Producción ecológica: las razones para la firma de un acuerdo que nos deja insatisfechos
José Luis Rojas, director de Cooperativas Agro-alimentarias CLM
Hay situaciones en las que tenemos que elegir entre lo malo y lo menos malo y las organizaciones y sus dirigentes, lejos de “ponernos de perfil” pidiendo lo imposible, pero salvando quizás nuestra imagen institucional, debemos tomar posición por lo que entendemos que son los intereses del colectivo que representamos, aunque no colme nuestras aspiraciones.
Cooperativas Agro-alimentarias hemos suscrito un acuerdo con la Consejería de Agricultura, junto a las organizaciones agrarias COAG, UPA y ASAJA, para intentar remediar, en la medida de lo posible, la conflictiva situación creada por las convocatorias de ayudas a la producción ecológica, en nuestra región.
Un contexto complicado que ha provocado la no aprobación de las solicitudes presentadas en 2015, para mantenimiento de la agricultura ecológica, de 1.220 titulares, así como una bajada acusada de las ayudas en los sectores de herbáceos, viñedo y olivar, previstas en la convocatoria.
Este escenario sobrevenido es consecuencia, a nuestro entender, de las equivocadas decisiones tomadas desde la consejería de Agricultura, tanto por los responsables del anterior Gobierno, como por los actuales, que no tiene fácil solución y que en ningún caso será a gusto de todos.
Como consecuencia final de tan malas decisiones hay 1.220 solicitantes, muchos de ellos profesionales socios de cooperativas, agricultores con experiencia y comprometidos con la agricultura ecológica desde hace años -que además son la base del aprovisionamiento de las empresas que comercializan actualmente productos ecológicos- que se han quedado fuera del sistema de ayudas, circunstancia que podría suponer su vuelta a la agricultura convencional y por tanto echar por tierra el trabajo de muchos años y el despilfarro del presupuesto gastado en ellos. Hay que recordar también el esfuerzo inversor de numerosas empresas, muchas de ellas cooperativas, para adaptar sus instalaciones para la recepción, transformación y comercialización de productos ecológicos que también serán afectadas al verse reducidas sus posibilidades de aprovisionamiento.
La prioridad de Cooperativas Agro-alimentarias en la difícil negociación del pasado lunes, ha sido en todo momento recuperar al mayor número posible de estos 1.220 titulares que han quedado fuera, para que puedan seguir produciendo de la forma más respetuosa posible con el medio ambiente, con los apoyos previstos por la UE.
Para ello hemos solicitado que se explorase la posibilidad de anular esta convocatoria para nuevas incorporaciones o que, al menos, se rebajasen los 44 millones que se dedican a conversión 2016 y comprometer posteriormente buena parte de ellos a recuperar a los 1.220 titulares con resolución negativa de mantenimiento 2015. Pero, según la consejería, los servicios jurídicos de la Junta desestimaron dicha posibilidad.
Ante esta realidad jurídica y legal, la única opción de avance es la apertura de la línea de mantenimiento en 2017.
Hemos firmado el acuerdo porque garantiza por exigencia nuestra, apoyada por las OPAs, que se abrirá una convocatoria de “mantenimiento 2017” para tratar de incorporar a las ayudas a los más posibles, de los 1.220 titulares excluidos. Dicha convocatoria contará, de partida, con 3 millones de euros, más todo el sobrante (que probablemente quedará) de la línea de conversión 2016 y mantenimiento 2016
Hemos firmado el acuerdo porque se han conseguido 13 millones de euros adicionales dedicados a mejorar las ayudas que se rebajaron. El presupuesto disponible finalmente para agricultura ecológica será de 230,18 millones de euros, en todo el periodo
Hemos firmado el acuerdo porque se elaborará, de forma participativa, un Plan Estratégico de la Agricultura Ecológica de Castilla-La Mancha para el periodo 2016-2020, con los objetivos, prioridades y acciones de fomento de la comercialización, entre ellos el apoyo a los canales cortos y la promoción del consumo
Hemos firmado el acuerdo porque con ese Plan Estratégico como referencia, entendemos que nos situaremos en un escenario más estable y previsible para planificar y desarrollar una estrategia productiva y empresarial a medio plazo, que suponga un nuevo impulso de la agricultura ecológica en nuestra región.
Se suele decir, y comparto esa opinión, que se aprende más de los errores que de los aciertos. Aprendamos pues. Tras las erróneas decisiones que se han tomado en el tema que nos ocupa, debería quedar desterrada en el futuro la utilización partidista de las ayudas al sector agrario, en toda contienda electoral y también que la interlocución y el dialogo entre la administración regional y las organizaciones representativas del sector agrario: OPAs y Cooperativas, dejase de ser un mero eslogan para convertirse en una práctica normalizada y habitual, generadora de acuerdos serios estables y duraderos, que son la base de toda vertebración social.