La Comisión Europea presentó este miércoles 11 de diciembre el Pacto Verde Europeo, una hoja de ruta para hacer que la economía de la UE sea sostenible, con claras implicaciones en la próxima reforma de la PAC post-2020 y en la actividad agrícola, ganadera y silvícola de la Unión.
El Pacto Verde Europeo suscita más dudas que certidumbres en el sector agrario comunitario
La Comisión prevé presentar en 100 días la primera Ley del Clima Europea, con el fin de transformar en legislación la ambición política de ser el primer continente climáticamente neutro en 2050.
Además, para materializar nuestra ambición en materia de clima y medio ambiente, la Comisión también presentará la Estrategia sobre Biodiversidad para 2030, la nueva Estrategia Industrial, el Plan de Acción de la Economía Circular, la Estrategia «de la granja a la mesa» de alimentación sostenible y una serie de propuestas para una Europa sin contaminación.
Para que el sector privado contribuya a financiar la transición ecológica, la Comisión presentará la Estrategia de Financiación Ecológica en 2020, en el la que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) tendrá mucho que ofrecer.
Al respecto, el citado pacto persigue que los retos en materia de clima y medio ambiente se transformen en oportunidades en todas las áreas de actuación, y haciendo que la transición sea justa e integradora para todos.
La presidenta Ursula von der Leyen declaró que «El Pacto Verde Europeo es nuestra nueva estrategia de crecimiento, un crecimiento que aporta más de lo que consume. Muestra cómo transformar nuestro modo de vivir y trabajar, de producir y consumir, para que vivamos de forma más sana y nuestras empresas sean innovadoras. Todos podemos participar en la transición y todos podemos aprovechar las oportunidades que brinda. Si somos los primeros en dar este paso y si lo hacemos con premura, contribuiremos a que nuestra economía sea líder mundial. Vamos a poner todo nuestro empeño en lograrlo, por el bien del planeta y de la vida que sustenta, por el patrimonio natural de Europa, por la biodiversidad, por nuestros bosques y por nuestros mares. Si demostramos al resto del mundo cómo ser sostenible y competitivo, podemos convencer a otros países para que se nos unan».
Por su parte, el vicepresidente ejecutivo Frans Timmermans, añadió que «estamos en situación de emergencia climática y medioambiental. El Pacto Verde Europeo representa una oportunidad para mejorar la salud y el bienestar de nuestros ciudadanos, mediante la transformación de nuestro modelo económico. Nuestro plan define los medios para reducir las emisiones, restablecer la salud de nuestro medio ambiente, proteger a nuestra fauna silvestre, crear nuevas oportunidades económicas y mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos. La contribución de todos y cada uno de nosotros es importante; todos los países y sectores se verán afectados por esta transformación. Por otra parte, nuestra responsabilidad consiste en garantizar que esta transición sea solo eso, una transición, y que nadie se quede atrás en la ejecución del Pacto Verde Europeo».
El Pacto Verde Europeo incorpora una hoja de ruta con una serie de actuaciones para impulsar el uso eficiente de los recursos mediante el paso a una economía limpia y circular y detener el cambio climático, revertir la pérdida de biodiversidad y reducir la contaminación. Describe las inversiones necesarias y los instrumentos de financiación disponibles, y explica cómo garantizar una transición justa e integradora.
El Pacto Verde Europeo abarca todos los sectores de la economía, especialmente los del transporte, la energía, la agricultura, los edificios y las industrias, como las de la siderurgia, el cemento, las TIC, los textiles y los productos químicos.
Para transformar en legislación la ambición política de ser el primer continente climáticamente neutro en 2050, la Comisión presentará en un plazo de 100 días la primera «Ley del Clima Europea».
Para materializar nuestra ambición en materia de clima y medio ambiente, la Comisión también presentará la Estrategia sobre Biodiversidad para 2030, la nueva Estrategia Industrial, el Plan de Acción de la Economía Circular, la Estrategia «de la granja a la mesa» de alimentación sostenible y propuestas para una Europa sin contaminación.
Objetivo 2050 e Inversión
Los trabajos para endurecer los objetivos de emisiones de Europa para 2030 comenzarán de inmediato y se fijará una senda realista hacia el objetivo de 2050.
La consecución de los objetivos del Pacto Verde Europeo exigirá una inversión significativa.
