Después de tres años de negociaciones complicadas y un número incontable de diálogos tripartitos, el COPA-Cogeca, que defiende los intereses de los agricultores europeos y de sus cooperativas, acoge con satisfacción el hecho de que los negociadores hayan alcanzado finalmente un acuerdo político provisional sobre la futura PAC hoy en Bruselas.
COPA-Cogeca considera que la PAC 2023-2027 supone un “desafío sin precedentes” para el sector agrario comunitario
Esta organización destaca el arduo trabajo realizado por la Presidencia portuguesa del Consejo en este primer semestre de 2021, así como el papel clave desempeñado por los ponentes del Parlamento Europeo.
El compromiso provisional alcanzado representa, según el COPA-Cogeca, un desafío sin precedentes para el sector agrario comunitario, como indicaron de forma acertada los negociadores del Parlamento.
Y, en este sentido, añade, “será necesario seguir trabajando para traducir esto en términos técnicos y luego para desarrollar una legislación secundaria que garantice una puesta en marcha rápida y oportuna de la PAC 2023-2027.
Sigue habiendo muchas preocupaciones para el sector agrario, en particular con respecto a la coherencia general del acuerdo alcanzado con otras políticas de la UE.
Agricultores de toda Europa reiteraron este viernes 25 de junio la necesidad de que la Comisión realice un trabajo urgente durante una movilización simbólica, en particular para asegurarse de que el compromiso alcanzado sea coherente a nivel nacional, pero sobre todo con respecto a todas las demás propuestas del Pacto Verde Europeo, que pesará de forma compleja y contradictoria para los agricultores.
No debemos olvidar que, junto con la PAC, mañana tendremos la Estrategia “De la granja a la mesa”, la Estrategia de “Biodiversidad 2030”, los objetivos de neutralidad climática, y la taxonomía que deberán reflejarse en nuestros acuerdos comerciales futuros y existentes.
Este lunes 28 y 29 de junio, los ministros de Agricultura debatirán este acuerdo en Luxemburgo. Como siempre, el diablo está en los detalles y muchos puntos polémicos se discutirán en las deliberaciones técnicas.
Por tanto, nos reservamos nuestra reacción detallada sobre el acuerdo alcanzado tras esta nueva etapa.
Manifiesto: ES manifesto final flash action
Reacción de UPA
Tras años de negociaciones y numerosos ‘tiras y afloja’ entre los Estados Miembros, la Comisión, el Consejo y el Parlamento Europeo, parece que la nueva PAC está más cerca que nunca de cerrarse.
No obstante, según la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), se asiste con enorme expectación a la “letra pequeña” de un acuerdo, que marca el trabajo de cerca de un millón de agricultores y ganaderos en España y la alimentación de cientos de millones de ciudadanos y ciudadanas.
UPA se ha mostrado “esperanzada” con el principio de acuerdo. Una valoración positiva, aunque con reservas, pues reconocen que hasta que no se cierre definitivamente por parte de los ministros de Agricultura “no terminarán de estar tranquilos”.
Un acuerdo final que debería producirse la próxima semana, antes del fin del semestre.
El principio de acuerdo conocido marca como obligatoria una ayuda redistributiva de como mínimo el 10% de los pagos para favorecer a los pequeños agricultores.
También establece un apoyo mínimo del 3% del presupuesto a los jóvenes agricultores y ganaderos menores de 40 años.
Sobre los llamados eco-esquemas, UPA considera que tal y como están planteados, deben servir para reforzar a los agricultores y ganaderos familiares frente a modelos superintensivos y de gran dimensión.
Según esta organización agraria, loa PAC reforzará las medidas de gestión de mercados, una demanda histórica que recoge el guante del sector al afrontar el mayor problema de los productores: la falta de precios justos provocada por el desequilibrio de la cadena alimentaria.
En todo caso UPA advierte que ahora queda concretar la “letra pequeña” a nivel de Estado Miembro, en especial con otra de sus reivindicaciones históricas, como es el techo de ayudas por explotación, que finalmente será opcional para los países, pero que en España es “más que necesario para acabar con los grandes perceptores terratenientes y abrir mejores posibilidades de futuro para la agricultura y la ganadería familiar.”
