Los daños por inundación en cultivos agrícolas y explotaciones ganaderas por la crecida del Ebro están cubiertos por el sistema de seguros agrarios, según recalca el “pool” de empresas privadas del seguro agrario, Agroseguro.
Agroseguro prevé indemnizaciones millonarias por daños en el agro ante la crecida del Ebro
Los fuertes temporales con intensas precipitaciones desde comienzos de 2018 han provocado en los últimos días el desbordamiento de algunos ríos, en especial el río Ebro, lo que ha causado daños de consideración en diversas explotaciones agrícolas y ganaderas. Otros ríos que también han causado daños por inundación son el Arga y el Aragón.
Aunque, según Agroseguro, todavía es pronto para conocer con exactitud la superficie que se está viendo afectada, es conocido que los siniestros se concentran en las Comunidades Autónomas ribereñas del Ebro, es decir la Comunidad Foral de Navarra, La Rioja y Aragón y en cultivos de cereal, frutales, hortalizas y forrajes principalmente.
La superficie asegurada en las zonas inundadas alcanza, calcula esta entidad, aproximadamente las 12.000 hectáreas, aunque desde las organizaciones agrarias la elevan a cerca de 30.000 hectáreas el área afectada por la crecida del del Ebro y otros afluentes, de las que entre 18.000 y 20.000 hectáreas habría afectado a la Comunidad de Aragón, entre 6.000 y 8.000 ha a Navarra, y el resto a La Rioja baja.
Hasta el momento, Agroseguro ha recibido declaraciones de siniestro correspondientes a cerca de 2.000 ha afectadas, pero se continuarán recibiendo a lo largo de los próximos días, a medida que las aguas vayan bajando.
El “pool” indica que los daños ocasionados por este tipo de sucesos están cubiertos por el sistema de seguros agrarios combinados, tanto para producciones agrícolas como para las instalaciones contratadas, y para las producciones ganaderas.
Con la experiencia de las inundaciones de 2015, las indemnizaciones a satisfacer por el Seguro Agrario serán muy probablemente millonarias.
Con el objetivo de ofrecer el mejor servicio a los asegurados, Agroseguro ha iniciado ya la planificación de las labores de tasación y la red de peritos está preparada para acometer las labores de valoración de daños tan pronto como descienda el nivel del agua y se pueda acceder a las parcelas.
Medidas urgentes
Por otro lado, alcaldes de los municipios de la Ribera Alta y Baja del Ebro han pedido al Gobierno central voluntad política para ofrecer soluciones reales y efectivas, como modificar la legislación ambiental que impide limpiar y dragar el río para la retirada de sedimentos que reducen cada vez más el vaso natural del cauce.
Coinciden en que si no se actúa ya el Ebro volverá a causar daños y las avenidas periódicas de agua tendrán cada vez mayores repercusiones sobre cultivos, instalaciones, infraestructuras y población rural. “Hay que quitar árboles y arbustos, porque antes, hace unos años, las riadas eran incluso mayores y no provocaban tantas afecciones o daños, según los alcaldes de estos pueblos ribereños.»
Este colectivo pide a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) que haga un estudio de cada zona y actúe en aquéllas que tengan margen de mejora para prevenir y evitar estas situaciones, lo que, además, no supondría, un coste elevado para la Administración y, en todo caso, sería muy inferior al coste que va a suponer restituir y reparar los daños reales y el lucro cesante en las explotaciones agrarias y en las instalaciones ganaderas afectadas.
Los municipios solicitan también más zonas de “inundación controlada” para que se produzcan menos afecciones ante la crecida del cauce y que los desembalses actuales se limiten al máximo posible para “desaguar” los cultivos agrícolas afectados.