Los ministros de Agricultura de España, Luis Planas, y de Francia, Julien Denormandie, han celebrado hoy una reunión bilateral por videoconferencia en la que han analizado el estado de las negociaciones de la PAC. Este encuentro se ha enmarcado en la XXVI Cumbre bilateral franco-española, centrada en la apuesta por el multilateralismo y en fortalecer los lazos de unión entre ambos países, tal y como han dejado de manifiesto los presidentes Pedro Sánchez y Emmanuel Macron, que se han reunido presencialmente en la ciudad francesa de Montauban.
España y Francia abogan por garantizar la viabilidad de las explotaciones en la nueva PAC
Ambos ministros han compartido la mayor ambición ambiental de la PAC y han remarcado que debe garantizar la viabilidad de las explotaciones agrarias, según han plasmado en la declaración conjunta, en la que han reflejado que continuarán de la mano en aspectos clave de la reforma que entra en su fase decisiva para lograr un acuerdo entre Consejo, Parlamento y Comisión.
Los ministros Planas y Denormandie han señalado que la nueva PAC 2021-2027, que se empezará a aplicar a partir del 1 de enero de 2023, debe suponer una simplificación de los trámites administrativos. Respecto a los ecoesquemas, deben contar con flexibilidad en su aplicación.
También han puesto en valor, sobre todo en esta crisis sanitaria, el papel de los instrumentos de gestión de mercados y de crisis recogidos en la organización común de mercados agrarios, instrumentos que en la próxima PAC deben ser más efectivos. En particular, han apoyado el mantenimiento del sistema de autorizaciones de plantación de viñedo más allá del 2030.
La estrategia «De la Granja a la Mesa” va a suponer un importante despliegue legislativo. Planas y Denormandie adoptarán un enfoque común y piden una armonización rápida en materia del etiquetado en origen, una revisión del paquete legislativo de productos fitosanitarios y la adopción de una nueva estrategia en favor del bienestar animal.
En lo que se refiere a la colaboración en materia de sanidad animal y vegetal, España y Francia han apostado por seguir con la política de colaboración de las últimas décadas, en el marco del “Encuentro hispano-francés-andorrano de sanidad animal y vegetal”, cuyo 60º aniversario está previsto en el otoño de 2021 en Toulouse, tras la anulación en 2020 en el contexto de la crisis sanitaria, y que contará con la presencia de los dos ministros.
Además, han mostrado su satisfacción por la suspensión temporal de los aranceles estadounidenses a productos europeos, en particular agroalimentarios españoles y franceses. También han constatado el buen trabajo desarrollado en los comités mixtos de ambos países en materia agraria, como el del sector hortofrutícola y el del vino, que ha incorporado también a Italia y Portugal.
TRANSICIÓN ECOLÓGICA
Por su parte, la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y
el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha mantenido un encuentro con la ministra francesa de Transición Ecológica, Barbara Pompili, del que ha salido una declaración conjunta en la que ambos países se comprometen a cooperar para reafirmar el liderazgo climático de la Unión Europea, avanzar hacia la neutralidad climática en 2050, impulsar una transición energética verde, equitativa y ambiciosa y renovar la ambición internacional en favor de la biodiversidad, la prevención de la desertificación y la conservación de los océanos.
En la declaración Francia y España subrayan las muchas prioridades que
comparten, como la implementación del Pacto Verde Europeo, para el éxito de la transición ecológica y climática que la Unión Europea se ha comprometido a acelerar.
En el documento se subrayan los vínculos intrínsecos entre el cambio climático, la
pérdida de biodiversidad, el avance de la desertificación y sus consecuencias en la salud humana. A este respecto, Francia y España recuerdan su compromiso con la neutralidad climática para 2050 y planean recordar en cada foro internacional la necesidad de aumentar la ambición climática en el marco del Acuerdo de París.
Asimismo, la ambición medioambiental, la importancia de la lucha contra la deforestación importada, los principios de la economía circular y la reducción de la huella de carbono de nuestras economías son prioridades compartidas por ambos países.