La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) aboga por el desarrollo reglamentario de la disposición que recoge la enmienda para que los regantes puedan firmar dos contratos eléctricos al año, después de que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2021 hayan recibido el aval del Congreso de los Diputados.
¿Se desarrollará reglamentariamente por fin el doble contrato de energía eléctrica para regadío?
En concreto, la enmienda -que ha recibido 172 votos a favor y 164 en contra- recoge que el Gobierno, en el plazo de seis meses, establecerá reglamentariamente una modalidad de contrato de acceso para regadío que contemplará la posibilidad de disponer de dos potencias diferentes a lo largo de 12 meses, en función de la necesidad de suministro para esta actividad.
No obstante, el colectivo de regantes recuerda lo que pasó con la Ley de Sequía de 2018, que ya contemplaba en sus disposiciones adicionales la posibilidad de firmar, por una parte, un contrato de temporada para los meses de máximo consumo y, por otra, otro contrato con una potencia mínima para el resto del año, con el que simplemente mantener los equipos.
En este sentido, lamenta que el artículo aún no se haya desarrollado y, por tanto, tampoco haya podido aplicarse, pese a la insistencia de Fenacore a lo largo de más de 10 años con los distintos Gobiernos de turno.
Los regantes aseguran, una vez más, que la posibilidad de firmar dos contratos eléctricos en un mismo año supondría un ahorro muy significativo de los costes fijos de la energía que, actualmente, representan en torno al 70% de los totales. Y ello, a fin de cuentas, serviría para avanzar en la modernización del casi millón de hectáreas de regadío aún pendiente.
De igual modo, este colectivo recuerda que, gracias a la modernización de los sistemas de riego, en la última década se ha logrado un ahorro próximo al 16% en el consumo de agua.
Por el contrario, lamentan que, lejos de reconocérseles sus esfuerzos, desde el año 2008 el recibo eléctrico haya subido más del 120%, principalmente debido a los costes fijos, puesto que el término de potencia se ha incrementado más de un 1.100%.
Fenacore sostiene que ese encarecimiento está lastrando la competitividad del sector agrícola español frente a otros países y considera que abaratar la factura consolidaría a España como un país referente en regadío modernizado -actualmente es el segundo país del mundo en porcentaje de riego localizado, sólo por detrás de Israel-.
Para reducir los costes energéticos y, por ende, avanzar en la modernización de regadíos, los regantes respaldan también el fomento de la energía distribuida en las zonas regables para autoconsumo; el impulso de la producción de energías renovables, y la posibilidad de pagar en función de la potencia real registrada y no de la teóricamente contratada, ya que así se evitaría pagar todo el año aunque no se riegue.
Según Andrés del Campo, presidente de Fenacore “se trata de una medida necesaria y positiva que habría que desarrollar en los próximos meses para acabar con la injusticia de tener que pagar todo el año por un servicio que únicamente se utiliza durante la campaña de riego”.
Unión de Uniones
Por su parte, Unión de Uniones mostró su satisfacción porque dos de las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que presentó a los Grupos Parlamentarios, precisamente la del contrato eléctrico de doble tarifa para el regadío, así como la de mejora para el cálculo de la jubilación de autónomos y trabajadores agrarios, se incorporaron al articulado del proyecto de Ley en las votaciones de esta semana en el Pleno del Congreso.
En la sesión del Pleno del Congreso del día 2 de diciembre, en la que se votaba el dictamen de la Cámara sobre el articulado del proyecto de Ley de PGE para 2021, se aprobó la incorporación al texto de dos enmiendas, la 2077 y la 2084, que responden textualmente a las propuestas impulsadas por Unión de Uniones y presentadas a todos los Grupos Parlamentarios el pasado 12 de noviembre, previo al inicio de los debates parlamentario.
La propuesta 2084 obligaría al Gobierno a desarrollar reglamentariamente, en un plazo de 6 meses desde la entrada en vigor de la Ley, el contrato de acceso eléctrico para el regadío con la posibilidad de disponer de dos potencias diferentes a lo largo de 12 meses.
“El Gobierno ha ido dando largas a esta medida, porque no tenía fecha tope para hacerlo”, explicaron desde esta organización agraria, que buscaba con esta enmienda ponerle un horizonte temporal para su puesta en marcha. Esta enmienda, tramitada por Grupo Plural (Junts per Catalunya), fue también recogida y presentada en términos similares por Esquerra y Ciudadanos.
Junto con esta enmienda se votaba y, por tanto también se aprobó otra (la 2077), igualmente a instancias de Unión de Uniones y tramitada de igual forma por Junts per Catalunya, por la que el Gobierno debe emprender los estudios y consultas necesarios para integrar en la pensión de jubilación de autónomos y trabajadores agrarios las lagunas de cotización cuando no exista tal obligación.
“De lo que se trata, según esta OPA, es de eliminar una discriminación que sufrimos los agricultores y nuestros trabajadores del Régimen agrario, respecto de los trabajadores del Régimen General” aclaran, implantando todos los mismos o equivalentes mecanismos de integración de lagunas de cotización, lo que supone una mejora en el cálculo de las pensiones de jubilación en la agricultura.
Del total de 21 propuestas de enmienda presentadas por Unión de Uniones a los Grupos parlamentarios, sólo estas dos resultaron aprobadas en esta fase de la tramitación, pese a la oposición principal de los Grupos Socialista y de Unidas Podemos.
“Nos encargamos de que nuestras propuestas lleguen a todos los grupos y unos las recogen y otros no, unos las apoyan y otros no pero, teniendo en cuenta lo complicado que es calzar una enmienda en el debate de Presupuestos, no es poca cosa que estas dos hayan salido adelante” señalaron.