El Gobierno urge a las Cortes Generales a ratificar el Acuerdo de París sobre Cambio Climático
El Consejo de Ministros acordó este viernes 11 de noviembre remitir a las Cortes Generales del Acuerdo de París sobre Cambio Climático (COP 21), adoptado en la capital francesa el año pasado, y solicitar su ratificación por el procedimiento de urgencia.
El 12 de diciembre de 2015, la XXI Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, celebrada en la capital francesa, alcanzó el Acuerdo de París, un hito histórico en la lucha contra el cambio climático y un éxito de la comunidad internacional porque, por primera vez, consigue una participación universal de todos los países.
Recoge 189 Planes Nacionales de lucha contra el cambio climático, que cubren el 97% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Hasta ahora, el Acuerdo de París ha sido firmado por 191 Estados u Organizaciones, de las cuales 105 han depositado sus instrumentos de ratificación, aceptación, adhesión o aprobación.
De esta forma, al haberse cumplido con creces los requisitos establecidos (la ratificación de al menos 55 partes del Acuerdo, que sumen un total de 55% de las emisiones globales), el Acuerdo entró en vigor el pasado 4 de noviembre.
La Unión Europea depositó hace un mes su instrumento de ratificación, lo que permitió su entrada en vigor. España apoyó firmemente el acuerdo del Consejo de la UE para que se llevara a cabo de forma temprana, sin necesidad de que fuera ratificado entonces por todos los estados miembros.
Objetivos ambiciosos
El texto del Acuerdo, compuesto por 29 artículos, tiene por objetivo lograr que el aumento de la temperatura media global del planeta quede muy por debajo de los 2ºC respecto a los niveles preindustriales, e intenta lograr además esfuerzos adicionales que hagan posible que el calentamiento global no supere los 1,5ºC.
Recoge la mayor ambición posible para reducir los riesgos y los impactos del cambio climático en el mundo e incluye los elementos necesarios para alcanzar dicho objetivo.
Reconoce también la importancia de incrementar los compromisos con objetivos cada vez más ambiciosos, para lo cual establece un ciclo de revisión mediante el cual cada cinco años se deberá hacer balance del grado de implementación respecto al objetivo de los 2ºC, incluyendo los compromisos de reducción de emisiones, el estado de las acciones de adaptación y la situación de los medios de implementación, en especial la financiación.
En este sentido, todos los países deberán preparar, comunicar y mantener sus contribuciones establecidas a nivel nacional para luchar contra el cambio climático y adoptarán medidas de mitigación internas con el fin de alcanzar los objetivos de esas contribuciones.
Otro aspecto importante del Acuerdo es que pone en valor la importancia de adaptarse a los efectos adversos del cambio climático, estableciendo un objetivo mundial cualitativo que consiste en aumentar la capacidad de adaptación a las pérdidas y daños ya ocasionados por el cambio climático.
Asimismo, fortalece el marco de cooperación global, a fin de que los países en desarrollo más vulnerables al cambio climático puedan afrontar mejor las pérdidas y daños derivados de éste.
El Mecanismo financiero de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático será el mismo del Acuerdo de París. Para alcanzar los objetivos recogidos en este Acuerdo, en materia de financiación, entre otros aspectos, la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático reconoce el actual compromiso de los países desarrollados de movilizar 100.000 millones de dólares anuales, a partir del año 2020, a través de fuentes públicas y privadas, compromiso que se revisará al alza antes de 2025.
Además, aunque se reconoce el liderazgo de los países desarrollados a la hora de movilizar financiación climática, por primera vez se anima a los países en desarrollo a que participen, aunque de manera voluntaria, en la financiación de estas actuaciones.
El marco de transparencia del Acuerdo establece que todos los países proporcionarán información sobre emisiones y absorciones de gases de efecto invernadero y sobre el apoyo en forma de financiación, transferencia de tecnología etc., ya sea proporcionada o recibida. Se contempla, asimismo, un proceso de revisión cada 5 años de la información proporcionada por los países Parte en cuanto a la implementación del Acuerdo, que será de utilidad para identificar áreas susceptibles de ser mejoradas.
Para facilitar el cumplimiento de los compromisos, se establece un Comité de naturaleza facilitadora y no contenciosa ni sancionadora, cuya misión será la de favorecer la aplicación del Acuerdo por todos los países parte del mismo.
Compromiso pleno
La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, subrayó la importancia de la remisión a las Cortes Generales del Acuerdo de París sobre Cambio Climático para su ratificación por el procedimiento de urgencia, aprobado este viernes 11 de noviembre por el Consejo de Ministros, lo que demuestra “el pleno compromiso del Gobierno de España en la lucha contra el cambio climático”.
