Cataluña espera llegar a 407.920 t y recuperar su potencial en melocotón y nectarina en 2017
«Las previsiones de cosecha de fruta de hueso catalanas de este año serán un 13% superiores a las del año pasado y con 407.920 toneladas recuperarán el potencial productivo catalán perdido en las últimas campañas.»
Así lo afirmó el director general de Alimentación, Calidad e Industrias Agroalimentarias del Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y alimentación (DARP) de la Generalitat de Cataluña, Carmel Mòdol, durante la presentación de las previsiones de cosecha de melocotón y nectarina en Cataluña para este 2017, en un acto en el que participaron el director de los Servicios Territoriales del Departamento en Lleida, Ferran de Noguera, junto con el presidente y el director general de la Asociación empresarial de la fruta de Cataluña (Afrucat), Francisco Torres y Manel Simon, respectivamente.
Por demarcaciones, el incremento se mantiene en todas a excepción de la demarcación de Girona, que baja un 7% con 1.800 toneladas. Lleida sube un 14% y llegará a las 362.600 toneladas, Tarragona sube un 5% con 37.300t, y Barcelona sube un 6% hasta las 6.220 toneladas.
El aumento afecta a todas las especies, siendo la nectarina y el melocotón plano las que más suben, con un 15% y un 16% respectivamente.
Como en las últimas campañas, el ritmo de nuevas plantaciones continúa decreciendo y la superficie total plantada crece ligeramente. Casi se compensan las nuevas hectáreas con los arranques. El melocotón plano continúa superando el número de hectáreas plantadas de melocotón redondo. La pavía se recupera ligeramente después de años de arranques masivos, y continúa creciendo la superficie plantada de nectarina y bajando la de melocotón redondo.
Esta previsión sitúa Cataluña en un año de producción normal con una época de cosecha sobre calendario, sin solapamientos de las diferentes zonas productivas y con un inicio de precios para la producción de las zonas tempranas por encima de los del año pasado.
Calibres grandes y regulares y calidad excepcional
Según se explicó en la presentación, nos encontramos en un año favorable climatológicamente. Temperaturas normales, sin incidencias, con las horas de frío adecuadas, una floración corta y abundante, y cuajados excepcionales. Por todo ello, se espera una fruta de hueso de calidad excepcional con calibres grandes y regulares.
Si en 2015, el pedrisco causó un descenso productivo, el año 2016 fue la climatología la que afectó sobre todo a las variedades tempranas, con una floración larga, cuajados irregulares que desequilibraron el árbol y finalmente los efectos del granizo.
La campaña 2016, en general, a toda Cataluña también se reflejó la falta de horas frío que sufrieron los árboles.
En estos momentos, la situación se podría resumir en la recuperación de la producción de la zona, un no solapamiento de cosechas, un inicio mejor de los precios en las zonas tempranas y una muy buena calidad en la fruta, con buenos calibres y un azúcar elevado.