Unos 200 profesionales de las principales empresas de gran consumo asistieron ayer en Madrid al I Congreso de Desarrollo Sostenible organizado conjuntamente por AECOC (Asociación de Empresas de Gran Consumo que representa al 20% del PIB nacional) y FIAB (Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas), como máximos representantes en nuestro país de la cadena agroalimentaria.
La reducción de plásticos y el impulso a la movilidad sostenible, prioridades del sector agroalimentario
El Punto de Encuentro evidencia el importante papel que juega este sector en la transformación de nuestro sistema socioeconómico hacia un modelo de desarrollo sostenible y ha permitido conocer sus principales inquietudes en este ámbito y las acciones que están poniendo en marcha al respecto.
Así, a lo largo de la jornada se puso de manifiesto cuestiones como la necesidad de buscar una alternativa que permita reducir el consumo de envases plásticos en la cadena de valor agroalimentaria -dado el importante impacto medioambiental que generan-. En este sentido, consultados en sala, el 72% de los directivos asistentes al punto de encuentro han considerado que el reglamento europeo en materia de plásticos impactará en su negocio.
Por su parte, el CEO de Pescanova, presidente de Ecoembes y vicepresidente de AECOC, Ignacio González, ha indicado que la regulación en esta materia “fomenta la concienciación”, si bien la normativa va por detrás del consumidor, que ya es plenamente consciente de la necesidad de cuidar el planeta.
Para Ignacio González, la solución pasa por “seguir innovando hasta que el 100% de los materiales sean reciclables. Se puede eliminar mucho envase poniendo menos en la cadena de distribución y haciendo que el material vuelva al origen; es importante que la tecnología responda a ese reto para lograrlo”.
La estrategia a seguir en el uso del plástico ha centrado buena parte del debate. En opinión del director general de Mahou San Miguel, Alberto Rodríguez-Toquero, “la solución no es evidente ni fácil; hay que asegurar al máximo la reutilización mientras no tengamos soluciones alternativas”. Igualmente, Rodríguez-Toquero coincidió en la relevancia de invertir en innovación para paliar el impacto de la acción empresarial sobre el entorno. Tal como señaló, “la eficiencia en consumo requiere mucha inversión que genera empleo y riqueza”.
En esta línea se manifestó también Joanna Drake, directora general adjunta de Medioambiente de la Comisión Europea, quien señaló la importancia de aprovechar las nuevas oportunidades que brinda el desarrollo sostenible. Y es que, en su opinión, “el PIB es compatible con reducir emisiones de CO2”, pues el desarrollo sostenible significa “modernizar nuestra sociedad, crear nuevas formas de hacer negocios y consumir, competitividad y bienestar”.
En esta línea, apostó por fomentar un uso sostenible de nuestros recursos, entre otros motivos porque, en su opinión, situaciones como la del uso del plástico, son altamente insostenibles no solo en términos medioambientales sino también económicos.
El Congreso de Desarrollo Sostenible ha recordado otros retos para el sector agroalimentario en materia de sostenibilidad. La movilidad sostenible se ha posicionado de manera destacada en este sentido, aunque no ha sido el único aspecto abordado. Tal como manifestó Silvio Elías, fundador de la cadena de supermercados ecológicos Veritas, “se pueden hacer cadenas de suministro más cortas y también se pueden utilizar fuentes de energía renovables, poner iluminación led en las tiendas, controlar las emisiones del gas refrigerante de las neveras…”
Y es que, consciente del impacto que su actividad genera a nivel económico, social y medioambiental, el sector agroalimentario lleva años trabajando como motor de cambio para hacer realidad un nuevo modelo basado en la economía circular, que responda a los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados en la Agenda 2030 definida por la Comisión Europea.
Sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible y su grado de cumplimiento en nuestro país se habló detalladamente a lo largo de la jornada. En opinión del CEO de Pescanova, “hay que felicitarse por su existencia. Gracias a ellos tenemos agenda y objetivos comunes y nos podemos medir de acuerdo a eso. Hemos conseguido hablar el mismo lenguaje”.
Así se manifestó también Cristina Narbona, miembro del Consejo Asesor de la Red Española para el Desarrollo Sostenible, quien apuntó la importancia de “contar con herramientas de medición y seguimiento que permitan realizar una rendición de cuentas sistemática”.
En este ámbito, Silvio Elías apuntó que “los objetivos son necesarios, si bien es importante contar con palancas en cada eslabón de la cadena para poder cumplirlos”. Así, hizo un llamamiento a la alineación de objetivos, empresas, gobiernos y ciudadanos en este ámbito.
A modo de ejemplo, el fundador de Veritas apuntó la conveniencia de apostar por la agricultura regenerativa para paliar los efectos de la pérdida de tierra cultivable y su desertificación, tal como están haciendo otros países como Australia.
Bajo el lema “Hacia un futuro sostenible”, el congreso contó también con la participación de Ignacio Gavilán, director de Environmental Sustainability de The Consumer Goods Forum, una organización que busca consolidar la posición de la industria de bienes de consumo como líder en la lucha contra el cambio climático y la reducción de residuos; Lucy Shae, CEO de la consultora en sostenibilidad y agencia creativa internacional Futerra; y del presidente de la Fundación Dinero y Conciencia y miembro del consejo asesor de Triodos Bank, Joan A. Melé, referente global de la banca ética.