La Comisión Europea ha presentado hoy su posición y objetivos en vísperas de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que va a celebrarse en París del 30 de noviembre al 11 de diciembre.
La Comisión Europea presenta su posición y objetivos para la Cumbre sobre el Cambio Climático
La Comisión Europea ha subrayado hoy la importancia crucial de que, en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que va a celebrarse en París del 30 de noviembre al 11 de diciembre, se alcance un pacto mundial sobre el clima que sea equitativo, ambicioso y jurídicamente vinculante.
La Unión Europea va a trabajar en pro de que se obtenga un acuerdo global, duradero y dinámico que acelere la transición mundial hacia economías con bajas emisiones de carbono y resistentes al cambio climático, lo cual no sólo contribuirá a frenar dicho cambio y a intensificar los esfuerzos de las sociedades para adaptarse a sus efectos, sino que también respaldará el crecimiento económico a largo plazo y el desarrollo sostenible en la UE y a escala global. Participarán en la conferencia, junto a otros líderes mundiales, el presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, y el comisario de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete.
Al respecto, el presidente Jean-Claude Juncker ha señalado que «la UE quiere conseguir en París un pacto global ambicioso y vinculante. Fuimos los primeros en presentar en marzo nuestro compromiso climático, que sigue siendo la contribución más ambiciosa que se ha efectuado. Nuestro objetivo de mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 2 °C a finales de siglo aún está al alcance de la mano. Estamos siendo testigos de un movimiento mundial que no tiene precedentes. Confío en que durante las negociaciones de la próxima semana pasemos a la acción. Si la comunidad internacional lleva París a buen puerto, la Humanidad dispondrá de un régimen internacional para combatir de manera eficiente el cambio climático».
En palabras del comisario Arias Cañete, «llegó el momento. París constituye una oportunidad histórica que no podemos desaprovechar. El ímpetu que hemos visto en los preparativos de París debemos ahora traducirlo en un acuerdo ambicioso, operativo y jurídicamente vinculante. Más de 170 países, lo que equivale a más del 95 % de las emisiones mundiales, ya han desvelado antes de la Conferencia sus compromisos para abordar el cambio climático. Esto supone un cambio radical. También es una prueba clara de que los gobiernos comparten la percepción de la urgencia y la determinación política de hacer de París el inicio de un nuevo capítulo de la acción por el clima. Pero no existe margen para la autocomplacencia; la credibilidad del pacto dependerá de estos elementos clave: un objetivo a largo plazo, revisiones periódicas para ir ampliando nuestra ambición y unas normas sólidas sobre transparencia y rendición de cuentas».
Posición de la UE
El aumento de la temperatura media mundial debe mantenerse por debajo de los 2 °C con respecto a los niveles preindustriales para evitar los peores efectos del cambio climático. Para la UE, el nuevo Acuerdo debe enviar una señal clara de la voluntad de los gobiernos de reducir las emisiones de manera suficiente para mantener el aumento de la temperatura por debajo del límite acordado cuando finalice este siglo. La UE estima que un acuerdo creíble incluye lo siguiente:
1. Una visión global de un objetivo a largo plazo que sirva de señal para los grupos de interés, incluidas las empresas, los inversores y el gran público, de la voluntad de efectuar la transición a unas economías con bajas emisiones de carbono.
2. Un mecanismo para revisar periódicamente nuestra ambición colectiva e ir más allá en ella.
3. Un sistema sólido de transparencia y rendición de cuentas para garantizar que las Partes y los interesados puedan confiar en que se cumpla lo prometido.
La UE mantiene su compromiso de hacer efectiva su contribución a la consecución del objetivo conjunto de los países desarrollados de movilizar, para 2020, 100 000 millones USD anuales destinados a medidas de lucha contra el cambio climático en los países en desarrollo. Un informe reciente de la OCDE y la Iniciativa Política sobre el Clima ha puesto de manifiesto que en 2014 se movilizaron 62 000 millones USD, con lo que los países desarrollados ya han avanzado mucho en el logro del objetivo de los 100 000 millones USD. La UE es quien ha proporcionado la mayor contribución a esa financiación.
El 10 de noviembre, los ministros de finanzas de la UE confirmaron (IP/15/6045) que, en 2014, la UE y sus Estados miembros destinaron 14 500 millones EUR de financiación pública (en subvenciones y préstamos) a la lucha contra el cambio climático. Esta cifra supone un aumento significativo en relación con los años precedentes. Entre 2014 y 2020, se destinarán a prestar apoyo a actividades en los países en desarrollo al menos 14 000 millones EUR, es decir, una media de 2 000 millones EUR anuales de subvenciones públicas del presupuesto de la UE.
Eventos durante la COP 21
La UE apoya firmemente la Agenda de Acción Lima-París, una iniciativa de la Presidencia francesa y peruana de la COP destinada a catalizar las actuaciones de múltiples grupos de interés. Se ha organizado un programa de eventos en torno a los temas de la Agenda de Acción que brinda a los actores no estatales, como las empresas, las ciudades y las organizaciones, la posibilidad de efectuar anuncios o destacar ejemplos inspiradores sobre distintos temas. Entre ellos cabe citar el papel de los bosques, del transporte, de los edificios y de la energía renovable en la lucha contra el cambio climático. En el pabellón de la UE en la COP 21 se celebrarán más de cien actos paralelos, que plasmarán estos temas diariamente.