El martes 27 de junio, el Consejo de la Unión Europea adoptó una Decisión relativa a la firma del Acuerdo de Libre Comercio (ALC) con Nueva Zelanda, que se celebrará más adelante.
El ALC liberalizará y facilitará el comercio y la inversión, así como promoverá una relación económica más estrecha, abriendo importantes oportunidades económicas para las empresas y los consumidores de ambas partes.
El ALC liberalizará y facilitará el comercio y la inversión, así como promoverá una relación económica más estrecha, abriendo importantes oportunidades económicas para las empresas y los consumidores de ambas partes.
En la actualidad, la UE es el tercer socio comercial de Nueva Zelanda y el comercio bilateral de bienes entre los dos socios ha aumentado constantemente en los últimos años, alcanzando casi 9.100 millones de euros en 2022.
Una vez que el acuerdo entre en vigor, se espera que el comercio bilateral crezca hasta un 30%, gracias a este acuerdo, con exportaciones anuales de la UE que podrían crecer hasta los 4.500 millones de euros. La inversión de la UE en Nueva Zelanda tiene un potencial de crecimiento de hasta el 80 %.
El acuerdo puede recortar unos 140 millones de euros al año en aranceles para las empresas de la UE desde el primer año de aplicación.
Según afirmó Johan Forssell, ministro de Cooperación Internacional para el Desarrollo y Comercio Exterior de Suecia, “en el contexto geopolítico actual, después de la COVID-19 y la agresión de Rusia contra Ucrania, este nuevo acuerdo con un socio de ideas afines, como Nueva Zelanda, es de importancia clave para la UE y para la estrategia en el Indo-Pacífico de la UE. El TLC representa grandes oportunidades para las empresas, nuestros agricultores y nuestros consumidores, así como para las contrapartes de Nueva Zelanda. También incluye compromisos sociales y climáticos sin precedentes.”
Una vez en vigor, el Acuerdo de Libre Comercio entre la UE y Nueva Zelanda, eliminará todos los aranceles sobre las exportaciones clave de la UE a Nueva Zelanda, como la carne de porcino, el vino tranquilo y el vino espumoso, el chocolate, los dulces de azúcar y las galletas.
También abrirá el mercado de servicios de Nueva Zelanda en sectores clave, como los servicios financieros, las telecomunicaciones, el transporte marítimo y los servicios de entrega, y garantizará un trato no discriminatorio a los inversores de la UE en Nueva Zelanda y viceversa
Además, mejorará el acceso de las empresas de la UE a los contratos públicos de bienes y servicios de Nueva Zelanda.
Igualmente, protegerá cerca de 2.000 Indicaciones Geográficas de vinos y bebidas espirituosas de la UE como Prosecco, Vodka polaco, Rioja, Champagne y Tokaji, y protegerá 163 de los productos alimentarios tradicionales con IG más reconocidos de la UE , como los quesos Asiago, Feta, Comté o Queso Manchego, el jamón Istarski pršut, el mazapán Lübecker o las aceitunas Elia Kalamatas.
El acuerdo de libre comercio facilitará los flujos de datos, normas previsibles y transparentes para el comercio digital y un entorno en línea seguro para los consumidores y evitará requisitos injustificados de localización de datos y mantener los altos estándares de protección de datos personales.
Ayudará a las pequeñas empresas a exportar más a través de un capítulo dedicado a las pequeñas y medianas empresas; reducirá los requisitos y procedimientos de cumplimiento para permitir un flujo más rápido de mercancías, y protegerá y hará cumplir los derechos de propiedad intelectual, en consonancia con las normas de la UE, de acuerdo con los compromisos de Nueva Zelanda.
El Acuerdo de Libre Comercio UE-Nueva Zelanda es el primero que integra plenamente el nuevo enfoque de la UE en materia de comercio y desarrollo sostenible, refrendado por el Consejo en las Conclusiones de 17 de octubre de 2022.
Incluye un capítulo dedicado a los Sistemas Alimentarios Sostenibles; un artículo dedicado al comercio y la igualdad de género, y una disposición específica sobre el comercio y la reforma de los subsidios a los combustibles fósiles.
El acuerdo también liberaliza los bienes y servicios “verdes” a partir de su entrada en vigor.
En caso de violaciones graves de los principios laborales fundamentales o del Acuerdo de París, el TLC prevé sanciones como último recurso.
La Unión Europea concluyó las negociaciones para un acuerdo comercial global y ambicioso con Nueva Zelanda hace casi un año, el 30 de junio de 2022. Luego, el 17 de febrero de 2023, la Comisión propuso al Consejo autorizar la firma del ALC.
Tras la firma, el Consejo solicitará al Parlamento Europeo que dé su aprobación a la celebración del Acuerdo (según lo estipulado en el TFUE) y una vez dado este paso y que haya sido ratificado por Nueva Zelanda, y que las dos partes se notifiquen mutuamente sobre la finalización de sus procedimientos internos, podrá entrar en vigor. Esto tendrá lugar el primer día del segundo mes después de que ambas partes confirmen haber completado los requisitos y procedimientos legales o en otra fecha acordada por las partes.
Este contenido es únicamente para usuarios registrados.
