Los negociadores del Consejo de la UE y del Parlamento Europeo alcanzaron este martes 24 de octubre un acuerdo provisional destinado a reforzar las indicaciones geográficas (IGs) y otros regímenes de calidad para el vino, las bebidas espirituosas y los productos agrícolas, así como para mejorar su aceptación en toda la Unión.
El acuerdo aportará beneficios tangibles a la economía rural y salvaguardará el patrimonio gastronómico de la UE en todo el mundo, según señaló en una nota la presidencia española del Consejo de Ministros de Agricultura de la UE.
El acuerdo aportará beneficios tangibles a la economía rural y salvaguardará el patrimonio gastronómico de la UE en todo el mundo, según señaló en una nota la presidencia española del Consejo de Ministros de Agricultura de la UE.
Para el ministro de Agricultura español en funciones, Luis Planas, «las indicaciones geográficas muestran lo mejor de nuestra rica tradición gastronómica europea. El acuerdo que hemos alcanzado hoy ayudará a aumentar la aceptación de las indicaciones geográficas en toda Europa, reforzará su protección, especialmente en línea, y contribuirá a mantener la excelente reputación que tienen los productos europeos en los mercados mundiales.»
Entre los principales puntos acordados en la revisión reglamentaria sobre el sistema existente de IG destacan:
-un procedimiento de registro simplificado y más eficiente, que acortará el tiempo de espera entre la solicitud y el registro efectivo de la indicación geográfica (IG);
-una mayor protección de las indicaciones geográficas, incluidas las indicaciones online, en los nombres de dominio, que contienen indicaciones geográficas. Esto se hará a través del bloqueo geográfico y estará en línea con la Ley de Servicios Digitales;
-un papel reforzado para las organizaciones de productores. Los Estados miembros podrán designar organizaciones o agrupaciones de productores como organizaciones de productores reconocidas (OPr), con mayores competencias y responsabilidades. El acuerdo alcanzado tiene por objeto mantener las disposiciones vigentes sobre las OP reconocidas en algunos Estados miembros, al tiempo que deja que los demás Estados miembros establezcan voluntariamente un sistema de reconocimiento;
-un mayor énfasis en la sostenibilidad. En el caso de los productos agrícolas y de los vinos, las OP podrán acordar prácticas de sostenibilidad que vayan más allá de las normas nacionales o de la Unión. Si lo desean, las organizaciones de productores podrían mostrar esas prácticas en sus informes de sostenibilidad;
-la inclusión en el ámbito de aplicación del nuevo Reglamento de determinadas disposiciones relacionadas con el vino, que actualmente están cubiertas por el Reglamento de la Organización Común de Mercados (OCM);
-el acuerdo ofrece también protección en el caso de los productos con IG, que son ingredientes de alimentos preenvasados. Para utilizar el nombre de una indicación geográfica cuando se trata de un ingrediente de alimentos preenvasados, por ejemplo, en el etiquetado o en material publicitario, los productores deberán notificarlo previamente a la organización de productores reconocida pertinente.
A partir de este momento, continuarán los trabajos técnicos para completar el texto jurídico de conformidad con el acuerdo provisional.
Una vez finalizado, el texto se presentará a los representantes de los Estados miembros en el Comité Especial de Agricultura (CEA) para su aprobación.
A reserva de una revisión jurídica o lingüística, el Reglamento deberá ser adoptado formalmente por el Parlamento y el Consejo antes de que pueda publicarse en el Diario Oficial de la UE (DOUE) y entrar en vigor.
Las indicaciones geográficas (IG) protegen los nombres de productos alimentarios y de bebidas con características o cualidades específicas o una reputación especial, y que están vinculados a su zona de producción.
Estos productos están protegidos contra la copia o el fraude, mientras que el sistema de indicación geográfica garantiza que se fabricaron con altos estándares en su región de origen.
Los nombres de los productos agroalimentarios y de los vinos están protegidos como Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) e Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), y los de las bebidas espirituosas como Indicaciones Geográficas (IG). Algunos ejemplos famosos son el Parmigiano Reggiano, el Champagne, las aceitunas Kalamata, el vodka polaco, el queso Manchego o el de Gruyère.
La Unión Europea también protege las Especialidades Tradicionales Garantizadas (ETG). Son los nombres de los productos agrícolas que enfatizan los aspectos tradicionales de un producto sin estar vinculados a una zona geográfica específica. Ejemplos de TSG famosos son Pizza Napoletana y Vieille Kriek.
Con el fin de mejorar el sistema existente, el 31 de marzo de 2022, la Comisión Europea presentó una propuesta legislativa sobre las indicaciones geográficas de la UE para el vino, las bebidas espirituosas y los productos agrícolas, y los regímenes de calidad para los productos agrícolas.
El Grupo de Trabajo sobre Cuestiones Agrícolas Horizontales (Indicaciones Geográficas y Denominaciones de Origen) del Consejo y la CEA examinaron ampliamente el texto. El 8 de mayo de 2023, la CEA adoptó la posición del Consejo.
Los diálogos tripartitos entre el Consejo y el Parlamento Europeo comenzaron el 6 de junio de 2023, y la reunión final tuvo lugar este 24 de octubre de 2023, cuando se alcanzó un acuerdo provisional entre ambas instituciones.