Miembros de Intercitrus mantuvieron el pasado 3 de mayo un almuerzo de trabajo con el comisario de Agricultura, Phil Hogan, así como con una delegación del Partido Popular Europeo (PPE) compuesta por el vicepresidente de esta agrupación, Esteban González Pons, por la eurodiputada y ponente de la reforma de la PAC, Esther Herranz, y por la presidenta del PP-CV, Isabel Bonig.
Intercitrus exige a Hogan reciprocidad y medidas para evitar la entrada de plagas y enfermedades foráneas
Los representantes de la interprofesional han informado sobre la “mala” marcha de la campaña citrícola, muy afectada por la presencia en Europa de cítricos de Sudáfrica y de Egipto, así como por otros tantos problemas coyunturales y estructurales del propio sector. Ante tales circunstancias han reclamado a la Comisión un estudio de impacto de los acuerdos comerciales firmados con estos países terceros, un análisis previo para el que pronto se rubricará con Mercosur así como reciprocidad en las condiciones de las importaciones.
Junto a ello, han puesto el acento sobre la amenaza inmediata que suponen dos graves plagas foráneas –la ‘mancha negra’ (CBS) y la ‘falsa polilla’ (Thaumatotibia lecotreta) y el Citrus greening (HLB, cuyo insecto vector ya se encuentra en Portugal y Galicia) que son de cuarentena para la UE y que son halladas muchas veces en los controles portuarios europeos a partidas importadas, por lo que se ha exigido medidas “extraordinarias y de urgencia” para evitar su introducción a las zonas citrícolas mediterráneas.
El encuentro ha servido para avanzar en cuanto a la documentación requerida para que, al finalizar la próxima campaña de contraestación, se pueda elaborar un informe con datos de las cuatro últimas temporadas para, en su caso, analizar la posibilidad de activar la cláusula de salvaguarda del acuerdo con la Comunidad de Estados de África del Sur.
De igual manera, se ha hecho mención a la necesidad de que el Ejecutivo europeo redoble las garantías para hacer cumplir ésos principios de reciprocidad que, sobre el papel, vienen recogidos en tales tratados con países no comunitarios como la propia Sudáfrica, Egipto o Turquía o en otros futuros, como el que próximamente se acordará con Mercosur, que la CE está negociando sin transparencia y que podrían conllevar nuevas concesiones arancelarias en favor del zumo de naranja de Brasil.
“Las naranjas o mandarinas o el zumo procedente de países terceros deben cumplir con las mismas exigencias que se han establecido para los productos comunitarios porque sólo así se podrá extender el modelo europeo de producción y particularmente sus exigencias en materia de protección de la salud de los consumidores y del medioambiente”, ha advertido el presidente de Intercitrus, Manuel Arrufat.
En idéntico sentido, se ha avanzado sobre cuestiones no comerciales pero sí relacionadas con la supervivencia del sector: la necesidad de endurecer las condiciones para evitar la entrada de graves plagas y enfermedades foráneas. Concretamente, se ha mencionado la “preocupante” situación que se está viviendo, pese a la regulación específica aplicada a las importaciones de Brasil, Argentina, Uruguay y Sudáfrica, con la ‘mancha negra’ que acumula una cifra récord de interceptaciones con este patógeno.
Dada la constatación de que este hongo es capaz de adaptarse al clima Mediterráneo, se ha reclamado a Hogan la posibilidad de un cierre cautelar de fronteras a partir de un determinado nivel de interceptaciones (5), como así preveía con anterioridad la normativa europea (aunque nunca llegó a aplicarse).
En cuanto a la falsa polilla (Thaumatotibioa leucotreta), los miembros de Intercitrus han censurado el hecho de que la CE haya permitido a los propios países terceros que fueran ellos los que evaluasen si sus tratamientos son de eficacia equivalente al tratamiento con frío, que es el único eficaz reconocido internacionalmente. Estas medidas, por otra parte, cuentan con el respaldo unánime del Grupo de Contacto de Cítricos Europeo conformado por representantes de los países productores de Portugal, Francia, Italia y España, tal como se acordó recientemente en un encuentro celebrado en Córcega.
Tras varios años de inactividad y ante la gravedad de la crisis la Interprofesional Española de la Naranja y de la Mandarina se ha reactivado, viene trabajando desde hace ya unos meses y confía en que a corto/medio plazo pueda solicitar en tiempo y forma a la CE la cofinanciación de programas de promoción para incentivar el consumo.
Hogan, que ha tomado nota de las reivindicaciones del sector, se ha comprometido a agilizar y priorizar estos proyectos. A la cita, por parte de la interprofesional, han acudido representantes de ASAJA, COAG, UPA, Cooperativas Agroalimentarias de España así como del Comité de Gestión de Cítricos (CGC).