El COPA-Cogeca aboga por una futura PAC más sostenible y moderna que afronte los retos del sector agrario de la UE
Los presidentes de las organizaciones y de las cooperativas agrícolas europeas se reunieron en Bruselas a finales de la pasada semana para acordar una postura común sobre la futura Política Agrícola Común (PAC), subrayando la necesidad de una PAC más fuerte, sostenible y moderna, capaz de responder a los actuales y futuros retos.
El presidente del COPA, Martin Merrild, afirmó que “la PAC ha sido una historia de éxito en muchos aspectos: no solo ha permitido a los agricultores ofrecerles a los consumidores la posibilidad de elegir entre una amplia gama de alimentos de calidad a precios asequibles, producidos de una manera sostenible, sino que también ha impulsado la economía en las zonas rurales.
Según Merrild, “la PAC representa menos del 1 % del gasto público total de la UE, lo que demuestra que se trata de una excelente inversión. Según una encuesta especial del Eurobarómetro sobre la PAC, esta idea la comparten también la mayoría de los ciudadanos.”
“Por consiguiente, añade, debe mantenerse la actual estructura de la PAC, con dos pilares fuertes y con normas comunes en toda la UE. También deben prolongarse las medidas existentes – los pagos directos, las redes de seguridad del mercado y las herramientas de gestión de riesgos – para hacer frente a la volatilidad del mercado.
Los pagos directos deben mantenerse, afirmó el presidente del COPA, ya que son la mejor herramienta para ayudar a los agricultores a gestionar los riesgos y a conseguir unos ingresos estables. Deben concederse a los agricultores activos, que contribuyen a la seguridad alimentaria y proporcionan bienes y servicios públicos”
“Pero es fundamental simplificar la PAC, porque su complejidad, particularmente en el caso de las medidas ecológicas, frena la innovación, reduce su eficiencia y supone una gran carga administrativa para los agricultores”, añadió.
La última crisis también ha demostrado claramente que es necesario ajustar y modernizar las herramientas políticas de la actual PAC para que respondan mejor a las condiciones del mercado.
Los agricultores deben disponer de medidas de gestión de riesgos nuevas y más eficaces para reducir la creciente volatilidad y los mercados de futuros deben desarrollarse más. El uso de estas herramientas debería seguir siendo voluntario para los agricultores,» insistió Merrild.
“Pero no se trata sólo de los mercados. Se trata también de garantizar que la vida en el medio rural tenga suficiente atractivo para motivar a los jóvenes a entrar en el sector y para detener el éxodo rural.
La puesta en práctica de la Declaración de Cork 2.0 “Una vida mejor en las zonas rurales” es fundamental para garantizar la disponibilidad de las mejores herramientas en favor de un medio rural más sostenible e inteligente,» destacó.
Agricultura inteligente
Por su parte, el presidente de la Cogeca, Thomas Magnusson, subrayó la necesidad de mejorar el acceso a las infraestructuras y de banda ancha para que los agricultores puedan desarrollar sus empresas y beneficiarse de la tecnología inteligente y digital.
«La agricultura inteligente y de precisión ayuda a los agricultores a producir más utilizando menos recursos. Permite aplicar los fertilizantes de una manera más precisa además de reducir los costes de los insumos,» afirmó Magnusson.
El apoyo a nivel europeo y nacional y la formación son también esenciales para incentivar su uso por la comunidad agrícola, así como infraestructura adecuada de banda ancha para aprovechar plenamente el potencial de la agricultura digital. El teléfono inteligente y el acceso a la banda ancha pueden también ayudar a los agricultores a controlar los mercados agrícolas y a promocionar sus empresas en línea,» añadió.
«Las políticas de desarrollo rural son fundamentales para apoyar estas inversiones, respaldar la innovación, potenciar la biodiversidad y fomentar el desarrollo de las cooperativas agrarias y otras organizaciones de productores,» afirmó Magnusson.
Los agricultores perciben únicamente el 20 % del precio final de un filete. Por esto, es importante que puedan obtener una proporción más justa del precio que los consumidores pagan por sus productos.
Esto se puede alcanzar estimulando a los agricultores a adherirse a cooperativas agrarias y otras organizaciones de productores que pueden ayudarles a comercializar sus productos y a obtener un mejor precio por los mismos.
Para tener éxito, las cooperativas han de ser innovadoras y seguir las tendencias de consumo,» concluyó. Esta toma de postura servirá de base para la consulta pública de la Comisión Europea sobre la futura PAC.