La Junta de Andalucía concede 3,1 millones al sector apícola para la mejora de su producción y su comercialización
El Consejo de Gobierno de Andalucía ha tomado conocimiento de la concesión de subvenciones por parte de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, correspondientes a la Intervención Sectorial Apícola en el marco del Plan Estratégico de la Política Agrícola Común 2023-2027 (PEPAC), por valor de 3.161.156,28 euros.
Los destinatarios son 1.197 apicultores que desarrollan su actividad en las ocho provincias y poseen 360.970 colmenas. Estos profesionales se beneficiarán de 2.626.591,31 euros. Además, otras tres entidades representativas del sector (COAG, la Asociación de Apicultores de Andalucía y Sierras Andaluzas S.C.A.), recibirán 534.564,97 euros.
Dichas subvenciones servirán para sufragar los gastos por la contratación de especialistas para informar y asistir a los apicultores sobre sanidad apícola; la organización, celebración y asistencia a cursos de formación; la adquisición de tratamientos contra la varroosis y otros productos para incrementar la vitalidad de las colmenas; inversiones para repoblar las mismas, así como las cuotas del seguro de responsabilidad civil de las colmenas, entre otras acciones.
Al hilo de esta información la Junta recuerda que el sector apícola andaluz está compuesto por 4.485 explotaciones que representan en torno al 15% del total de las explotaciones apícolas españolas, con algo más de 600.000 colmenas que producen más de 8,5 millones de kilos de miel y más de 300.000 kilos de cera de abeja. La producción generada se aproxima a los 33 millones de euros anuales, de los que 3,3 millones corresponden al valor de las exportaciones a países como Francia, Reino Unido, Estados Unidos, Portugal, Marruecos, Suecia o Arabia Saudí.
De la misma manera, a través de un comunicado señalan que en Andalucía existe un sector asociado a esta industria artesanal representado por 54 empresas dedicadas al envasado y comercialización de las producciones apícolas. Por otra parte, la apicultura constituye la base para la conservación y la diversidad de las plantas que dependen de la polinización, lo que contribuye a elevar la productividad de gran parte de los cultivos, aprovechando recursos no utilizados por ninguna otra actividad productiva.
Además, desempeña un rol esencial en el mantenimiento del medio rural, así como un importante papel medioambiental por su contribución al equilibrio ecológico, la conservación de los ecosistemas, el mantenimiento de la biodiversidad y la fijación de la población en el medio rural.