Las importaciones de cereales de países terceros hasta principios de este mes de marzo de la actual campaña 2022/23 por nuestro país se elevaron ya a 9,98 millones de toneladas, que representan un 36,6% de todo lo importado por la Unión Europea (27,3 Mt) hasta esa fecha.
Este volumen supone un 83,4% más que lo importado durante el mismo periodo de la campaña anterior 2021/22, cuando se habían importado 5,44 Mt, y un 70,6% más que la media (5,85 Mt) de lo importado en el último lustro, según datos avanzados por la Comisión Europea, analizados por los Servicios Técnicos de Cooperativas Agro-alimentarias de España.
Este volumen supone un 83,4% más que lo importado durante el mismo periodo de la campaña anterior 2021/22, cuando se habían importado 5,44 Mt, y un 70,6% más que la media (5,85 Mt) de lo importado en el último lustro, según datos avanzados por la Comisión Europea, analizados por los Servicios Técnicos de Cooperativas Agro-alimentarias de España.
Incluso a menos de cuatro meses vista de que concluya la campaña 2022/23 (30 de junio), el volumen ya importado supera en un 41,6% y en 2,92 millones de toneladas a todo el cereal importado (7,06 Mt) a lo largo de la campaña anterior 2021/22, así como de las cantidades de las cinco precedentes (2016/17 a 2020/21).
Del volumen total importado con destino a nuestro país, un 65,7% y 6,56 Mt fue de maíz grano, que representó, a su vez, un 35,3% de todo lo que llegó (casi 18,6 Mt) de este cereal a la UE-27; cerca de 2,42 Mt fueron de trigo blando, un 24,2% de todo el grano importado por España y un 40,3% de todo lo importado con destino al mercado comunitario.
Estas son las principales cantidades importadas, pero además, nuestro país importó en poco más de ocho primeros meses de la campaña 2022/23 otras 807.447 t de cebada (un 8,09% del total y un 50,6% de toda la UE); 86.650 t de trigo duro (0,87% y un 14,1% de la UE-27); 76.738 t de centeno (0,77% del total y 76,8% de toda la UE); 31.614 t de avena (0,32% y 23,3%, respectivamente), así como cantidades menores de sorgo (4.948 t); sémola de trigo duro (1.168 t); malta (662 t), y harina de trigo blando (230 t).
Por detrás de España, el siguiente país importador de cereales de países terceros es Países Bajos, con 2,61 Mt (9,6% del total de la UE-27), parte de los cuales luego reexporta hacia otros mercados europeos o de terceros, seguido de dos grandes productores, caso de Polonia (2,03 Mt, 7,4%) y Rumania (2 Mt, 7,35%), por delante de Portugal (1,83 Mt, 6,7%), parte de lo cual termina entrando también a nuestro país.
A nivel comunitario, los principales orígenes de los distintos cereales son en trigo blando, Ucrania, con 3,92 Mt (65,4%), con un alza del 1.096% sobre la campaña anterior (326.009 t); Reino Unido, con 1,01 Mt (16,9%), y un incremento del 227% sobre un año antes (309.337 t); Canadá, con 249.170 t (4,2% y +115%); Rusia, con 244.441 t (4,1% y -35%) y Serbia, con 196.531 t (3,3% y -35%).
En maíz, el principal abastecedor de la UE en los ocho primeros meses de campaña es también Ucrania, con 9,33 Mt (50,25% del total), con un aumento del 47,7% sobre un año antes (6,32 Mt), seguido de Brasil, con 7,64 Mt (41,14%) y un aumento del 130,82% respecto a 2021/22 (3,31 Mt); Canadá, con 618.388 t (3,3% y +4,77%); Serbia, con 348.847 t (1,88% y -42,5%), y Rusia, con 184.666 t (0,99% y -37,2%).
En cebada, Reino Unido es el principal abastecedor de la UE-27, con 791.315 t (49,6%), un 38% más que en 2021/22, seguido de cerca por Ucrania, con 749.633 t (47% y un aumento del 1.266% sobre un año antes (54.874 t); Moldavia, con 33.566 t (2,1%), Serbia, con 12.098 t (0,76%) y Macedonia del Norte, con 8.711 toneladas.
En el resto de materias primas cerealistas, el principal proveedor tercero de la UE de trigo duro es Canadá, con 407.405 t (66,4% del total y un descenso del 26%), seguido de Australia, con 54.790 t (-71%) y Ucrania, con 51.118 t (+8.984%); en harina de trigo es Reino Unido, con 139.380 t, seguido de Ucrania (55.790 t); en malta, también Reino Unido, con 11.107 t, seguido de Ucrania (8.190 t); en sémola de trigo duro, Egipto, con 1.098 t; en avena, Reino Unido, con 133.500 t; en centeno, Rusia, con 58.195 t, por delante de Reino Unido, con 26.347 t y, por último, en sorgo, Ucrania, con 17.049 t, un 82,9% del total y un 43,4% más que en 2021/22.
En cuanto a las exportaciones, la UE-27 exportó a terceros países en este periodo 29,84 Mt de cereales, de los cuales un 70,44% fueron de trigo blando, con 21 Mt; un 13,6% de cebada, con algo más de 4 Mt; un 7,24%, malta, con 2,16 Mt; un 4,9%, maíz, con 1,46 Mt; un 1,7%, trigo duro, con 527.717 toneladas, etc.
El principal país exportador comunitario con diferencia fue Francia, con un 37,14% del total y cerca de 11,1 millones de toneladas, seguido de lejos por Rumania, con 4,42 Mt; Alemania, con casi 4,1 Mt; Polonia, con algo más de 2 millones, etcétera.
A la cola se situó España, que exportó en los ocho primeros meses de campaña apenas 106.922 toneladas, de las cuales 44.453 t fueron de maíz; 20.385 t de malta; 17.906 t de sémola de trigo duro; 3.347 t de harina de trigo blando; 450 t de avena; 222 t de cebada; 57 t de trigo blando y 8 t de centeno.
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