Las aplicaciones de Juvinal10 EC y NoFly, ambos productos de Kenogard, alternadas en función del momento de evolución de la plaga, de las sueltas de auxiliares y de las condiciones ambientales, suponen una adecuada elección para el control de moscas blancas en determinados cultivos hortícolas, con el objetivo de conseguir una estrategia sostenible, un adecuado manejo de productos fitosanitarios respetuosos con las sueltas e implantación de artrópodos auxiliares, y un menor nivel de residuos en nuestra cosecha.
Juvinal 10 EC y NoFly, la estrategia de Kenogard para el control de mosca blanca en hortícolas
Las moscas blancas (Bemisia tabaci, Trialeurodes vaporiarum) son plagas polífagas clave en muchos cultivos intensivos de invernadero, principalmente en solanáceas y cucurbitáceas. Los adultos se localizan mayoritariamente en las partes más jóvenes de la planta (brotaciones), donde depositarán sus huevos en el envés de las hojas. Las ninfas, cuyo primer estado (L1) es móvil, se fijarán a la hoja y allí evolucionarán (L2-L3-L4) hasta pupa y adulto, completando diversas generaciones. Su desarrollo estará condicionado por las temperaturas ambientales, alcanzando sus óptimos alrededor de 30°C.
Las moscas blancas producen diversos daños sobre el cultivo: de tipo directo, debido a la succión de savia y debilitamiento de la planta, y también por la excreción de melazas, sobre las que posteriormente se desarrollan hongos de tipo negrilla, con el consecuente destrío comercial. Pero los daños más preocupantes son los de tipo indirecto: la transmisión de virosis en los cultivos, que pueden comprometer seriamente su desarrollo y producción. Por todo ello, debemos controlar las poblaciones de moscas blancas hasta su mínima presencia.
Desde Kenogard recomiendan desarrollar una estrategia de control de plagas en la que se combinen todas las herramientas posibles: medidas culturales, productos fitosanitarios, productos bioracionales y artrópodos auxiliares. Ello nos ayudará a conseguir conjuntamente diversos objetivos como son la sanidad del cultivo, la gestión de resistencias y la menor presencia posible de residuos fitosanitarios.
Juvinal 10 EC (pyriproxyfen 10% EC) es un insecticida específico para el control de moscas blancas en los principales cultivos hortícolas. Está autorizado su uso en tomate, berenjena, pimiento, cucurbitáceas de piel comestible y semilleros de hortícolas. Es un regulador del crecimiento, que actúa sobre huevos y larvas, y que presenta un perfil muy respetuoso sobre los principales artrópodos auxiliares utilizados en nuestras condiciones de cultivo (Amblyseius swirskii, Nesidiocoris tenuis, Orius laevigatus, etc.). Dosis: 50-75 ml/hl, con un PS de 3 días.
Por su parte, NoFly (Isaria (Paecilomyces) fumosorosea cepa FE9901 18%) es un novedoso insecticida bioracional a base de esporas del hongo entomopatógeno. Actúa sobre todos los estadios del ciclo de las distintas especies de moscas blancas, principalmente sobre huevos y larvas. Las esporas atraviesan la cutícula de los insectos objetivo, desarrollando las hifas que penetran y proliferan en el interior, formando un micelio (48-72 h) que destruye sus tejidos.
Las altas temperaturas y la muy baja humedad ambiental son factores adversos a la acción de las esporas, por lo que se recomienda la aplicación de NoFly a últimas horas de la tarde y, cuando sea posible, tras un riego previo. Es fundamental asegurar una cobertura correcta de la superficie foliar, utilizando un volumen de caldo adecuado al estado del cultivo. Se pueden realizar hasta 4 aplicaciones por campaña, con intervalos de 5-7 días. NoFly tiene usos autorizados en invernadero para tomate, pimiento, melón y calabacín, a 200-250 g/hl, y no procede plazo de seguridad. Su perfil es totalmente respetuoso con los auxiliares.