El CESE advierte de que la nueva regla de transporte animal «ponen en peligro la viabilidad de las explotaciones»
El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha asegurado que la propuesta legislativa de la Comisión Europea (CE) que modifica el reglamento de protección de los animales en el transporte tiene una «repercusión masiva en las explotaciones ganaderas y muchas pueden verse abocadas a cerrar».
Así consta en el dictamen del CESE que ha publicado este viernes el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE), que este órgano consultivo de la Unión Europea (UE) ha elaborado a petición del Parlamento Europeo y del Consejo de la UE.
En términos generales, el CESE ha concluido en su dictamen que el transporte de animales implica riesgos conocidos para su bienestar, tal y como lo evidencian los informes científicos realizados por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
Por ello, ha señalado que apoya la aplicación y el cumplimiento armonizado de las normativas, pero ha manifestado que es fundamental que la propuesta de la CE tenga en cuenta el conocimiento práctico de los ganaderos, transportistas y veterinarios.
En este sentido, ha solicitado un estudio detallado de impacto para el sector ganadero, «dado que el cambio propuesto por la CE tiene una repercusión masiva en la estructura, inversión y gestión de las explotaciones ganaderas existentes en la UE» y «ponen en peligro la viabilidad de las explotaciones y el sustento de quienes dependen de ellas».
«En un escenario generalizado, muchas granjas se verán abocadas al cese de su actividad», ha afirmado.
Impacto económico, social y sectorial
Ha solicitado a la CE que los costes de la implementación de esta nueva normativa no recaigan en los agentes del sector y que haya un fondo específico de financiación, independiente de los fondos destinados a la Política Agrícola Común (PAC), para capacitar a los operadores frente a las nuevas exigencias.
A su juicio, la propuesta de nuevo reglamento no ha tenido en cuenta la experiencia de los transportistas ganaderos, quienes advierten de, entre otras cosas, que el aumento de espacio en ocasiones puede incrementar el riesgo de caídas y lesiones, y que reducir las densidades y los tiempos de viaje implican más camiones en la carretera y más emisiones de CO2.
Por otra parte, ha advertido también del peligro que conlleva para los trabajadores la obligatoriedad de realizar jornadas laborales nocturnas, tal y como figura en la propuesta de reglamento.
Además, ha llamado a la CE a considerar el impacto que esta propuesta tendrá en las cadenas de suministro y que limitar a nueve horas el transporte al matadero discriminaría a los productores de los Estados miembros con grandes distancias, regiones montañosas, zonas aisladas o carentes de infraestructura desarrollada, quienes perderían su capacidad de elección y de negociación.
Ha señalado que la prohibición de transportar animales jóvenes como terneros, corderos, cabritos, lechones y potros, que no han sido destetados, durante largos trayectos por carretera, tiene un impacto significativo en la importación de razas animales procedentes de otros Estados miembros de la UE.
En este sentido, ha rcordado que cualquier norma que se imponga a los productores europeos solo será aceptada si se garantiza la inclusión de condiciones equivalentes para las importaciones en los acuerdos comerciales bilaterales.