Syngenta ha anunciado que dedicará 1.795 millones de euros durante los próximos cinco años para ayudar a los agricultores a prepararse y abordar las crecientes amenazas derivadas del cambio climático. La inversión incluye un nuevo objetivo de sostenibilidad de Syngenta que consiste en desarrollar e introducir en el sector dos innovaciones tecnológicas al año, con el fin de reducir la contribución de la agricultura a los efectos del cambio climático.
Syngenta dedicará 1.795 millones de euros a ayudar a los agricultores a enfrentarse al cambio climático
Erik Fyrwald, CEO de Syngenta, también anunció que la inversión en investigación y desarrollo en programs de agricultura sostenible se complementará con una iniciativa para reducir la intensidad de las emisiones de carbono en las operaciones de la empresa en al menos un 50% para 2030 con el fin de respaldar las ambiciosas metas del Acuerdo de París sobre cambio climático. El compromiso de Syngenta está ratificado y avalado por la Iniciativa de objetivos basados en la ciencia (Science Based Targets, SBTi).
«Ahora, la agricultura está al frente de las iniciativas globales que tienen por objetivo abordar el cambio climático», comenta Fyrwald. «Syngenta está comprometida en acelerar nuestra innovación a fin de hallar mejores soluciones y cada vez más seguras para abordar el desafío compartido que implica el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad».
Los 1.795 millones de euros se canalizarán en programas de tecnologías innovadorasque posibilitarán un cambio gradual en la sostenibilidad de la agricultura, tales como el uso adecuado de la tierra, la salud del suelo y el control integrado de plagas.
A través de su colaboración de varios años con The Nature Conservancy, Syngenta está desarrollando estrategias para identificar y evaluar innovaciones y tecnologías que puedan beneficiar a los agricultores y contribuir a generar resultados positivos en el medio ambiente. La colaboración se fundamenta en iniciativas para promover la salud del suelo, la eficiencia de los recursos y la protección del hábitat y biodiversidad en las principales regiones agrícolas del mundo.