ASAJA de Castilla-La Mancha insta a la Administración local, regional y nacional a que adopten medidas urgentes para reparar los daños causados por las fuertes tormentas de lluvia, viento y granizo que han asolado las explotaciones agrarias y ganaderas de la región, fundamentalmente en las provincias de Albacete y Toledo.
ASAJA de Castilla-La Mancha solicita la declaración de Zona de Actuación Especial
La Organización Agraria va a solicitar además al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente la declaración de Zonas de Actuación Especial (ZAE) para las comarcas afectadas para que sean atendidas a través del capítulo presupuestario dedicado a acciones de este tipo.
Los efectos devastadores de las tormentas de pedrisco han arrasado hectáreas de olivar, viñedo, frutos de cáscara, maíz, hortícolas, etc., muchas de las cuales no sólo perderán esta cosecha, sino que además sufrirán los efectos en los próximos años por los daños causados en la planta.
El granizo y el viento huracanado han ocasionado también el derribo de techados de naves ganaderas y ha deteriorado corrales, vallas, caminos agrícolas y otras infraestructuras agrarias.
Son muchas las familias que se han quedado sin el único ingreso que les sirve como medio de vida y, por tanto, es necesario que se habiliten ayudas y medidas fiscales, tributarias y laborales, como la exención de los pagos del Impuesto de Bienes Inmuebles y de las cuotas de la Seguridad Social, además de una rebaja de los módulos y la concesión de créditos blandos, de acuerdo con las entidades financieras que vienen interviniendo en estos casos.
Por último, ASAJA de Castilla-La Mancha ha pedido celeridad en las peritaciones, pues todavía se desconoce con exactitud la superficie agrícola total afectada, y urgencia en la puesta en marcha de medidas, pues muchos agricultores tendrán que hacer frente a tratamientos fitosanitarios de emergencia para cerrar las heridas causadas por el granizo en las ramas y los troncos para disminuir los efectos de las próximas campañas.