El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, como presidente del Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca de la Unión Europea, que se celebró ayer en Luxemburgo, logró el consenso de sus homólogos comunitarios para explorar nuevas fórmulas con las que afrontar las consecuencias derivadas de la actual geopolítica y del cambio climático en el sector agrario, tras analizar la información facilitada por la Comisión Europea sobre las perspectivas a corto plazo de los mercados agrícolas y los retos a medio plazo en el actual contexto geopolítico y climático.
Las consecuencias de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, las condiciones climáticas adversas en determinadas regiones, los elevados precios de la energía y la disminución global del poder adquisitivo condicionan los mercados agrícolas, no obstante los ministros estimaron que otros factores como la propagación de enfermedades animales y la inflación de los precios de los alimentos son circunstancias que presionan al sector, por lo que cambiaron impresiones sobre la manera de aumentar la flexibilidad de los planes estratégicos de la Política Agraria Común (PAC), para garantizar que puedan responder eficazmente a los retos futuros.
Las consecuencias de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, las condiciones climáticas adversas en determinadas regiones, los elevados precios de la energía y la disminución global del poder adquisitivo condicionan los mercados agrícolas, no obstante los ministros estimaron que otros factores como la propagación de enfermedades animales y la inflación de los precios de los alimentos son circunstancias que presionan al sector, por lo que cambiaron impresiones sobre la manera de aumentar la flexibilidad de los planes estratégicos de la Política Agraria Común (PAC), para garantizar que puedan responder eficazmente a los retos futuros.
La irrupción de determinadas crisis en los mercados ha puesto de manifiesto que superan el margen de actuación de agricultores y ganaderos y de los instrumentos de gestión que tienen a su alcance, según el ministro español. Por ello, aseguró que “es necesario explorar nuevos mecanismos para atender crisis de gran magnitud en un escenario de tanta incertidumbre y de impactos cada vez más preocupantes de los efectos del cambio climático en la producción de alimentos”.
En cuanto a las consecuencias a corto plazo del conflicto de la guerra entre Israel y el grupo islamista Hamás sobre los mercados agrícolas están siendo «muy limitadas» por el momento, según aseguró el presidente del Consejo al inició del mismo, dado que por ahora no se ven efectos desde el punto de vista energético que se puedan trasladar a ámbitos como la producción de fertilizantes.
«A corto plazo están siendo muy limitadas, afortunadamente. No sabemos cuál pueda ser el desarrollo. Evidentemente, cualquier consecuencia desde el punto de vista energético, petróleo o gas, pudiera tener consecuencias evidentemente sobre los mercados alimentarios y, en particular, sobre la producción de fertilizantes. Pero hoy no es el caso.»
El ministro ucraniano de Política Agraria y Alimentación, Mykola Solskyi, también se unió a esta última reunión ministerial para ofrecer a los Estados miembros de la UE una visión general de la evolución reciente del sector agrícola ucraniano. Solskyi facilitó información sobre las exportaciones de productos agrícolas ucranianos a la UE y sobre cómo la ésta puede seguir apoyando a su país, no sólo a través de mecanismos que faciliten la exportación de productos, sino también sobre el terreno, en Ucrania.
Planas puso en valor el trabajo de la Comisión Europea para consolidar los corredores de solidaridad, como alternativa factible a la salida de grano a través del Mar Negro, así como para buscar rutas alternativas con menor coste logístico. “Apoyamos a nuestros vecinos ucranianos, con medidas que faciliten la exportación de grano de Ucrania a los mercados internacionales, en concreto, a los países que más lo necesitan”.
En este sentido, el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, admitió que las negociaciones de Ucrania con países vecinos como Polonia, Hungría y Eslovaquia para que esos Estados levanten de manera definitiva las restricciones impuestas a la importación de productos agrícolas ucranianos «avanzan bien».
«Es difícil valorar cuándo ocurrirá esto (el acuerdo entre Ucrania y los países vecinos), pero las cosas van en la dirección adecuada», declaró el político polaco tras la reunión y detalló que sigue habiendo debates bilaterales entre los países y Ucrania, y que Kiev pretende a través de un sistema de licencias «limitar la exportación a empresas autorizadas a las que se les haya concedido una licencia».
Por otro lado, los ministros debatieron los aspectos relacionados con la la propuesta de modificación de la Directiva marco sobre residuos, presentada por la Comisión el 5 de julio de 2023. Este punto fue incluido a petición de la Presidencia española debido a su importancia para el sector agroalimentario, para contribuir al cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 12.3 de reducir a la mitad el desperdicio mundial de alimentos en 2030, así como disminuir las pérdidas alimentarias a lo largo de la cadena de producción y suministro.
El Consejo de Medio Ambiente tiene la responsabilidad general de examinar la propuesta, pero dada su relevancia para el conjunto de la cadena alimentaria, durante la sesión de ayer los ministros de Agricultura analizaron los aspectos relacionados con la alimentación, también a la luz de su potencial para contribuir a la seguridad alimentaria. El Consejo agrario acogió favorablemente la propuesta y los objetivos que persigue y reafirmó su compromiso de reducir el desperdicio de alimentos.
Por su parte, los ministros de Agricultura de Países Bajos, Alemania y Bélgica pidieron, en una declaración conjunta a la prensa durante un Consejo, que la UE que se movilice contra la enfermedad de la lengua azul, un virus que ha empezado a afectar a su ganado y que podría extenderse por todo el territorio europeo, con una investigación para desarrollar una vacuna cuanto antes y ayuda financiera con el mismo objetivo.
La Presidencia también facilitó al Consejo información actualizada sobre los aspectos agrícolas y forestales de la propuesta relativa a la certificación de créditos de carbono. Este reglamento, según explicó Luis Planas, supondrá una oportunidad para el sector agrícola y forestal, para que se puedan establecer sistemas de certificación armonizados con arreglo a los cuales los agricultores y los silvicultores puedan acreditar el secuestro de carbono en sus suelos. El ministro español apuntó que este reglamento debe tener en cuenta los nuevos ecorregímenes de la PAC, que suponen un paso en la dirección adecuada, y que se reconozcan los esfuerzos que ya están haciendo agricultores y silvicultores en este sentido.