Se calcula que cumplir los objetivos actuales en materia de clima y energía para 2030 requerirá 260. 000 M€ de inversión anual adicional, lo que representa aproximadamente el 1,5 % del PIB de 2018. Para ello habrá que movilizar a los sectores público y privado.
La Comisión presentará a principios de 2020 el Plan de Inversiones para una Europa Sostenible, con el fin de contribuir a alcanzar las necesidades de inversión. Al menos el 25 % del presupuesto de la UE a largo plazo deberá dedicarse a la acción por el clima, y el Banco Europeo de Inversiones (BEI), que es el banco climático europeo, ofrecerá apoyo adicional.
Para que el sector privado contribuya a financiar la transición ecológica, la Comisión presentará la Estrategia de Financiación Ecológica en 2020.
La lucha contra el cambio climático y la degradación del medio ambiente es un reto común, pero no todas las regiones y los Estados miembros parten de la misma situación. Por ello, el Mecanismo para una Transición Justa apoyará a las regiones que dependen en gran medida de actividades con un uso muy intensivo de carbono. Ayudará a los ciudadanos más vulnerables en la transición, facilitando el acceso a programas de reciclaje profesional y oportunidades de empleo en nuevos sectores económicos.
Asimismo, en marzo de 2020, la Comisión pondrá en marcha el «Pacto por el Clima» para dar voz y cometido a los ciudadanos en el diseño de nuevas acciones, la difusión de información, el comienzo de iniciativas de base y la presentación de soluciones que otros puedan repetir.
Los retos mundiales del cambio climático y la degradación del medio ambiente reclaman una respuesta mundial.
La UE seguirá promoviendo sus objetivos y estándares medioambientales en las conferencias de las Naciones Unidas sobre biodiversidad y clima y reforzará su diplomacia verde. El G7, el G20, las conferencias internacionales y las relaciones bilaterales servirán para convencer a los demás para que redoblen sus esfuerzos.
La Unión Europea utilizará también la política comercial para garantizar la sostenibilidad y establecerá asociaciones con los vecinos de los Balcanes y de África para ayudarlos en sus propias transiciones.
Próximas etapas
Al respecto, la Comisión solicita al Parlamento Europeo y al Consejo Europeo que refrenden la ambiciosa visión de la Comisión para la economía y el medio ambiente futuros de Europa y que ayuden a hacerla realidad. La Comisión propondrá las medidas anunciadas en la hoja de ruta del Pacto Verde Europeo.
Contexto
Según la Comisión Europea, el cambio climático y la degradación del medio ambiente representan una amenaza existencial para Europa y el mundo. Para superar este reto, Europa necesita una nueva estrategia de crecimiento que transforme la Unión en una economía moderna, eficiente en el uso de los recursos y competitiva, en la que no existan emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2050, en la que el crecimiento económico no dependa del uso de recursos y en la que no se desatienda a ningún ciudadano o región.
La Unión Europea ya cuenta con un historial sólido de reducción de sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) manteniendo el crecimiento económico.
Entre 1990 y 2018, las emisiones bajaron un 23 %, mientras que el PIB de la Unión creció un 61 % en el mismo período. Sin embargo, según la CE aún queda mucho por hacer. Dada su vasta experiencia, la UE está a la vanguardia en la creación de una economía verde e integradora.
La Comunicación sobre el Pacto Verde fija la línea de actuación en los próximos meses y años. La labor que desarrollará la Comisión se guiará por las exigencias públicas de actuación y por los datos científicos de carácter incuestionable, contrastados de manera exhaustiva por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES), el Panorama de los Recursos Globales (Global Resources Outlook) y los informes de estado y perspectivas de 2019 de la Agencia Europea de Medio Ambiente. Nuestras propuestas se basarán en datos contrastados e irán avaladas por consultas de amplio calado.
Una mayoría abrumadora de los europeos considera que la protección del medio ambiente es importante (95 %). Casi 8 de cada 10 europeos (77 %) afirma que la protección del medio ambiente puede impulsar el crecimiento económico.
Los resultados de la encuesta del Eurobarómetro relativa a las actitudes de los ciudadanos de la UE respecto al medio ambiente confirman el amplio respaldo público a la legislación medioambiental a nivel de la UE y a la financiación de la UE para actividades respetuosas con el medio ambiente.
Más información:
Informe pdf de Preguntas y Respuestas sobre el PVE: El_Pacto_Verde_Europeo__Preguntas_y_respuestas
Orientaciones políticas de la presidenta Von der Leyen.
