La crisis da la vuelta al campo
La situación económica de los últimos años ha sido uno de los factores que más ha influido para que se vuelva a mirar hacia el campo para emprender una nueva forma de vida. Así lo constata LORRA S. COOP., la entidad colaboradora del Departamento de Agricultura de la Diputación Foral de Bizkaia, encargada de tutorizar los nuevos proyectos que se ponen en marcha en el primer sector.
Enmarcado en el programa Gaztenek, que impulsan las diputaciones de los tres territorios y el Gobierno Vasco, LORRA lleva 10 años haciendo el seguimiento a los emprendedores que se instalan en Bizkaia. Los técnicos de la entidad acompañan de cerca a estas personas desde la puesta en marcha de sus negocios y a lo largo de los tres primeros ejercicios de actividad. Conocen de primera mano sus perfiles y sus aspiraciones, así como las dificultades y los retos que se encuentran en el camino.
‘Cada año crece el número de personas que deciden vincular su futuro al desarrollo de ideas de negocio en el primer sector y nuestra misión es acompañarles para adentrarse con éxito en este nuevo rumbo’ señala Martín Uriarte, gerente de Lorra S.Coop.
Desde el inicio de este programa en 2005 en Bizkaia, van creciendo las incorporaciones a este sector. En esta década se han instalado 245 nuevos proyectos, incluyendo los 30 aprobados en este 2015. De todos ellos, no llegan a 10 los proyectos que han cesado la actividad o que no han tenido continuidad una vez instalados, bien porque no han funcionado o porque no se ha podido o querido seguir adelante. Desde los 17 proyectos aprobados en el primer año, la cifra ha ido oscilando hasta llegar a una treintena de nuevas propuestas anuales a partir del 2011.
En cuanto al perfil de las personas emprendedoras, de los 245 proyectos el 65% están liderados por hombres y el 35% por mujeres. La inmensa mayoría son negocios nuevos y menos del 3% corresponden al relevo generacional de hijos que se incorporan a explotaciones ya existentes, en un sector cuyos profesionales tiene una media de edad superior a los 60 años. Hablamos de emprendedores jóvenes, entre 25-30 años, que han estado anteriormente trabajando y quieren asentarse. Tienen diversidad de formación e intereses; hay quienes se han formado para suceder a sus padres y quienes, una vez realizados sus estudios, deciden reorientar su vida debido a la falta de trabajo.
Según el Gerente de Lorra ‘La situación actual ha sido un importante detonante de este renovado interés por el primer sector, tanto por parte de jóvenes como de personas de más de 40 años tienen que replantearse su vida laboral.’
En las actividades productivas, destaca la gran diversidad de los proyectos emprendidos: explotación de horticultura bajo invernadero, cría de ganado -ovino y caprino de leche ligados a queserías-, huevos y gallinas camperas, apicultura, etc. Despuntan claramente como nuevas tendencias el ámbito de la agricultura ecológica, que representa el 21,6% del total de negocios instalados en esta década. A ello se dedicarán en 11 proyectos de los 30 aprobados en el 2015. También destaca como novedad la helicicultura (cría de caracoles), que el año pasado contó con dos instalaciones nuevas en Bizkaia y este año con 4 más.
En el futuro próximo se dibuja un importante cambio que previsiblemente incrementará la petición de nuevas incorporaciones, ya que se incluirá la posibilidad de incorporar emprendedores de mas de 41 años. Esta opción, hasta hora no regulada y que frenaba los deseos de mucha gente por incorporarse a la actividad agraria, se incluirá en el próximo PDRS (Plan de Desarrollo Rural Sostenible), que es el marco que posibilita el servicio de emprendizaje realizado por LORRA, así como las ayudas financieras a los emprendedores.
LORRA es una cooperativa sin ánimo de lucro que agrupa a asociaciones de productores agrícolas y ganaderos, cooperativas agrarias y entidades colaboradoras. En la actualidad reúne a 30 Asociaciones y 7 Cooperativas, sumando en su proyecto a más de 4.000 productores agroalimentarios de Bizkaia.