García Tejerina, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, destacó que el Gobierno en funciones ya había efectuado toda la tramitación interna previa necesaria y se había avanzado todo lo posible desde el punto de vista administrativo para impulsar el proceso de ratificación nacional de este Acuerdo tan pronto como hubiera un Gobierno con capacidad para hacerlo. “Estaba todo listo y el Consejo de Ministros ha dado hoy luz verde para recabar la autorización de las Cortes con la mayor agilidad posible”, añadió.
La ministra resaltó que la lucha contra el cambio climático “es uno de los objetivos prioritarios de nuestra política medioambiental; hemos trabajado mucho para ganar liderazgo en este ámbito, poniendo en marcha una política efectiva de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y de adaptación a los efectos del calentamiento, y, por primera vez, impulsamos actuaciones de mitigación que generan actividad económica baja en carbono y empleo de calidad, lo que permite cumplir con nuestras obligaciones internacionales”.
En este sentido, García Tejerina recordó que hoy España cumple el Protocolo de Kioto para el primer periodo 2008-2012, así como que nuestro país “ha puesto en marcha muchas iniciativas de reducción de emisiones que nos permitirán cumplir también los compromisos del siguiente periodo, hasta 2020”.
Ahora, además, con la ratificación del Acuerdo de París, “España va a tener plena capacidad para trabajar activamente, en el marco de la Conferencia de las Partes del Acuerdo, en concretar medidas para alcanzar los objetivos a partir de 2020”, precisó, haciendo hincapié en que “con la ratificación nacional del Acuerdo, España tendrá plena capacidad de participación en la toma de decisiones”.
Puesta en valor
La ministra puso en valor “el enorme éxito” que supuso lograr el Acuerdo de París: “196 países sellaron en diciembre de 2015 un acuerdo ambicioso y equilibrado, vinculante, duradero y revisable. Y aunque su entrada en vigor se planificaba para 2018, se produjo hace ahora una semana, el pasado viernes 4 de noviembre, antes de que se haya cumplido un año desde su adopción”.
Todo ello, a juicio de la ministra, significa que estamos viviendo “un momento extraordinario en la lucha contra el cambio climático, con un cambio radical en el alcance del compromiso. Y ello, gracias a un impulso sin precedentes para hacer frente al mayor desafío global que tenemos”, gracias al impulso que García Tejerina atribuyó, “en buena medida al liderazgo de la Unión Europea”.
Así, la ministra afirmó que desde la UE hemos puesto el objetivo más ambicioso en la mesa de negociación internacional. La UE, además, redujo sus emisiones en un 22% a la vez que crecía un 50% y, por otro lado, es el mayor donante de financiación climática.
Isabel García Tejerina señaló que “a partir de ahora es el momento de definir las reglas de funcionamiento para materializar el Acuerdo de París”.
Cumbre de Marrakech (COP 22)
Por ello, García Tejerina fijó la importancia de la Cumbre del Clima (COP 22) que ha arrancado esta última semana en Marrakech (Marruecos) en su segmento técnico, y que esta semana celebrará su tramo de alto nivel.
“España participará activamente y al máximo nivel”, subrayó la ministra, que avanzó que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, asistirá a la reunión de Jefes de Estado convocada para impulsar el proceso de puesta en marcha del Acuerdo.
La propia García Tejerina encabezará la delegación del Ministerio que participará tanto en las sesiones de negociación –en coordinación con la UE, que lidera las negociaciones, como en los foros más importantes que se celebran en paralelo.
Así, detalló que España tendrá presencia “en los principales eventos que forman parte de la Agenda de Acción Climática Global”, dirigidos a movilizar a todos los actores (gubernamentales y, sobre todo, no gubernamentales) de la lucha contra el cambio climático y a dar visibilidad a los esfuerzos: se trata de iniciativas temáticas en el ámbito, por ejemplo, de la agricultura (4 x 1000), del agua (Plan de Acción de la Estrategia 5+5 del Agua del Mediterráneo Occidental) y de la cooperación regional (RIOCC).
Pasar a la acción
Esta COP 22 está concebida como un encuentro para “pasar a la acción”, que permita comenzar a concretar acciones y mecanismos para poner en marcha el Acuerdo de París. En Marrakech se empieza a trabajar en aspectos fundamentales, para España y la UE, en cuanto al cumplimiento del objetivo de los 2ºC, precisando la ministra que avanzará en la definición del Mecanismo de Pérdidas y Daños y en el diseño del procedimiento de revisión del Acuerdo, que permita hacer balance cada 5 años y reevaluar los compromisos de cada país.
“El medio ambiente es de todos y cuidarlos nos compromete a todos, y en la lucha contra el cambio climático todos podemos y debemos contribuir”, concluyó la ministra.