Tras la aprobación oficial de los primeros expedientes de viñedos singulares de Rioja el pasado año, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha reconocido nuevos parajes vitícolas identificados como ‘Viñedos Singulares’ dentro de la Denominación de Origen Calificada.
Un centenar de parajes, «Viñedos Singulares» de la DOCa Rioja
Esta nueva indicación geográfica da ahora respuesta a las solicitudes de 17 titulares de 20 nuevos viñedos, representativos de casi 32 hectáreas, sumándose a los 84 proyectos del pasado año hasta culminar una superficie total de 186 hectáreas.
Con esta nueva identificación de viñedos especiales el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada Rioja, que trabaja de la mano con el Ministerio para seguir desarrollando este proyecto de excelencia, se consuman nuevos reconocimientos asociados a esta figura que pretende otorgar el debido protagonismo al terroir, origen que los consumidores más conocedores buscan ahora en los vinos.
Fernando Salamero, presidente del Consejo Regulador, aplaude este nuevo paso: “Rioja fue pionera en desarrollar una manera de zonificar y diferenciar y eso nos ha permitido enriquecer nuestra oferta exigiendo la más alta calidad en cada uno de los procesos para garantizar la salida al mercado de unos vinos únicos”.
El presidente destaca “cómo Rioja se encuentra aún en el principio de esta singladura, que ya cuenta con nuevas solicitudes que serán evaluadas rigurosamente en los próximos meses”. Subraya que “el liderazgo no se confecciona ni se impone, sino que hay que conquistarlo y las decisiones estratégicas adoptadas por Rioja en los últimos años para facilitar que los operadores puedan encontrar el camino que mejor se adecua a su oferta, son las mejores herramientas para conseguirlo y el mercado así lo está reconociendo”.
Requisitos cualitativos:
Se definieron como vinos procedentes de viñedos con una serie de garantías cualitativas como que tengan más de 35 años de edad y cuyos rendimientos no sobrepasan, de manera natural y en virtud de su vigor naturalmente limitado, 5.000 kgs. por hectárea en el caso de variedades tintas y 6.922 kgs. por hectárea en variedades blancas. A su vez su transformación se limita a 65 litros por cada 100 kgs. de uva, su cultivo es respetuoso con el medio ambiente y su vendimia manual.
Es también destacable que el vino se evalúa dos veces, recién elaborado y justo antes de su comercialización, siendo que en este momento debe ser considerado como excelente por la mayoría de los catadores que lo evalúen.
Las contraetiquetas que aparecen en las botellas garantizan la mención “Viñedo Singular” y permiten que los consumidores sepan que todas las características descritas están certificadas por el Consejo Regulador.