El Consejo Oleícola Internacional estima que para el periodo 2019/2020 el consumo de aceites de oliva crezca un 6,4% en todo el mundo, hasta superar los tres millones de toneladas. El mejor ejemplo de esa penetración está Asia que, de hecho, es la zona del mundo en la que el consumo crece con mayor fuerza. Así lo confirman los datos recogidos por las Aduanas de Japón y China en 2019. En ese periodo, ambos países importaron 121.328 toneladas de aceites de oliva, la mayor parte de ellas con origen en la UE.
Asia se consolida como destino prioritario de los aceites de oliva
En este contexto destaca Japón, el primer consumidor de aceites de oliva de Asia, que en 2019 adquirió 70.908 toneladas, un 29,08% más que en 2018. En concreto, España exportó a Japón, 45.471 toneladas, un 35,77% más que en 2018. Esto situó a los aceites con origen España con una cuota del 64,13% sobre el total de las importaciones consolidando un liderazgo del que disfrutan desde el año 2014.
El caso de China es aún más espectacular, ya que se trata de un mercado que apenas hace dos décadas consumía poco más de 200 toneladas de aceites de oliva al año. En 2019 importó nada menos que 50.420 toneladas, un 39,71% más que un año antes. Aquí, de nuevo, el dominio de los aceites de Europa es total, con España a la cabeza. De hecho, alcanzó una cuota, sobre el total de importaciones, del 86,98%, con 43.855 toneladas. Casi nueve de cada diez litros de aceites de oliva tienen origen nuestro país. En total, las ventas en ambos mercados supusieron un valor de unos 285 millones de euros.
Los últimos datos disponibles de Taiwán, referidos al periodo enero-septiembre de 2019, invitan también al optimismo. Los aceites europeos acaparan más del 96% de ese mercado. Por su parte, las importaciones de Aceites de Oliva de España crecieron en ese periodo un 26,52%, hasta situarse en las 2.091 toneladas.
Estas espectaculares cifras avalan la importante apuesta que Aceites de Oliva de España y la Unión Europea ha realizado por los mercados asiáticos, que se ha concretado en una ambiciosa campaña de promoción y lanzada a principios el año 2018 y que desde el 1 de febrero encara su tercer ejercicio en Japón, China y Taiwán.
La campaña Olive Oil World Tour ha logrado en estos dos primeros años más de 7.000 millones de impactos con acciones de gran notoriedad como la presencia con amplias de campañas publicidad en los aeropuertos mayor tráfico de la zona como el Tokio, Pekín, Hong Kong o Shanghai.
Sin olvidar otras de enorme impacto como la realizada en 2019 en el centro de Tokio, en el cruce de Shibuya, con la proyección en cinco pantallas gigantes de las creatividades e campaña. A eso hay que sumar los eventos realizados para la prensa de ambos países, que han reportado una difusión a la campaña europea. Todo ello complementado por la comunicación online.