El próximo 26 de septiembre, el MAPA llevará a cabo en el Centro de Formación Aguas Nuevas (Albacete) una jornada técnica en la que mostrarán las últimas innovaciones en maquinaria para la agricultura de conservación así como los desarrollos más recientes en equipos de aplicación de productos fitosanitarios.
Albacete acogerá la próxima jornada de equipos para la agricultura de conservación organizada por el MAPA
Esta jornada tiene especial relevancia en Castilla-La Mancha, donde es importante incrementar la superficie dedicada a la siembra directa. En implantación de técnicas conservacionistas en Castilla-La Mancha, destaca la provincia de Guadalajara, seguida de lejos por Cuenca y Albacete. En esta comunidad autónoma se han inscrito en el último año 75 sembradoras directas de un total de 846 en toda España.
Los últimos estudios en la materia demuestran que la agricultura es una de las actividades que puede verse más afectada por el cambio climático, y los cambios previstos podrían afectar a los rendimientos agrícolas, así como a la elección de los cultivos y lugares dedicados a las producciones. Así lo demuestra un estudio de la Comisión Europea, que identifica las regiones de la Europa meridional como las más sensibles al cambio climático, previéndose una disminución de la productividad de los cultivos.
Una de las técnicas agrarias consideradas mitigadoras del cambio climático en la agricultura es la siembra directa, debido a su efecto sumidero de carbono del suelo, así como a la reducción de emisiones de CO2 que su práctica conlleva.
En este sentido es destacable el proyecto Life+Climagri, que la Asociación Española de Agricultura de Conservación-Suelos Vivos está liderando, en el que se plantea como objetivo el establecimiento de estrategias de manejo agronómico de cultivos extensivos cuya aplicación conjunta contribuya de manera simultánea a la mitigación del cambio climático y a la adaptación de los cultivos a las condiciones climáticas presentes y futuras. Además los resultados de este proyecto sirven para el impulso y desarrollo de las políticas y legislaciones medioambientales de la UE y de sus Estados miembros como medida para la lucha y adaptación al cambio climático.
Gracias a las prácticas mitigadoras del cambio climático que se implanten en un futuro, se producirá una reducción neta de emisiones GEI en la Cuenca mediterránea. Al quedar los restos vegetales de las cosechas en superficie se favorece el secuestro C en el suelo, lo que combinado con la no alteración mecánica del mismo produce una reducción de la tasa de descomposición de los mismos. También se produce una disminución de la mineralización de la materia orgánica del suelo debido a una menor aireación y a una menor accesibilidad de los microorganismos, lo que provoca finalmente un aumento en el contenido del carbono en el suelo.
En base a trabajos revisados en España, las técnicas de conservación son capaces de fijar de media hasta 5,68 t por hectárea y año de CO2, más que las técnicas convencionales en los primeros 10 años de implantación.
Debido a la importancia de la lucha contra el cambio climático para mantener la rentabilidad de la explotación agraria, el MAPA considera muy importante la realización de esta jornada técnica dedicada a las labores propias de las técnicas de agricultura de conservación.
La sostenibilidad de la explotación incluye también un uso racional de los productos fitosanitarios y debido a ello, se mostrarán las últimas innovaciones en equipos de aplicación de productos fitosanitarios, que incorporan elementos de precisión que permiten aplicar solamente donde es necesario el tratamiento, de manera homogénea, uniforme, segura para el operario, reduciendo así el consumo de producto por aplicación.