García Tejerina: “la transición hacia una economía baja en carbono es un camino sin retorno”
La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, subrayó el amplio respaldo internacional al Acuerdo de París para luchar contra el cambio climático, que ya fue ratificado por 125 países, entre ellos España. Según recalcó, “estamos ante un movimiento internacional imparable a favor de una economía baja en carbono y respetuosa con el medio ambiente”.
Isabel García Tejerina inauguró este lunes 16 de enero la jornada “La Cumbre del Clima de Marrakech: un análisis de resultados y sus implicaciones para España”, organizada por el Club Español de la Energía.
En su intervención, García Tejerina recordó cómo en la Cumbre de París se alcanzó un resultado ambicioso y universal, al lograrse el compromiso de todos los países para poner en marcha planes con los que hacer frente al reto del cambio climático. De hecho, añadió, “en menos de un año este acuerdo ha entrado en vigor, lo que representa “un hito en el marco de las relaciones internacionales”.
En este contexto, García Tejerina valoró positivamente también los resultados de la Cumbre de Marrakech (COP22), que sirvió para implementar el Acuerdo de París y visualizar todas las soluciones reales que los diferentes agentes están llevando a cabo en este terreno.
A este respecto, la ministra detalló los resultados conseguidos en la COP22. En concreto, el cierre de un programa de trabajo y de un calendario “claro y ambicioso” para tener acordadas en 2018 las reglas que permitan la puesta en marcha del Acuerdo de París.
Asimismo, en Marrakech se reafirmó el cumplimiento del objetivo de movilización de 10.000 millones de dólares para la lucha contra el cambio climático en los países en desarrollo.
García Tejerina también hizo referencia a la adopción de la Declaración política de Marrakech, que recoge la determinación de la comunidad internacional para mitigar y adaptarse al cambio climático.
Por otra parte, la ministra destacó la movilización “sin precedentes” de toda la sociedad civil, con la puesta en marcha de un gran número de actuaciones. Entre ellas, el lanzamiento de la “Alianza de Marrakech por la Acción Climática Global”, cuyo objetivo es canalizar todas las iniciativas de los agentes gubernamentales y no gubernamentales para la consecución de los compromisos acordados en París.
Para Tejerina, la Cumbre de Marrakech demostró que la comunidad internacional sigue adelante con la agenda climática, y puso de manifiesto que la transición hacia una economía baja en carbono “es un camino de no retorno”.
Apoyo español
En este contexto, García Tejerina puso en valor el apoyo decidido de España en las negociaciones que culminaron con estos acuerdos, con la presencia del Presidente y dos ministros del Gobierno, y destacó también la participación española en los diversos encuentros relacionados con áreas de gran importancia para la lucha contra el cambio climático.
Entre ellos, la ministra mencionó el Plan de Acción de la Estrategia 5+5, en materia de agua; la asistencia a la primera reunión del Consorcio de la Iniciativa 4X1000, para contribuir a fijar carbono de la atmósfera en los suelos y la biomasa; y la firma de una declaración política, junto con Alemania, Marruecos, Francia y Portugal, sobre intercambio energético.
García Tejerina aseguró que esta declaración complementa los esfuerzos de España para desarrollar nuevas interconexiones con Europa, a través de Francia y, en este marco, afirmó que las interconexiones son clave para favorecer la integración de más generación renovable, mejorar la seguridad de suministro, fomentar la competitividad y garantizar la sostenibilidad ambiental.
Contribución ambiciosa
Por otra parte, García Tejerina calificó de determinante el papel de España y de la UE en la negociación internacional, con una de las contribuciones más ambiciosas al Acuerdo de París. En particular, el objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de la UE es de, al menos, un 40% de reducciones domésticas, en 2030, con respecto a 1990. En el caso de España, el objetivo se traduce en una reducción del 26% de las emisiones de gases de efecto invernadero en los sectores difusos, en 2030.
En este sentido, la ministra reiteró el compromiso del Gobierno de seguir trabajando para luchar contra este “importante desafío”. Y, por eso, en esta legislatura se impulsará una Ley de Cambio Climático y Transición Energética, en el que se contará con la participación de todos los sectores a través de un proceso abierto y participativo. Según explicó, se trata de una ley que establecerá el marco necesario para avanzar hacia modelos bajos en carbono en los principales sectores productivos.
Por último, la ministra se mostró convencida de que la innovación y las mejoras tecnológicas nos permitirán estar a la altura de este reto.