El Índice de Precios de los Alimentos de la FAO cae de nuevo en enero
El índice de precios de los alimentos de la FAO se situó en enero de 2015 en un promedio de 182,7 puntos, esto es, 3,6 puntos (o un 1,9 %) por debajo de su valor revisado* (a la baja) de diciembre de 2014. Ha caído todos los meses, salvo en octubre, desde abril de 2014.
Mientras que los precios del azúcar y los productos lácteos se mantuvieron prácticamente sin cambios, los correspondientes a los demás productos básicos incluidos en el índice cayeron en enero, siendo los cereales y los aceites los que registraron el descenso más acusado. A excepción del breve respiro de octubre de 2014, el índice de precios de los alimentos de la FAO ha seguido cayendo todos los meses desde abril de 2014.
El índice de precios de los cereales de la FAO se situó en enero en un promedio de 177,4 puntos, es decir, 6,6 puntos (o un 3,6 %) menos que en diciembre. Este marcado descenso se debió principalmente a una reducción del 7 % en los precios internacionales del trigo, ya que los cereales secundarios y el arroz solo bajaron un 1 % o menos.
La pronunciada caída de los precios del trigo obedece a la confirmación de una situación de suministros abundantes en esta campaña y una mayor probabilidad de que las existencias alcancen sus niveles más elevados en más un decenio.
Con su valor actual, el índice de precios de los cereales de la FAO ha caído hasta su nivel más bajo desde julio de 2010 y se sitúa actualmente 90 puntos (o un 34 %) por debajo del máximo (267,7 puntos) alcanzado en junio de 2008.
El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO registró un promedio de 156,0 puntos en enero, que supone un descenso de 4,7 puntos (o el 2,9 %) con respecto a diciembre y constituye su valor más bajo desde octubre de 2009.
Los precios de los aceites de palma y de soja descendieron como consecuencia de la débil demanda de importaciones de aceite de palma y de las previsiones de suministros de soja abundantes. Asimismo, la prolongada debilidad de los precios del petróleo crudo siguió influyendo en las cotizaciones de los aceites vegetales al minar su competitividad como materia prima para la obtención de biodiésel.
El índice de precios de los productos lácteos de la FAO se situó en un promedio de 173,8 puntos en enero, prácticamente al mismo nivel que en diciembre. El descenso de los precios del queso y la leche desnatada en polvo se compensó con el aumento del precio de la mantequilla, mientras que la leche entera en polvo no sufrió variaciones.
La caída del valor del euro ha provocado que las cotizaciones de las exportaciones de Europa converjan con las ofertas de Oceanía y los Estados Unidos de América. La llegada de nuevos suministros al mercado mundial se ve atenuada por la sequía en Oceanía, que está causando un descenso acelerado de la producción estacional de leche, mientras que la producción en la Unión Europea en su conjunto se ha reducido para evitar el pago de tasas por exceder las cuotas ya que el ejercicio contingentario abril-marzo está llegando a su fin.
El índice de precios de la carne de la FAO se situó en enero en un promedio de 194,3 puntos, esto es, 3,2 puntos (o un 1,6 %) por debajo de su valor revisado de diciembre. Este descenso obedeció en parte a la caída de los tipos de cambio en relación con el dólar estadounidense, especialmente el del euro.
Los principales productos afectados fueron la carne de cerdo procedente de Europa, la carne de bovino de Australia y la carne de ovino de Nueva Zelandia. Además, las abundantes disponibilidades exportables siguieron influyendo en los precios de la carne de cerdo.
La revisión a la baja del índice de precios de la carne de diciembre, de los 204,0 puntos publicados el mes pasado a 197,5 puntos, se debió principalmente a una caída imprevista y pronunciada de los precios de las exportaciones de carne de cerdo del Brasil y, en menor medida, de carne de aves de corral de dicho país.
El índice de precios del azúcar de la FAO se situó en enero en un promedio de 217,7 puntos, prácticamente sin variaciones con respecto a diciembre de 2014. La incertidumbre previa a la nueva cosecha de azúcar del Brasil, que generalmente comienza en abril, mantuvo los precios de exportación.
Sin embargo, su efecto en el índice se vio ampliamente neutralizado por las expectativas de suministros abundantes en las principales zonas productoras de azúcar, en concreto la India, Tailandia y la Unión Europea.
A diferencia de otros grupos de productos básicos, la mayoría de los precios utilizados en el cálculo del índice de precios de la carne de la FAO no se encuentra disponible en el momento del cómputo y publicación del índice de precios de los alimentos de la Organización; por tanto, el valor del índice de precios de la carne de de los meses más recientes se deriva de una combinación de precios previstos y observados.
En ocasiones, esto puede requerir revisiones significativas del valor final del índice de precios de la carne de la FAO que, a su vez, podría influir en el valor del índice de precios de los alimentos de la Organización.