Comunicación sobre el Pacto Verde Europeo
Informe sobre la situación del medio ambiente en Europa 2020: Agencia Europea de Medio Ambiente
El camino que Europa necesita
Por su parte, la presidenta de los socialistas en el Parlamento Europeo, Iratxe García, aseguró que el Pacto Verde elaborado por el vicepresidente de la Comisión Europea, el socialdemócrata Frans Timmermans, «señala el camino que Europa y el mundo necesitan recorrer» para hacer frente a la emergencia climática, que requiere medidas «urgentes y excepcionales».
Durante su intervención en el Pleno del Parlamento Europeo, tras la presentación del Pacto Verde, García hizo referencia a los «tres pilares» necesarios para lograr el objetivo de una Europa climáticamente neutra en 2050, a través de una transición justa.
En primer lugar, afirmó, un pilar verde, que “incorpora la Ley Climática, con objetivos claros y el compromiso último de alcanzar la neutralidad climática”, y que además incluye los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en el Semestre Europeo, “nuestra vieja aspiración”.
En segundo lugar, un pilar rojo que dé una dimensión social a esta transformación, para garantizar «que nadie se quede atrás, porque las clases más desfavorecidas no pueden ser las más afectadas por el cambio climático».
En tercer lugar, Iratxe García mencionó el pilar financiero, “que determinará el éxito del Pacto Verde”.
Según la propia Comisión, el cumplimiento de estos objetivos «requerirá una inversión anual adicional de 260.000 millones de euros» y para eso, «necesitamos un Marco Financiero Plurianual con al menos el 1,3% de la Renta Nacional Bruta, y una fiscalidad justa alineada con los objetivos de reducción del carbono».
La presidenta de los socialistas aseguró que “los socialdemócratas «están preparados para el cambio, y preguntó «si el resto de las fuerzas políticas lo están también para cumplir las expectativas de millones de personas. La respuesta es obligada: tenemos que estar. Es tiempo de actuar», concluyó.
Otras reacciones europarlamentarias
Los eurodiputados expusieron a Von der Leyen y Timmermans en un debate plenario sus peticiones para desarrollar una hoja de ruta que permita alcanzar un continente climáticamente neutro.
Después de la reciente declaración de la Eurocámara sobre la emergencia climática, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, desveló ante el pleno del Parlamento Europeo los planes de la Comisión para alcanzar la neutralidad climática en la UE para 2050.
Los líderes de los grupos políticos representados en la Eurocámara explicaron sus posturas sobre cómo asegurar que la futura “Ley Europea sobre el Clima” esté debidamente financiada e implementada de una manera sostenible tanto social, como económicamente.
Esther de Lange (PPE, NL) aseguró que su grupo comparte “la obligación moral” de proteger el Planeta: «Somos la última generación capaz de hacerlo. Una política industrial coherente y consistente, y un Pacto Verde ambicioso deben ir de la mano, reuniendo lo mejor y lo más conveniente para conseguir los mejores resultados. Si otras partes del mundo no están de acuerdo, la UE debería reconsiderar su acceso al mercado europeo», añadió.
Según Dacian Ciolos (Renew, RO), “solo tendremos éxito si convertimos este reto en una oportunidad. Para hacer eso, el Pacto Verde no debería suponer más burocracia, sino llevar a una movilización social”. Ciolos sugirió que la ambición de la UE en relación con las emisiones de gases de efecto invernadero se eleven a una futura ley climática y a un doble enfoque hacia la digitalización y tecnología verdes.
Philippe Lamberts (Verdes/ALE, BE) pidió que la UE se comprometa a reducir los gases de efecto invernadero en un 65% en 2030 y a asegurar recursos sostenibles, biodiversidad y a combatir la contaminación. “El Fondo de Transición Justa debería beneficiar a la gente más vulnerable, a la vez que las políticas financiera y agrícola deben someterse a revisión”, afirmó.
Silvia Sardone (ID, IT) preguntó a la Comisión: «¿habéis contemplado el impacto social y económico de alcanzar la neutralidad climática en 2050?» La eurodiputada afirmó que hay una “contradicción entre los objetivos climáticos de la UE y los acuerdos comerciales firmados con otros países con estándares medioambientales más bajos».
Ryszard Legutko (ECR, PL) señaló que “la Comisión debería trabajar con los Estados miembros, que están a punto de discutir los objetivos de reducción de emisiones en el Consejo Europeo. «¿Está intentando la Comisión arrebatar poder de los Estados miembros? Los Gobiernos no deberían ser marginados en algo tan fundamental», añadió.
