La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, presentó este lunes 3 de octubre en Jaén el primer aforo del olivar 2022-2023, que estima una producción de cerca de 3 Mt de aceitunas para molturar de las que se obtendrán 587.000 t de aceite de oliva.
Crespo señaló que “esta cantidad supone un 49% menos de aceite que en la campaña recién acabada 2021/22 debido, principalmente, a que ha estado condicionada por el cambio climático y la sequía pertinaz que sufrimos de forma reiterada en los últimos años”.
Crespo señaló que “esta cantidad supone un 49% menos de aceite que en la campaña recién acabada 2021/22 debido, principalmente, a que ha estado condicionada por el cambio climático y la sequía pertinaz que sufrimos de forma reiterada en los últimos años”.
Si se traslada este volumen de producción en Andalucía a toda España, de acuerdo al peso habitual que tiene esta Comunidad en el total nacional, se podría estimar una producción oleícola en nuestro país en la actual campaña 2022/23 inferior al millón de toneladas, en una horquilla que estaría entre 940.000 y 980.000 t, según fuentes del propio sector.
Este aforo inicial de la Junta de Andalucía es incluso unas 112.000 toneladas inferior al que hace pocas semanas avanzaba Cooperativas Agro-alimentarias, que estimaba unas 699.000 t en esta Comunidad.
Sin embargo, destacó que el enlace de campaña “nos garantizará un millón de toneladas de aceite de oliva a los mercados”.
En el caso de la aceituna de mesa, el informe de la Junta prevé una cosecha de 366.448 t en Andalucía, un 32,8% menos que en la pasada campaña. Atendiendo a las principales variedades, se estima una producción andaluza de 204.366 t de aceitunas de mesa Hojiblanca; 113.239 t de Manzanilla, y 22.671 t de Gordal.
Respecto a estos datos, Carmen Crespo afirmó que “debemos mantener la esperanza de mejorar la situación que plantea el aforo” para la aceituna de mesa porque, si bien el inicio de la campaña de verdeo se ha caracterizado por la escasez de precipitaciones, es posible que las últimas lluvias mejoren el peso de los frutos.”
Por otro lado, la consejera explicó que se estima que la actividad ligada al olivar de almazara genere en esta campaña 13,8 millones de jornales en Andalucía, de los cuales casi el 36% se vincula a la recolección (5 millones).
En el caso de la aceituna de mesa, se calculan 2,2 millones de jornales en labores del campo, incluida la recogida. Por tanto, la estimación global asciende a 16 millones de jornales en la campaña 2022/23 para el aceite de oliva y la aceituna de mesa de Andalucía.
En su intervención, la consejera recordó que los datos incluidos en este primer aforo son únicamente estimaciones de producción y que la evolución de la climatología durante las próximas semanas y otros factores externos podrían suponer cambios.
Aún así, añadió Crespo, las previsiones del Gobierno andaluz suelen ajustarse bastante a la producción real, acertando con una “fluctuación que puede rondar en torno al 10%” entre el aforo inicial y los datos finales de campaña, debido a que la metodología empleada por la Consejería de Agricultura para su elaboración es bastante objetiva y fiable al contar con diversas fuentes de información.
Por provincias, destaca en primer lugar Jaén con una previsión de recogida de 937.000 t de aceitunas para almazara, que darán lugar a 200.000 t de aceite de oliva, un 60% menos en comparación con 2021/22.
En el caso de Almería, se espera alcanzar las 55.000 t de aceituna para almazara y 10.000 t de aceite; en Cádiz, 52.000 t de aceituna y 9.000 t de aceite; en Córdoba, 850.000 t de aceituna y 158.000 t de aceite; en Granada, 331.000 t de aceituna y 70.000 t de aceite; en Huelva, 52.000 t de aceituna y 10.000 t de aceite; en Málaga, 215.000 t de aceituna y 40.000 t de aceite, y en Sevilla, 488.0000 t de aceituna y 90.000 t de aceite.
En cuanto al olivar de almazara ecológico, el aforo apunta a 16.700 t de aceite de oliva repartido entre todas las provincias. En 2022/23, se espera una producción de 300 t de aceite de oliva ecológico en Almería; 200 t en Cádiz; 8.000 t en Córdoba; 1.000 t en Granada; 3.100 t en Huelva; 1.200 t en Jaén; 400 t en Málaga; y 2.500 t en Sevilla.
Asimismo, el informe de la Junta recoge también datos provinciales de previsiones relativas a la aceituna de mesa. Sevilla es el principal territorio andaluz, pues se espera recoger 247.600 t de este fruto en la campaña actual. Por su parte, Almería apunta a 473 t; Cádiz, 42 t; Córdoba, 70.740 t; Granada, 59 t; Huelva, 3.100 t; Jaén, 234 t; y Málaga, 44.200 toneladas.
