Cada vez es mayor el interés de los ciudadanos chinos en acceder a productos de consumo importados de casi cualquier parte del mundo. Este interés es equivalente al que muestran empresas de todo el mundo por acceder a uno de los mercados más grandes del planeta gracias a su millonaria y, cada vez mayor, clase media-alta, la cual dispone de un importante poder adquisitivo.
China quiere facilitar la comercialización de los productos agroalimentarios españoles
Dennise Quimí . Área de Comercio. Oficina Económica y Comercial en España de la Zona de Libre Comercio de Hengqin, China
Dentro del ambicioso proyecto de la Ruta de la Seda del Siglo XXI, y con el propósito de desarrollar con garantías sus relaciones comerciales con el resto del mundo, el Gobierno central de Pekín puso en marcha a finales de 2014 la nueva zona de libre comercio de Hengqin, en la provincia de Cantón, a la cual designó meses después como su plataforma exclusiva para el desarrollo comercial con los países de habla hispana.
Al frente de la Oficina Económica y Comercial para los Mercados de Habla Hispana puesta en marcha en Hengqin se encuentra desde entonces el español Víctor Ladreda quien resalta “lo importante que es para China el mercado hispano hablante, ya que en menos de un año ya hemos puesto en marcha oficinas económicas en España, México, Estados Unidos y Hong Kong para desarrollar al máximo el comercio entre China y todos los países de habla hispana. Y la intención es seguir abriendo oficinas progresivamente en otros países del continente americano”.
De la mano de la Oficina Económica y Comercial de la Zona de Libre Comercio de Hengqin en España, con sede en Madrid, se ha puesto en marcha un proyecto concreto con la intención de facilitar al máximo a las empresas del sector agroalimentario español la creación de redes de comercialización de sus productos de manera que les otorgue mayor seguridad, control y orden que hasta ahora y con unos costes muy inferiores a los que les supondría implantarse por su cuenta en China.
Víctor Ladreda señaló que “en España, el sector agroalimentario es uno de los que mayor interés muestran por entrar en China, pero recibimos muchas quejas debido a malas experiencias por desconocimiento del mercado, asesoramientos deficientes, problemas con los socios locales y falta de ventas recurrentes que en algunas ocasiones les hacen abandonar la idea de comercializar sus productos en China debido al desgaste que esto supone.
Después de hablar con muchas empresas españolas del sector y analizar en profundidad los problemas más habituales con los que se encuentran, hemos desarrollado durante los últimos meses un proyecto que haga que puedan competir con más garantías en China.
Con este proyecto queremos que las empresas españolas del sector de la alimentación que realmente quieran tener un proyecto en China a largo plazo y crear una red de comercialización sólida que a medio plazo les reporte ventas recurrente, tengan las herramientas adecuadas para hacerlo con seguridad aunque desconozcan el mercado, porque tendrán nuestro respaldo en todo momento”.
A pesar de que este proyecto ha visto la luz hace muy poco tiempo, desde la Oficina Económica y Comercial de la Zona de Libre Comercio de Hengqin en España confirman que ya son muchas las empresas del sector agroalimentario que han mostrado interés en conocer los pormenores del mismo, habiendo mantenido reuniones ya con más de una veintena de empresas en
España, e incluso algunas de ellas ya han viajado a China para conocer en primera persona el proyecto.