Manon Aubry (GUE/NGL, FR) propuso un «Pacto Verde alternativo» de su grupo político, incluyendo impuestos al carbón, al plástico y al queroseno, y medidas vinculantes para una reducción del 70% de las emisiones para alcanzar una transición social y ecológica más humana.
Muchas preguntas en busca de respuestas
¿Qué se necesita para que los agricultores estén «preparados para el Pacto Verde»?
En la presentación del Pacto Verde («Green Deal») por parte del comisario, Frans Timmermans, destacó el papel clave que la comunidad agrícola europea tendrá que desempeñar para hacer realidad la nueva visión de la Comisión Europea.
Para el COPA-Cogeca, que agrupa a las organizaciones profesionales agrarias europeas y a sus cooperativas, los agricultores están listos para apoyar una visión ambiciosa, siempre que el Pacto Verde sea coherente y consistente.
Sin embargo, no se puede pasar por alto que miles de agricultores han salido a las calles en las últimas semanas en varios países pidiendo políticas coherentes, ingresos dignos y que se acabe con el injusto tratamiento del sector agrícola.
Estas preocupaciones deben ser abordadas, según esta organización. Sin embargo, en esta etapa inicial, el Pacto Verde Europeo plantea más preguntas entre los agricultores europeos que soluciones reales.
Para el COPA-Cogeca, es obligatorio tener una visión de Europa sobre el cambio climático, pero debe ser un proyecto concreto y realista para «no dejar a nadie atrás». Si bien podríamos apoyar un enfoque ambicioso, como el propuesto, los agricultores y sus cooperativas necesitan saber:
¿ Cómo el presupuesto europeo (MFP 2021-2027), con los recortes planteados, tendrá en cuenta las ambiciones del Pacto Verde en general y más específicamente las de la nueva PAC y las de la Estrategia de la Granja a la Mesa?;
¿Cómo la Comisión evitará más retrasos en la reforma de la PAC, si tiene que «reflejar las ambiciones del Pacto Verde y la Estrategia de la Granja a la Mesa»?;
¿Cómo la ambición de la Estrategia «Green Deal» y «Farm to Fork» se reflejará en los Planes Estratégicos de la PAC desde el principio, si ni siquiera sabemos cuáles son los criterios de aprobación?;
¿Cómo los agricultores serán compensados a través de esquemas ecológicos, si solo enfrentan a mayores costes y a pérdida de ingresos?;
¿Cómo la propuesta de Estrategia de la Granja a la Mesa «Farm to Fork» para mejorar la posición de los agricultores en la cadena de valor, irá más allá de la Directiva ya aprobada sobre Prácticas Comerciales Desleales (UTP)?;
-Si la referencia al papel de las «nuevas tecnologías y descubrimientos científicos» incluirían Nuevas Técnicas de Mejoramiento, que actualmente están bloqueadas por la decisión del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas;
Si la «diplomacia o negociación del Pacto Verde» se utilizará con carácter retroactivo para los Tratados de Libre Comercio (TLC), que apoyan «prácticas nocivas como la tala ilegal», por ejemplo, el acuerdo del Mercosur;
¿Cómo la Comisión adoptará la «tecnología digital», que desempeña un papel central en el Pacto Verde, si solo el 50% de las zonas rurales europeas tienen cobertura de banda ancha?;
¿Cómo vamos a «reducir significativamente el uso de pesticidas y fertilizantes», cuando no se menciona una lista de «alternativas creíbles o viables» en el Pacto Verde?
¿Cuál será el impacto financiero del Pacto Verde en un momento en que la agricultura europea se enfrenta al desafío de la renovación generacional?;
Para el COPA-Cogeca, la agricultura es un socio clave de todas las políticas históricas, que figuran en el Pacto Verde. Los agricultores europeos y sus cooperativas contribuirán activamente al «amplio debate de las partes interesadas», que se anunció en la Estrategia «Farm to Fork».
El éxito del «Green Deal» dependerá en parte, según esta organización, del éxito y la preservación del modelo de agricultura familiar en Europa. Ningún otro sector puede eliminar las emisiones de la atmósfera de forma natural, siendo, a la vez, la base del desarrollo de una economía basada en la Naturaleza y garantizando la seguridad alimentaria, concluye el COPA-Cogeca.