Doscientos tractores y cerca de un millar de personas vinculadas directa o indirectamente al sector vitivinícola valenciano salieron hoy a las calles de Requena para reclamar unos precios dignos de la uva destinada a la elaboración tanto de vinos como de cavas.
Un millar de viticultores reclama en Requena precios dignos de la uva para vino y cava
Las principales organizaciones agrarias y cooperativas del colectivo –la Coordinadora Campesina del País Valenciano-COAG, la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) y La Unió de Llauradors i Ramaders, con el apoyo de la Federació de Cooperatives Agro-alimentàries de la Comunitat Valenciana– unieron sus fuerzas a la hora de convocar esta masiva manifestación y tractorada durante la cual alertaron de que, si se confirman los precios a la baja que a día de hoy están ofreciendo las grandes bodegas, los productores valencianos sufrirán unas pérdidas económicas superiores a los 28 millones de euros, de los cuales cerca de 7,5 millones corresponden al sector del cava de Requena.
Bajo el lema «Por el cava y el sector vitivinícola» y con pancartas que rezaban «Ningún fondo buitre pisotea mi uva», «Al pan pan y al vino vino: esto es un atraco» o «No a las grandes corporaciones que desangran el medio rural», los manifestantes valencianos se sumaron a los paros convocados en otras regiones productoras vitivinícolas como Cataluña y Extremadura.
Al término de la movilización, el presidente de la entidad sin ánimo de lucro para la Promoción Agroalimentaria de Calidad de la Comunitat Valenciana (PROAVA), Félix Cuartero, defendió mediante un manifiesto la necesidad de adoptar medidas dirigidas a sacar a los viticultores de una grave y prolongada crisis de rentabilidad que está provocando una falta de relevo generacional y el abandono de campos.
Entre las reivindicaciones del colectivo cabe destacar la solicitud a la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA), órgano dependiente del Ministerio de Agricultura, y a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para que ponga en marcha una campaña especial de investigación sobre las grandes bodegas a fin de sancionar posibles acuerdos de precios; el cumplimiento estricto de la ley de mejora del funcionamiento de la cadena alimentaria; agilizar los protocolos de exportación a nuevos mercados; mejorar el control de entradas de plagas y enfermedades de las plantas de vivero; reivindicar y poner en valor la singularidad de la DOP Utiel-Requena, DOP Alicante y DOP Valencia.
El sector vitivinícola valenciano también exige el establecimiento de unas tarifas eléctricas para de riego de apoyo y a las bodegas que se facturen por la energía utilizada, permitan realizar dos modificaciones al año de la potencia contratada y establezcan un IVA reducido al regadío. Igualmente pide un gasoil adaptado a las necesidades del sector agrario y ganadero; evitar las pérdidas de fondos comunitarios del Plan de Apoyo al Sector Vitivinícola de España (PASVE) y el desarrollo y composición de los Planes de Desarrollo Rural de la nueva PAC que apoyen realmente al medio rural y sus habitantes; incrementar el presupuesto para la investigación con el objeto de erradicar las enfermedades de la madera en la viña; potenciar la promoción del consumo de vinos y cavas; controlar la superpoblación de fauna salvaje y flexibilizar las normas del seguro agrario para facilitar indemnizaciones por este tipo de daños, y exigir al Ministerio de Agricultura que haga su labor para fortalecer y cohesionar Agroseguro a través del control de las subidas indiscriminadas de las primas.