La Unió de Llauradors ha manifestado su preocupación por la rápida propagación de la bacteria Xylella fastidiosa en los olivares de Italia y solicita un control extremo de las fronteras para evitar la entrada de plantas infectadas en territorio español y valenciano.
La Unió demanda medidas para evitar la entrada de Xylella Fastidiosa en el campo valenciano
Se trata de una bacteria muy dañina que deja como resultado la muerte del árbol tras secarlo y que afecta aparte del olivar a otras especies vegetales como los cítricos, la viña o los frutales, entre otras.
En el país transalpino su propagación es bastante rápida, de ahí el nombre del ébola del olivar o bacteria asesina como se le conoce popularmente, y ha afectado ya a una superficie de alrededor de 250.000 hectáreas y más de un millón de árboles. Por su parte Francia ha decretado el cierre de fronteras a todas las especies vegetales procedentes de aquellos países que no puedan demostrar que están libres de la bacteria.
La Unió solicita la máxima información para los agricultores pues su entrada se considera ‘bastante probable’ por parte de los expertos europeos e investigación para actuar en caso de propagación pues hasta la fecha su erradicación se logra sólo con la destrucción de la planta afectada.
Asimismo La Unió considera necesario un exhaustivo protocolo de actuación de control de las fronteras en todo el ámbito de la Unión Europea para tratar de prevenir el contagio al tratarse de un asunto muy grave. Resulta clave también el control de las plantas existentes en España y la Comunitat Valenciana, con la recomendación a los agricultores para que las adquieran en viveros autorizados.
Xylella fastidiosa es la bacteria responsable de varias enfermedades que afectan a numerosas especies de interés agrícola y además relevantes en el campo valenciano, aparte del olivar, como los cítricos, viña, almendros, frutales y plantas ornamentales.
Además, existen muchas especies de árboles, arbustos y plantas ornamentales y silvestres que pueden alojar la bacteria sin mostrar síntomas, sirviendo de fuente de inóculo para la infección otros cultivos ya que diferentes insectos vectores pueden transmitirla. Por eso, la Unión Europea considera a esta bacteria como un organismo de cuarentena.
Tanto el Ministerio como la Conselleria de Agricultura deben concienciarse de la importancia de tomar medidas preventivas pues se trata ‘de una enfermedad tremendamente peligrosa y que puede conllevar terribles consecuencias para cultivos fundamentales en nuestro territorio’.