La actual campaña citrícola, con el 87% de la cosecha de la Comunitat Valenciana ya comercializada o vendiéndose actualmente en los mercados, entra en su recta final y lo hace presentando un balance verdaderamente catastrófico para los productores.
AVA-ASAJA eleva a cerca de 300 M€ las pérdidas de los citricultores valencianos en la actual campaña 2018/19
Un detallado informe elaborado por los servicios técnicos de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) revela que las pérdidas que acumulan los agricultores, dedicados al cultivo de naranjas y mandarinas desde septiembre pasado y hasta la fecha, rondan ya los 300 millones de euros, -concretamente 295,9 millones- lo que convierte al presente ejercicio en uno de los más calamitosos en toda la larga historia de la citricultura valenciana.
Según esta organización agraria, el desastre ha sido de tal magnitud que algo más del 27% de la producción ni siquiera ha encontrando salida comercial, debido en parte a los efectos de las lluvias torrenciales del pasado mes de noviembre, pero también a causa sobre todo de la ralentización de una demanda, que no ha conseguido absorber la totalidad de la cosecha a través de un mercado que ya estaba muy saturado por la competencia desleal que ejercen los cítricos procedentes de terceros países.
Esa apreciable cantidad de fruta, que se quedó colgando del arbolado ante la ausencia de compradores, ha generado a su vez un sobrecoste adicional a los agricultores que se han visto envueltos en esta coyuntura, puesto que, además de quedarse sin vender sus cítricos, han tenido que retirarlos de los árboles para no provocarles un desarreglo hormonal.
El volumen global de esas cuantiosas pérdidas económicas que recoge el análisis de AVA-ASAJA y arrastran los cultivadores valencianos de cítricos, los verdaderos damnificados por esta crisis, equivale a decir que desde que arrancó la temporada los productores han perdido 1,5 millones de euros cada día.
Si bien los resultados han sido negativos para la mayor parte de las variedades citrícolas, las clementinas y las navelinas son las que se han llevado la peor parte.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, además de calificar la campaña de «absolutamente desastrosa», subraya que «lo que ha sucedido sirve para demostrar de manera inequívoca tanto que los mecanismos ante situaciones de crisis de la Política Agraria Común (PAC) no sirven para nada: son letra muerta, papel mojado, como que las Administraciones -la autonómica, la central y la de Bruselas- muestran una incapacidad manifiesta para adoptar medidas eficaces que alivien verdaderamente los problemas de los productores que son, en definitiva, quienes de verdad están sufriendo los efectos de esta coyuntura insostenible».
Ante este panorama, Aguado señala que «hace falta un replanteamiento general a la hora de abordar la cuestión citrícola. Las Administraciones tienen que dejar de pasarse la pelota unas a otras y dejarse de tantas promesas y tanta palabrería cuando se acercan elecciones.
Hay que revisar también, añade, el funcionamiento de este colectivo de arriba a abajo y es preciso un cambio de actitud por parte de todos, ya si no lo hacemos nos quedarán dos telediarios».
LA CRISIS CITRÍCOLA EN CIFRAS
Pérdidas por lluvias (toneladas): 500.000 t (10.000 t de Satsumas tardías; 280.000 t de Clementinas de media estación; 170.000 t de Navels temprana; 33.000 t de Navals media estación, y 7.000 t de Blancas tempranas).
Valoración de las pérdidas por lluvias (€): 91.540.000 € (1,8 M€ Satsumas tardías; 576 M€ de Clementinas de media estación; 27,2 M€ de Navels tempranas; 5,28 M€ de Navel de media estación, y 1,26 M€ de Blancas tempranas).
Cítricos que no encontraron salida comercial (t): 554.100 toneladas (30.000 t de Satsumas tempranas; 15.000 t de Satsumas tardías; 50.000 t de Clementinas tempranas; 97.000 t de Clementinas de media estación; 13.000 t de Clementinas tardías; 65.000 t de Mandarinas híbridas; 115.000 t de Navels tempranas; 24.000 t de Navels de media estación; 95.000 t de Navels tardías, sobre todo Lane late; 11.300 t de Blancas tempranas; 1.400 t de Sanguinas; 32.700 t de limones Fino y mitad Verna, y 4.000 t de Pomelos).
Pérdidas por falta de salida comercial (€): 124.332.800 € (7,5 M€ de Satsumas tempranas; 3,75 M€ de Satsumas tardías; 12,5 M€ de Clementinas tempranas; 24,25 M€ de Clementinas de media estación; 3,25 M€ de Clementinas tardías; 16,25 M€ de Mandarinas híbridas; 23 M€ de Navels tempranas; 4,8 M€ de Navels de media estación; 19 M€ de Navels tardías, sobre todo Lane late; 2,26 M€ de Blancas tempranas; 280.000 € de Sanguinas; 6,55 M€ de limones Fino y mitad Verna, y 940.000 € de Pomelos).
Rentabilidad sobre costes de producción: -80.110.280 €. (-4.901.750 € de Satsumas tempranas; -3.468.710 € de Satsumas tardías; +9.725.350 € de Clementinas tempranas; -27.312.040 € de Clementinas de media estación; -3.622.290 € de Clementinas tardías; +40.055.400 € de Mandarinas híbridas; – 37.080.000 € de Navels tempranas; -5.922.900 € de Navels de media estación; -32.550.000 € de Navels tardías, sobre todo Lane late; -3.609.680 € de Blancas tempranas; +812.400 € de Sanguinas; -11.861.800 € de limones Fino y mitad Verna, y -374.260 € de Pomelos).
TOTAL PÉRDIDAS ECONÓMICAS (€) : 295.983.080 €. (-12.401.750 € de Satsumas tempranas; -9.018.710 € de Satsumas tardías; -2.774.650 € de Clementinas tempranas; -107.562.040 € de Clementinas de media estación; -6.872.290 € de Clementinas tardías; +23.805.400 € de Mandarinas híbridas; – 87.280.000 € de Navels tempranas; -16.002.900 € de Navels de media estación; -51.550.000 € de Navels tardías, sobre todo Lane late; -7.129.680 € de Blancas tempranas; +532.400 € de Sanguinas; -18.414.600 € de limones Fino y mitad Verna, y -1.314.260 € de Pomelos).
