España fue el país de la Unión Europea (UE) del que procedieron más productos que motivaron una alerta alimentaria en 2017, un total de 232, según el informe anual de 2017 del Sistema europeo de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF, por sus siglas en inglés).
España fue en 2017 el primer país de la UE origen de más alertas alimentarias
En el cómputo global y por delante de España se situaron tan solo como origen de las notificaciones de alerta alimentarias en la Unión Europea, Brasil (con 372 casos), Turquía (316) y China (303).
Por su parte, España notificó un total de 239 avisos de los 3.832 registrados en 2017 en toda la UE. De ese total, España avisó de 21 alertas, 176 rechazos de productos alimenticios en sus aduanas, otras 25 informaciones de atención y 21 informaciones de seguimiento.
Dentro de la UE, fue el sexto país que más notificaciones emitió, por detrás de Italia (551), Holanda (491), Alemania (385), el Reino Unido (373) y Francia (254).
La mayor parte de los productos notificados por España procedían de China (hasta 61).
El informe del RASFF de 2017 indica, además, que el año pasado hubo un intercambio «récord» de información entre los países que permitió ayudar a rastrear y retirar del mercado los productos afectados.
De las 3.832 notificaciones que hubo en toda la Unión Europea, 942 fueron clasificadas de «alerta», lo que es indicativo de un «riesgo grave para la salud» y, por tanto, hace necesaria una intervención más rápida e inmediata de los servicios sanitarios.
En la UE, las amenazas alimentarias más habituales fueron debidas, principalmente, a casos de salmonella en carne de pollo, detectados en las fronteras comunitarias, como el problema notificado más frecuente, así como de la presencia de mercurio en el pez espada, en el caso de alimentos controlados en el mercado europeo.
Sólo un pequeño porcentaje de las notificaciones en 2017 hicieron referencia a piensos (el 6 %) y a productos en contacto con alimentos (el 3,1 %).
El informe destaca también que en 2017 se produjo un alto número de notificaciones relacionado con residuos del plaguicida “Fipronil” en huevos, que dio pie al «intercambio de información más intensivo en la historia del RASFF», lo que ayudó a rastrear y a eliminar los huevos afectados por esta sustancia tóxica del mercado.
El comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria de la UE, Vytenis Andriukaitis, señálalo que el incidente del “Fipronil” nos ha llevado a proponer maneras de reforzar más el sistema, para que esté más preparado a la hora de combatir el fraude, mediante acciones coordinadas entre los operadores de alimentos y los Estados miembros».
Informe del RASFF: archivo pdf en [EN ]:
Informe del RASFF (España: archivo pdf en [EN]:
rasff_country-fact-sheet_2017_esp