La falta de disponibilidad de herramientas destinadas a la sanidad vegetal del cerezo ha llevado al sector fitosanitario representado en Aepla a formar parte del Grupo Operativo Fitoscerezo. Su objetivo es definir, diseñar y desarrollar un programa de control integrado de plagas y malas hierbas que racionalice el uso de los productos fitosanitarios e incremente su disponibilidad en este cultivo.
Aepla alerta de la falta de soluciones fitosanitarias que protejan el cultivo del cerezo
Para ello se pretende identificar las materias activas candidatas a ser incluidas en el programa de control integrado de plagas, enfermedades y malas hierbas, fomentar las buenas prácticas fitosanitarias y verificar la existencia de límites máximos de residuos establecidos para dichas materias activas.
El grupo ha planificado acciones de divulgación en diferentes comunidades autónomas con el objetivo de presentar su plan de trabajo a los responsables de los Servicios de Sanidad Vegetal y representantes de productores y distribuidores de las mismas.
Pretende así aportar conocimiento para el desarrollo de los programas de gestión integrada establecidos en el plan de acción nacional y recabar al mismo tiempo información que mejore la situación del cultivo en estas zonas.
Hasta ahora el grupo, representando por miembros de Fepex y Aepla ha visitado y mantenido reuniones con los representantes de Cataluña, Aragón, Murcia, Andalucía y Comunidad Valenciana, donde la cereza juega un papel significativo dentro la producción hortofrutícola.
Las cifras de exportación hablan por sí solas. Según datos de la Dirección General de Aduanas, procesados por Fepex, hasta el mes de agosto de este año, fueron 28.418 las toneladas de cerezas exportadas, lo que supone un 24% más que en el mismo periodo de 2016. Este datos se traduce en una cifra de 72,6 millones de euros, un 10% más que en el ejercicio anterior.
Para Carlos Palomar, director general de la patronal de fabricantes de productos fitosanitarios, «la falta de disponibilidad de soluciones destinadas a cultivos menores, como en el caso del cerezo, es un problema que nos preocupa seriamente. Por esa razón, Aepla participará en todas aquellas iniciativas que se pongan en marcha para mejorar su situación, aportando nuestro conocimiento y dedicación con el objetivo de garantizar a los agricultores las necesarias herramientas que garanticen la protección de sus cultivos y por extensión la rentabilidad de sus producciones. Fitoscerezo es un excelente ejemplo de este compromiso».