Durante su intervención, la consejera apuntó también que “Andalucía es líder en exportaciones de aceite de oliva”, al concentrar casi el 75% de las ventas internacionales de España.
Asimismo, esta Comunidad Autónoma también se encuentra en cabeza en relación a exportación de aceituna de mesa, un producto afectado por los aranceles impuestos por Estados Unidos.
Al respecto, Carmen Crespo afirmó que es necesario “seguir luchando por poner fin al arancel impuesto por Estados Unidos, que está provocando pérdidas de 150 millones de euros”, recalcando que el Gobierno andaluz no comparte la sentencia de los tribunales americanos.
Por este motivo, solicitó que se continúe “trabajando de forma proactiva desde Europa” contando con el respaldo de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que “da la razón a la eliminación de unos aranceles que afectan especialmente a la aceituna negra de Andalucía.”
Carmen Crespo hizo referencia a alguno de los desafíos del sector oleícola para la próxima campaña. Por ejemplo, comentó que “en este momento, el precio acompaña” al aceite de oliva pero, lamentablemente, “los costes de producción son excesivamente elevados”.
Ante esta situación, volvió a hacer hincapié en la necesidad de establecer una moratoria para que las exigencias derivadas de los eco-regímenes de la nueva Política Agraria Común (PAC) “no se conviertan en un coste adicional” y para que “el olivar se considere un eco-esquema “per se’”.
También se refirió la consejera a la situación hidrológica y su impacto en el olivar, apuntando que “trabajar en la política hídrica no solamente es importante desde hace mucho tiempo, sino que se va haciendo ya urgente”.
Crespo recordó algunas de las peticiones realizadas desde la Junta de Andalucía al Estado, como el desarrollo de las obras de la presa de Siles y la concesión definitiva que permita a los regantes aprovechar las aguas regeneradas previstas en la cuenca del Guadalquivir.
Asimismo, la responsable de Agua se refirió a las actuaciones puestas en marcha por la Junta, como la colaboración con ocho Comunidades de Regantes de Jaén, que supone la movilización de 10 M€ para “ahorrar agua y energía”.
“Ese es el camino”, añadió la consejera, que citó también otras iniciativas de su departamento como el impulso del Centro de Referencia de la Calidad del Aceite de Oliva y la Estrategia Andaluza del Olivar, invitando al propio sector a “ponerla en marcha conjuntamente con el Gobierno andaluz y explorar la posibilidades que esta estrategia pueda ofrecer”.
Por otro lado, Carmen Crespo comentó el impacto que tiene en la actual campaña de olivar 2022/23 la reducción del 25% de la lluvia y unas temperaturas promedio de 29 grados, que se encuentran por encima de la media histórica de Andalucía.
Ante esta situación, apostó por continuar avanzando en política hídrica en la provincia de Jaén y recordó que desde la Junta se está trabajando en el ámbito de la depuración con 131 M€, cantidad que contempla inversiones en el 85% municipios jiennenses, con el fin de poner al servicio de los regantes aguas regeneradas para sus cultivos.
Al hilo de esta cuestión, lamentó el “riego en precario” que se mantiene en este territorio, que forma parte de la cuenca del Guadalquivir, de competencia estatal, y solicitó que se otorguen las concesiones definitivas a los regantes para que puedan aprovechan los 20 Hm³ de aguas regeneradas que contempla la planificación de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), añadiendo que, cuando esto suceda, la Junta colaborará con el impulso de los tratamientos terciarios de las depuradoras para hacer posible el uso de estos recursos adicionales para el riego de los cultivos.
Por otro lado, la responsable de Agricultura reiteró también su petición al Gobierno para que aplique la doble tarifa eléctrica para los regantes, contemplada en la Ley de la Cadena Alimentaria, con el fin de hacer frente no solo al reto de la sequía, sino también a la inflación y al alza de los costes de producción que sufre el sector olivarero.
Por último, Carmen Crespo subrayó que el olivar es “el principal cultivo de Andalucía y su producción superó en valor los 3.567 M€ en 2021.
Asimismo, detalló que esta Comunidad cuenta en total con 1,63 Mha dedicados al cultivo de olivos, que representan el 61% del total nacional, el 32% de Europa y el 14% del mundo. De esta extensión, el 95% son de aceitunas para almazara y el 5% restante (82.000 ha), con variedades destinadas preferentemente a la aceituna de mesa.
El olivar es, además, añadió Crespo, “motor de empleo y eje vertebral de la economía de la Andalucía rural”, pues el 97% de los 800 pueblos andaluces cuentan con superficie destinada a este cultivo leñoso y su actividad economía da empleo a más de 300 municipios, ligados directamente a la producción del aceite de oliva y a un tejido agroindustrial de más de 1.700 empresas.
Informe aforo: https://lajunta.es/3uxth