Más de 300 profesionales del sector, procedentes de 20 países, han participado el Momento Expoliva “Almazaras cuya escala no interfiere en el diseño de ventajas competitivas de éxito”, celebrado en el marco de Expoliva Events y en el que se han abordado cuáles son las herramientas, limitaciones, resultados y detalles, que rodean la búsqueda de una o varias ventajas competitivas en entornos de escala y tamaño reducido, como es el caso de las pequeñas almazaras.
Momento Expoliva analiza la competitividad de las pequeñas almazaras
Durante el encuentro, moderado por Juan Vilar, consultor estratégico internacional, se incidió en que son varias las estrategias de aplicación. En primer término la promoción como estrategia macro de adecuación en el equilibrio del mercado, y en el ámbito micro, tendríamos la mejora competitiva a través de la integración, cooperación, diferenciación, singularización, etc. En segundo lugar, la búsqueda de eficiencia y valor añadido, mediante especialización, modernización, innovación tecnológica, entre otros.
Eduardo Valverde, gerente de Conde de Benalua, comentó durante su intervención que “la clave del éxito que nos ha hecho crecer ha sido crear un producto diferenciado”. En este sentido, dentro de las ventajas estratégicas sobre las que han trabajando destacó la formación de sus trabajadores, la aplicación de nuevas herramientas que permitan un acceso a datos en tiempo real o una mayor trazabilidad del producto, entre otras.
Por su parte, Javier Márquez, gerente de Almazara de Alcaraz, lleva 14 años apostado por la producción ecológica, explicaba como mientras “los grandes del sector iban ocupando los lineales, pero con precios más baratos, porque iban repitiendo el formato de explotación del aceite convencional, decidimos certificarnos en ecológico en distintos países, China, Japón, Brasil… y eso nos ha permitido abrir nuestro mercado y conseguir vender en una gran cantidad de países gracias a la diferenciación y certificación de nuestro producto”.
José Gilabert, presidente de Puerta de Las Villas, expuso que su “proyecto está basado en la sostenibilidad, y solo hacemos producción integrada y ecológica. Consideramos fundamental el asesoramiento a nuestros agricultores, para que ahorren costes y contribuyan a esa diferenciación que perseguimos siempre orientando nuestro producto a conseguir una calidad máxima”.
Por último, Miguel Abad, consultor oleícola de Intercoop, en la Comunidad Valenciana, afirmó que “es importante conocer los límites, hacer un enfoque, de donde estamos, que somos y que nos diferencia para ser competitivos, dejando claro que nunca podremos competir con las grandes organizaciones a nivel industrial. En nuestro caso, lo que tenemos es distinto a lo que tiene el resto, ya que tenemos 24 variedades distintas que nos hace únicos”.