Un año después de decretar la prohibición del uso del Clorpirifos y Metil Clorpirifos, la UE estudia suprimir otra materia activa fitosanitaria, el Sulfoxaflor, que los agricultores emplean para hacer frente a la plaga del Cotonet de Sudáfrica, según denuncia la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA).
AVA-ASAJA denuncia que la UE estudia prohibir otra sustancia que agravaría la lucha contra el Cotonet
Destaca la organización agraria que “los planes comunitarios de prohibir ahora el Sulfoxaflor amenazan con dificultar aún más la precaria lucha contra el Cotonet de Sudáfrica e incrementar los daños en los cítricos y caquis”.
Según estimaciones de AVA-ASAJA, las pérdidas provocadas por el Cotonet de Sudáfrica tras la supresión del Clorpirifos y Metil Clorpirifos se han disparado, solo en la presente campaña, hasta los 150 millones de euros en los cítricos y caquis de la Comunitat Valenciana.
Las sustancias autorizadas para el Cotonet de Sudáfrica se han reducido en 2020 básicamente a la citada materia Sulfoxaflor y a Acetamiprid, que a juicio de AVA-ASAJA “se han demostrado mucho menos eficaces que el Clorpirifos y Metil Clorpirifos”, mientras que las soluciones de lucha biológica que están investigando las administraciones “a día de hoy presentan serias dudas sobre su grado de implantación, precio y efectividad frente a la plaga”.
Por ello, ejemplos como el Clorpirifos o el Mancozeb –un fungicida muy empleado en la agricultura valenciana cuyo uso dejará de estar permitido en 2021– permiten concluir a AVA-ASAJA que “Bruselas lleva a cabo una insaciable y suicida restricción de materias activas sin dotar a los agricultores europeos de alternativas más sostenibles que sean tanto viables económicamente como de contrastada eficacia contra las plagas y enfermedades”.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, considera además “inaceptable que la UE propicie este desastre sanitario mientras países terceros siguen colando en Europa sus cítricos tratados con materias activas prohibidas a los agricultores comunitarios”.
La organización agraria informa de que el Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF) ha notificado en los últimos dos meses al menos 15 interceptaciones de cargamentos citrícolas –mandarinas, naranjas y limones– procedentes de Turquía tratados con Clorpirifos y Metil Clorpirifos. Los países comunitarios que detectaron estos casos son Bulgaria, Eslovenia, Croacia, Hungría y Polonia.