Cajamar y la interprofesional del Limón y Pomelo (Ailimpo) diseñan un instrumento financiero pionero en el sector agroalimentario español, y que está ligado al uso de los contratos tipo homologados adaptados a la Ley de la Cadena Alimentaria.
Financiación para cumplir con el contrato-tipo de compraventa de limones en Murcia
Cajamar Caja Rural y la Asociación Interprofesional de Limón y Pomelo (Ailimp) han suscrito un acuerdo de colaboración que permitirá a los productores, cooperativas, exportadores e industrias de limón y pomelo acceder a financiación preferente aplicada a las operaciones de compraventa de fruta que se hayan formalizado con los contratos tipo aprobados por la interprofesional y homologados por el Magrama.
Se trata, según Ailimpo, de una apuesta innovadora, tanto del sector a través de la interprofesional, como de Cajamar, que sin duda, será una referencia para implantarlo en otros sectores. El Convenio demuestra el compromiso de Ailimpo para promocionar el uso del contrato y dar cumplimiento a las exigencias de la Ley 12/2013 de mejora de la cadena alimentaria, y refuerza el papel de Cajamar como entidad de referencia del sector agroalimentario español.
El convenio ha sido suscrito en el marco de la jornada “Limón y Pomelo, ¿hacia dónde vamos?”; celebrada en la Sala de Cultura de Cajamar, y donde se pone de manifiesto la competitividad de las empresas citrícolas españolas, liderando la producción, exportación e industrialización.
Tanto Domingo Arce Segura, presidente de la interprofesional, como Jesús López Martínez, director territorial de Cajamar en la Región de Murcia, destacaron el nivel de calidad, innovación y capacidad de adaptarse a los cambios tanto de los agricultores como de las empresas e industrias que se mueven en torno al limón y pomelo.
Durante el encuentro empresarial se detallaron los retos de futuro que tiene el sector, como la potenciación aún mayor del comercio internacional con la apertura de nuevos mercados, la mejora de la producción con un uso racional de los recursos, la prevención de entrada de plagas de terceros países, la profesionalización para hacer frente a las nuevas exigencias de los clientes del fresco y de la industria, o la importancia de incrementar el nivel aseguramiento de los cultivos para hacer frente a las inclemencias del tiempo.