Una resolución del Ministerio de Agricultura, publicada en el BOE de este lunes 25 de mayo deja constancia de los índices de precios percibidos por los agricultores y ganaderos en 2019, a los efectos de la actualización de las rentas de los antiguos arrendamientos y de aparcería rústicos, vigentes desde antes de la derogación de la Ley 83/1980, de 31 de diciembre, de arrendamientos rústicos, por la actual Ley 49/2003, de 29 de noviembre.
Los precios percibidos por agricultores y ganaderos bajaron una media del 4,2% durante 2019
En el artículo 38 de la anterior ley se indica que “podrá acordarse por las partes la actualización de la renta para cada anualidad por referencia al último índice anual de precios percibidos por el agricultor, establecido por el Ministerio de Agricultura para los productos agrícolas en general o para alguno o algunos de los productos principales de que sea susceptible la finca, atendidas sus características y la costumbre de la tierra. Del mismo modo, tratándose de fincas, cuyos principales productos sean ganaderos, podrá también referirse la actualización al índice de los precios de alguno o algunos de sus productos.”
En su anexo figura que el índice general de los precios de los productos agrarios percibidos en 2019 por los agricultores y ganaderos descendió un 4,16%, quedando incluso 1,39 puntos porcentuales por debajo del año base de 2015, es decir en un valor anual del 98,61% respecto a hace un lustro.
En productos agrícolas, los precios percibidos bajaron un 8,61% en 2019, quedando su valor anual en el 94,63%, es decir, descendieron un 5,37% en relación a 2015, año base, mientras que, por el contrario, los de los productos animales remontaron un 2,2%, quedando en el 104,22%, es decir, con un alza desde el año base de 2015, del 4,2%.
La evolución de los precios percibidos por los productores agrarios durante el pasado año fue, sin embargo, muy dispar. Así, los precios de los cereales subieron un 2,63% en 2019, pero bajan respecto a 2015 un 0,15%; los de leguminosas grano, en cambio, registraron un fuerte descenso del 15,47% en 2019, así como del 12,14% respecto a 2015, quedando su valor anual respecto a ese año base en el 87,86%.
Los precios al agricultor de los tubérculos, como la patata, bajaron un 1,61% en el pasado año, pero suben un 34,86% desde 2015; el de los cultivos industriales (remolacha azucarera, girasol, algodón…etc.) reflejó una leve subida del 0,19%, pero cae un 5,47% desde el año base; el de los cultivos forrajeros experimenta mejor evolución, ya que subió un 15,5% en 2019 y remonta un ligero 4,02% desde 2015.
Los precios percibidos por los productores de hortalizas en 2019 bajaron un 3,18%, quedando también un 7,78% por debajo de lo que percibieron en 2015, mientras que los citricultores vieron caer sus precios también una media del 13,74% y un 10,8% desde el año base, de forma similar a los de los fruticultores, que bajaron un fuerte 16,66% en 2019 y un 9,53% desde 2015.
Los productores de uva para vinificación reflejaron también una caída de sus precios del 15% durante el pasado año, aunque desde 2015 perciben un 34,86% más.
Tampoco fue bien el pasado año a los productores de aceitunas para almazara, puesto que percibieron un 24,39% menos que en 2018, pero es que, además, su precio baja desde el año base de 2015 nada menos que un 29,55%, según la estadística del MAPA.
Productos animales y ganaderos
Los precios percibidos durante el pasado año por el ganado para abasto subieron un 3,31 y supone también un 6,15% más en relación a 2015. Más en concreto, los de vacuno para abasto bajaron un 2,55% en 2019, pero suben un ligero 1,61% desde el año base; los de ovino para abasto cayeron un 3,15% y también descienden un 4,96% desde 2015; los de caprino para abasto se comportaron mejor, subiendo un 3,81% en 2019 y limitando su descenso desde el año base al 0,81%.
En el caso del porcino para abasto, los precios percibidos por los ganaderos fueron positivos, escalando un 10,38% respecto a 2018 y subiendo un 12,85% desde 2015. Todo lo contrario a los de las aves para abasto, que descendieron un 9,07% en 2019 y bajan también un 5,84% desde el año base.
Es de destacar la mejora de precios medios percibidos durante el pasado año por el sector productor de conejos para abasto, que lleva años en una dura reestructuración, al crecer un 9,02% respecto a 2018 y un 23,38% sobre el año 2015.
Por último, los productos ganaderos bajaron sus precios percibidos un 1%, quedando también un 1,31% por debajo del año base de 2015. Dentro de este grupo, los productores de leche percibieron un 3,22% más en 2019, aunque un 0,4% menos desde 2015; los productores de huevos, por el contrario, vieron descender lo percibido un 12,21% en el pasado año y bajan también un 4,56% desde el año base, mientras que los productores de lana, un subproducto bastante despreciado en el pasado, percibieron un 6,29% más que en 2018 y suben un 32,75% desde 2015.