La Comisión Europea está poniendo a disposición de los agricultores unos 433 millones de euros como reembolso a los agricultores de los pagos directos de la PAC, tal y como se establece en el Reglamento de Ejecución (UE) 2017/2197, publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) este 28 de noviembre.
Devolución de casi 55 M€ a los agricultores españoles de la reserva de crisis de la PAC 2017
De este importe, unos 54,86 millones (12,67% del total) corresponden a la devolución que se deberá realizar a los agricultores y ganaderos españoles, según el anexo del citado reglamento (ver texto en pdf adjunto).
Esta cantidad proviene de la reserva de crisis agrícola para el año presupuestario 2017, compuesta de dinero detraído de los pagos directos de los agricultores para este año. Las cantidades deducidas pueden ser reembolsadas a los agricultores por los Estados miembros a partir del 1 de diciembre de 2017.
A pesar de producirse una serie de situaciones críticas en el sector agrícola en el último año, los fondos disponibles de la reserva de crisis en 2017 no se utilizaron. En este ejercicio financiero, que concluyó el pasado 15 de octubre, se aprobaron medidas de apoyo adicionales para algunos sectores agrarios en dificultades, como frutas, hortalizas, productos lácteos y otros sectores ganaderos.
Los agricultores, preocupados por los daños causados debido a condiciones climáticas adversas en la pasada primavera fueron apoyados con un incremento de los anticipos de pagos directos del 50% al 70% para el nuevo ejercicio de 2018, que se inició el pasado 16 de octubre, así como por derogaciones de ciertas condiciones relacionadas con pagos ecológicos o “verdes.”
Según la Comisión Europea, el concepto de mecanismo de reserva y reembolso de crisis agrícolas se acordó en la reforma de la Política Agrícola Común de 2013 y se aplicó por primera vez en el ejercicio presupuestario de 2014.
La deducción solo se aplica a los pagos directos superiores a 2.000 por beneficiario. Todavía no se aplicó a Croacia en el ejercicio presupuestario de 2017, ya que los pagos directos aún no se habían introducido por completo, tras el ingreso de este país en 2013 a la Unión Europea.
