español vive de lleno en una crisis económica muy importante. Los precios de los cítricos no han dejado de bajar en las últimas tres campañas de producción, prácticamente desde la 2011-2012, y culminan su espiral descendente con precios reales en campo cercanos a cero en las variedades de naranjas a lo largo de los meses de marzo y abril, así como un nivel de operaciones de compraventa en campo prácticamente nulo y muchas de las estructuras comerciales citrícolas en una situación difícil (cooperativas, SATs, organizaciones de productores de cítricos).
Las causas de esta negativa campaña son diversas. El clima se ha caracterizado por la falta de frío en general, tanto en España como en el resto de países de Europa, lo que no ha sido favorecedor para el consumo. La demanda en general ha sido lenta desde el principio y los diferentes operadores confiaban en un repunte a partir de enero, pero se encontraron con un mercado con una gran oferta de cítricos y una demanda paralizada, sobre todo en los meses de febrero a abril.
